Polvo contra la Pared
Publicado: Dom, 05 Jul 2009 16:27
Polvo contra la Pared
Hoy me siento solo como un huevo azul
Hoy me siento triste, en un mundo poblado de plumones y de fibras trepadoras
Hoy me siento culpable, desmedidamente ingrávido, carmesí
Hoy me siento un desparramo de gotas de voz en la cara, la patada, la consecuencia de un trueno de juguete en el teatro
Mis labios negros piden una boca de piedra para asirse. Me arrastro por las pechugas del mundo con las suelas empapadas
Resbalando
Hoy no me siento. Silbo en el barro como un espantapájaros. Camino hacia el arco iris ojival tembloroso como una gota
Estoy como esperando el retorno de un automóvil de dos pisos que trae una palama de gladiolos en el techo
Sé que las cartas se incineran dentro de los buzones. He abierto las cajas de regalo con los puños y jadeando
Hoy me vibran ideas apagadas en el alma como mechas de la cabeza de un títere
Sin embargo, mis piernas tienen la fuerza de los remolcadores del puerto, que arrastran camalotes atestados de corazones en flor
Hoy me conecto como el martillo, y floto como un fósforo
Voy cayendo por arquitecturas de niebla sin sabor, desfibrándome y descoyuntándome como un sombrero de agua
Soy astuto como el compás, achacoso como los episodios de lluvia que suceden en los galpones, o sobre hierros de cortar el pasto
Hoy no me pican las rodillas ni me dan ganas de engullir tartas o helados, parpadeo en el hoyo de los vientos como los cachorros
Hoy me ensancho por la cintura de la igualación, me englobo. Hoy la lengua se me niega y las manos se me han vuelto como espejos en la eventración del agua
Mas no soy y nunca he sido otra cosa que un arrojo de polvo pirético contra la pared
Rafael Teicher
Hoy me siento solo como un huevo azul
Hoy me siento triste, en un mundo poblado de plumones y de fibras trepadoras
Hoy me siento culpable, desmedidamente ingrávido, carmesí
Hoy me siento un desparramo de gotas de voz en la cara, la patada, la consecuencia de un trueno de juguete en el teatro
Mis labios negros piden una boca de piedra para asirse. Me arrastro por las pechugas del mundo con las suelas empapadas
Resbalando
Hoy no me siento. Silbo en el barro como un espantapájaros. Camino hacia el arco iris ojival tembloroso como una gota
Estoy como esperando el retorno de un automóvil de dos pisos que trae una palama de gladiolos en el techo
Sé que las cartas se incineran dentro de los buzones. He abierto las cajas de regalo con los puños y jadeando
Hoy me vibran ideas apagadas en el alma como mechas de la cabeza de un títere
Sin embargo, mis piernas tienen la fuerza de los remolcadores del puerto, que arrastran camalotes atestados de corazones en flor
Hoy me conecto como el martillo, y floto como un fósforo
Voy cayendo por arquitecturas de niebla sin sabor, desfibrándome y descoyuntándome como un sombrero de agua
Soy astuto como el compás, achacoso como los episodios de lluvia que suceden en los galpones, o sobre hierros de cortar el pasto
Hoy no me pican las rodillas ni me dan ganas de engullir tartas o helados, parpadeo en el hoyo de los vientos como los cachorros
Hoy me ensancho por la cintura de la igualación, me englobo. Hoy la lengua se me niega y las manos se me han vuelto como espejos en la eventración del agua
Mas no soy y nunca he sido otra cosa que un arrojo de polvo pirético contra la pared
Rafael Teicher