Editorial Alaire

Pilar Morte escribió:Cuando el tiempo frunce las horas sobre el rostro,
desorientarse es fruta derramada, licor vencido,
y pianos de tristeza aceptan perder.

Si mirar hacia adentro es olvidar que hubo ruido,
-chanclas en el asfalto-
enmudeciendo el verbo que sostuvo el andar.

Si la rutina extiende su color en el cuerpo,
y no hay impulso que izar pueda el vuelo;
es hora de sesgar las zarzas,
el cañaveral que cubrió el camino,
(afilados cuchillos rozando el inconsciente),
los guiños que despistan la luz,
el ansia que hunde la garganta.

El bongo no desea romper la partitura,
adormecer sus ecos, la balada vibrante en la piel,
y busca acallar la afonía, ser sordina de inicio
de un prólogo nuevo que renueve el alba.

Fragmentados los límites,
la nada sobre el silencio sincronizan la música,
y oigo....

Pilar Morte escribió: Cuando el tiempo frunce las horas sobre el rostro...

Pilar Morte escribió:... y oigo...

Mario Martínez escribió:Sincronizando música y verso, amiga mía, en un excelente poema con hermosas imágenes que me encantó leer, como siempre. Un abrazo.
Mario.

carmen iglesia escribió:Cuando el tiempo frunce las horas sobre el rostro,
desorientarse es fruta derramada, licor vencido,
y pianos de tristeza aceptan perder.

Si mirar hacia adentro es olvidar que hubo ruido,
-chanclas en el asfalto-
enmudeciendo el verbo que sostuvo el andar.

Si la rutina extiende su color en el cuerpo,
y no hay impulso que izar pueda el vuelo;
es hora de sesgar las zarzas,
el cañaveral que cubrió el camino,
(afilados cuchillos rozando el inconsciente),
los guiños que despistan la luz,
el ansia que hunde la garganta.

El bongo no desea romper la partitura,
adormecer sus ecos, la balada vibrante en la piel,
y busca acallar la afonía, ser sordina de inicio
de un prólogo nuevo que renueve el alba.

Fragmentados los límites,
la nada sobre el silencio sincronizan la música,
y oigo....


Sabes? Cada vez escribes de manera más personal, yo ya te reconozco cuando te leo y pienso que eso es estupendo porque significa encontrar esa manera de expresarse que es única en cada uno.
El poema me ha gustado mucho, de los que te he leído ultímamente el que más. Sólo hay dos versos cuya construcción me suena un poco rara:

y pianos de tristeza aceptan perder

y no hay impulso que izar pueda el vuelo,

pero serán cosas mías, de todas formas, tal vez en el primero yo sustituiría perder por "la pérdida" pero tendría que pensar cómo para mantener el ritmo. Ya que lo he dicho si se me ocurre algo vuelvo y te lo cuento.

Un beso,

Carmen

José Manuel Sáiz escribió:Un poema estupendo, excelente, con el sello y la impronta de calidad que te carateriza.
El propio título ya presagian unos versos para disfrutar. Me gusta tu personal estilo, Pilar.
Un fuerte abrazo.
J. Manuel

Marcos de la Mancebía escribió:

Pilar Morte escribió: Cuando el tiempo frunce las horas sobre el rostro...

Impresionante comienzo

Pilar Morte escribió:... y oigo...

E intrigante final.

El resto vaya para los sentidos.

Un beso

Marcos.