Editorial Alaire

¿De qué me serviría la pena y el intento
baldío a todas luces, diminuto
esfuerzo en competir con las tormentas?
No me sirve de nada llorar sobre llovido
ni aunque contenga toda la sal del océano
mi llanto derramado. Aprendí de mi madre
que el cielo nos procura sobre todo la luz
y que es muy conveniente
tener ojos abiertos, dormir solo lo justo,
por si pasa de largo dejándonos a oscuras.
Y es que hasta la ceguera es un mal evitable.

Sobresaliente poema, con ese estilo prosaico, pero tremendamente poético. Ah, y la poesía muy bien tejida e impactante.


Un beso, Bletisa


javier

No hay forma de escapar de estas verdades, Amparo, por eso uno se reconoce y deja que los versos lo llevan, sin más. Siempre es un golpe de fuerza tu poesía.

Un abrazo

Sara

hola Amparo

¿De qué me serviría la pena y el intento
baldío a todas luces, diminuto
esfuerzo en competir con las tormentas?
No me sirve de nada llorar sobre llovido
ni aunque contenga toda la sal del océano
mi llanto derramado. Aprendí de mi madre
que el cielo nos procura sobre todo la luz
y que es muy conveniente
tener ojos abiertos, dormir solo lo justo,
por si pasa de largo dejándonos a oscuras.
Y es que hasta la ceguera es un mal evitable.

Sabio, muy sabio este poema, amiga mía. Escrito por alguien que sabe de la vida, de sus penas, sus lágrimas y del esfuerzo de vivirla y salir adelante. Un poema hermoso y en cierta medida espereranzador. Un placer leerte. Abrazos.
Mario.

La verdad es que estoy hasta el gorro de que se me tache de prosaica en tono despectivo pero camuflado de amabilidad Diego y te ha tocado la china.
Sigo sin saber lo que es poesía; no lo sé todavía pero te aseguro que no me emocionan las imágenes imposibles que huyen del prosaicismo como alma que lleva el diablo para caer en la ridiculez y en la dismorfia ridícula de la imposibilidad más imposible
Eso no es poesía, ni emoción y ni siquiera es un trabajo poético de enjundia. La mayoría de la veces es palabrería pura y dura y un insulto a la inteligencia del lector.
Te podría poner mil ejemplos aquí y ahora pero etoy dispersa y....

Gracias por pasarte Sara, gracias.

Yo soy muy mayor Mario sí y he aprendido mucho. He aprendido sobre todo a saber esperar por ver que pasa.

Te escucho mientras te leo

es así, clarita y sin rollos, tu poesía

se disfruta un montón

No me sirve de nada llorar sobre llovido
ni aunque contenga toda la sal del océano
mi llanto derramado.


... genial, la hago mía

un abrazo

Amparo Bletisa escribió:¿De qué me serviría la pena y el intento
baldío a todas luces, diminuto
esfuerzo en competir con las tormentas?
No me sirve de nada llorar sobre llovido
ni aunque contenga toda la sal del océano
mi llanto derramado. Aprendí de mi madre
que el cielo nos procura sobre todo la luz
y que es muy conveniente
tener ojos abiertos, dormir solo lo justo,
por si pasa de largo dejándonos a oscuras.
Y es que hasta la ceguera es un mal evitable.

La lectura de tu poema, Amparo, me devuelve al mundo de la poesía inteligente, que es la que se entiende, se intuye, y está escrita con inteligencia, inspiración, orden, intencionalidad y el subjetivismo suficiente. Es difícil encontrar una definición de poesía, pero es fácil saber y entender cuándo se encuentra uno ante la poesía, como es éste el caso. Enhorabuena.
Salud.

Hilas tan bien un verso con otro que es fácil deslizarse por tu poema inteligente. Un placer
Un abrazo
Pilar

La vida responsable (Amalia Bautista)


Conducir sin tener un accidente,

comprar desodorante y macarrones

y cortarles las uñas a mis hijas.

Madrugar otra vez, tener cuidado

de no decir inconveniencias, luego

esmerarme en la prosa de unos folios

que me importan exactamente un bledo

y darme colorete en las mejillas.

Recordar la consulta del pediatra,

contestar al correo, tender ropa,

declarar los ingresos, leer libros

y hacer unas llamadas por teléfono.

Me gustaría permitirme el lujo

de tener todo el tiempo que quisiera

para hacer un montón de cosas raras,

cosas innecesarias, prescindibles

y, sobre todo, inútiles y bobas.

Por ejemplo, quererte con locura.


Me la recuerdas mucho, te lo digo siempre... (y es un piropazo porque a mí me encanta). Si por casualidad te gustara, tiene muchos libros publicados pero yo te recomiendo uno: Tres Deseos (Editorial Renacimiento).

Es un regalo que te hago (y de paso me hago) en este miércoles, que para mí es un día tonto, muy tonto...

Un beso

Carmen

"Y es que hasta la ceguera es un mal evitable." Por supuesto que sí. Hermoso tu poema, Amparo. Y desde luego que es bella poesía
Besos.

Gracias Julio. Yo no sé como digo siempre, que es poesía, pero estoy de acuerdo contigo cuando dices que a la poesía se la reconoce enseguida aunque no lleve colgado ningún cartelito.
Muy generoso tu comentario.

Gracias Pilar.

Siempre me lo has dicho sí y tengo que leer todo de ella. En estas vacaciones lo haré.

Disfruta de tu playita guapa.
Muaccc.