Editorial Alaire

MarRevuelta escribió:Javier, qué se cumpla la utopía y la poesía sea nuestra única bandera. Abrazos

Javier Cañas Belmar escribió: Desnudar mediante la palabra es del todo irrenunciable,
lo que una mirada no logra abarcar, la belleza inescrutable.

Bien merece ser cumplida la utopía, y cual manifiesto,
el caos de la locura sea, por todo poeta, en el alma impregnado.

Es lance obligado despedazar la morada de la razón,
allanar al mundano corazón, para más allá de toda regla
ver la luz que se oculta tras las estrellas;
desenmascarar al ser humano de sus miserias
enalteciendo sus grandezas.

Ser rebelde sin causa, despojarse de mediocres vestimentas,
y, aun a sabiendas que la meta no será jamás cruzada,
sentirse a sólo un paso, cercano y tan lejano
del todo y lo infinito, de la nada y el vacío.

Que bien lo merece la odisea,
la aventura de conquistar plazas imaginarias,
erigir castillos de letras que se desvanezcan junto al viento y las mareas;
volar con alas, aun cortadas, a ciudades nunca soñadas.

Prolonguemos el grito que Ulises lanzó a las barbas
del ciego cíclope Polifemo a quien, una vez burlado, proclamó:
¡”Mi nombre es nadie”!

Que los versos, inmortales, perennes, renazcan por siempre.
Alcemos por única bandera nuestras armas de poeta.

Embarquémonos en un viaje sin retorno, y
emulando a héroe tan humano,
gritemos:

¡Mi nombre es poesía!

Pilar Morte escribió:Estaba pensando: qué es lo que hace encontrarnos tan felices en el foro, qué tiene el poema, y me encuentro con el tuyo donde manifiesta esa necesidad. Puedes suponer que me gustó leerte. Gracias por compartir
Un abrazo
Pilar

Luna de Nos escribió:

Javier Cañas Belmar escribió: Desnudar mediante la palabra es del todo irrenunciable,
lo que una mirada no logra abarcar, la belleza inescrutable.

Bien merece ser cumplida la utopía, y cual manifiesto,
el caos de la locura sea, por todo poeta, en el alma impregnado.

Es lance obligado despedazar la morada de la razón,
allanar al mundano corazón, para más allá de toda regla
ver la luz que se oculta tras las estrellas;
desenmascarar al ser humano de sus miserias
enalteciendo sus grandezas.

Ser rebelde sin causa, despojarse de mediocres vestimentas,
y, aun a sabiendas que la meta no será jamás cruzada,
sentirse a sólo un paso, cercano y tan lejano
del todo y lo infinito, de la nada y el vacío.

Que bien lo merece la odisea,
la aventura de conquistar plazas imaginarias,
erigir castillos de letras que se desvanezcan junto al viento y las mareas;
volar con alas, aun cortadas, a ciudades nunca soñadas.

Prolonguemos el grito que Ulises lanzó a las barbas
del ciego cíclope Polifemo a quien, una vez burlado, proclamó:
¡”Mi nombre es nadie”!

Que los versos, inmortales, perennes, renazcan por siempre.
Alcemos por única bandera nuestras armas de poeta.

Embarquémonos en un viaje sin retorno, y
emulando a héroe tan humano,
gritemos:

¡Mi nombre es poesía!

Javi, a qué ya sabes que me vi en este poema? (sé que es algo presuntuoso decirlo...) así somos, rebeldes, por no sumisos, ni ciegos, ni tontos.
La palabra: viste, la palabra: desnuda, y nosotros la esgrimimos como espada, o la usamos como caricia.
Sigamos volando entre letras y descubriendo que algunos paisajes pueden existir no sólo en la imaginación.
Un abrazo grande, Luna.-

Marcos de la Mancebía escribió:¡Mi nombre es poesía!

Jaume vendrell KYUSS escribió:Si Javier si...Golpeemos con armas de poesía y no a base de hostias. Me suena eso de las armas de poeta, jo jo jo...me gustó hermano. Fuerte abrazo.