CARTA A MI MELLIZO

[Ignacio Fajardo]

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CARTA A MI MELLIZO


Y fue que habilitaron jaulas
para el monstruo, al que auguraban
doble, bicéfalo, tetrápodo y brutal.

Tal vez por eso nos separaron poco.

También la bestia se alimentó voraz
con nuestros lloros, nuestras patadas,
mis arañazos a tus ojos, dos rabias
tiernas sin edad.

Después crecimos bizcos, repetidos,
anulados del yo, los dos iguales
tan distintos, los dos callados
por el eco.

No hubo singular en nuestro verbo.
Éramos juguete polimorfo, intercambiable,
-doblemente divertido-

Nos amamos con ese odio fraternal
de los gemelos, sabiéndonos del todo,
sin un rincón que fuera mío,
o tuyo
-perdidos en lo nuestro-

Ahora que estamos lejos,
tuvimos que aprender a ser
tú
y
yo
-cada uno sin el otro-

Y en este nuevo cuerpo
separado,
nos recordamos juntos
-y nos gustamos más-.



...

[Julio Gonzalez Alonso]

Inauguro esta serie de comentarios con una reflexión sobre mis hijas, dos de ellas también mellizas o mielgas, como dicen por mi tierra. La verdad es que, como padre, me preocupé de algunas de las cosas que planteas en el poema, y la verdad es también que me quedo con muchas dudas...
Salud.

[Diego Javier Oruña]

Qué bien has sacado entre las hebras de tus versos la esencia de un antes y presente de dos vidas unidas por muchas cosas, no sólo por la sangre, sino también por algo más. Felicidades, Ignacio, por tan bello poma.


Un abrazo


javier

[Lidia Romero]

Qué bien Ignacio, siempre me ha llamado la atención la relación que se crea entre mellizos o gemelos.

La fusión vivida en la gestación y en el posterior desarrollo, indudablemente crea un vínculo muy singular.

Dices mucho sobre ello en tu poema y me ha gustado cómo lo expresas.

Gracias por mostrarlo.


Saludos

Lidia

[Pilar Morte]

Muy bien descrito el hecho de ser gemelo, con su divertimento y sus problemas de identidad. Me gustó el poema
Un abrazo
Pilar

[emerio henriquez]

Muy buen poema Ignacio.Un tema original y acertado decir. Una lectura amena e interesante.
Un saludo.

[Óscar Distéfano]

Me resulta un magnífico poema (no leí algo parecido). Qué complejidad de sentimientos has arrancado de tu pecho, amigo: ternura, bronca, amor, odio, celos, envidia, etc, etc... Un poemazo.

Un abrazo.
Óscar

[Ignacio Fajardo]

Inauguro esta serie de comentarios con una reflexión sobre mis hijas, dos de ellas también mellizas o mielgas, como dicen por mi tierra. La verdad es que, como padre, me preocupé de algunas de las cosas que planteas en el poema, y la verdad es también que me quedo con muchas dudas...
Salud.

Ha sido costumbre siempre que los mellizos vayan siempre igualitos, siempre juntitos, siempre tan monos (o monas) tan "repetiditos" (aunque no se parezcan ni por asomo, que no todos somos gemelos). Eso no sería problema por sí mismo. Pero es que el mellizo ni una sola vez en su vida es el "rey de la casa" pues desde que nace tiene a un rival al lado. Eso también tiene sus ventajas, pues evita los protagonismos ridículos, pero impide que la personalidad, el yo, se afirme. Es especialmente delicado cuando uno de los dos (y siempre ocurre) tiene la personalidad más fuerte y se impone. Es amor y odio, todo a la vez: "Ni contigo, ni sin tí... tienen mis males remedio". Es una relación distinta a la del resto de los hermanos y será así para siempre, ya digo, en lo bueno y en lo malo.
Ahora ya los suelen separar en los colegios, lo que es bueno; deja que vista cada una como quiera, que tengan sus propias aficiones y actividades diferentes y, por favor, nunca, nunca, las compares entre sí. No dirán nada, pero lo sentirán.

Un abrazo julio y gracias por estar ahí.

[Ignacio Fajardo]

Qué bien has sacado entre las hebras de tus versos la esencia de un antes y presente de dos vidas unidas por muchas cosas, no sólo por la sangre, sino también por algo más. Felicidades, Ignacio, por tan bello poma.


Un abrazo

Muchas gracias Diego por tu comentario reflexivo y fundamentado.

Un abrazo.


javier

[Luna de Nos]

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CARTA A MI MELLIZO


Y fue que habilitaron jaulas
para el monstruo, al que auguraban
doble, bicéfalo, tetrápodo y brutal.

Tal vez por eso nos separaron poco.

También la bestia se alimentó voraz
con nuestros lloros, nuestras patadas,
mis arañazos a tus ojos, dos rabias
tiernas sin edad.

Después crecimos bizcos, repetidos,
anulados del yo, los dos iguales
tan distintos, los dos callados
por el eco.

No hubo singular en nuestro verbo.
Éramos juguete polimorfo,
intercambiable, doblemente divertido.

Nos amamos con ese odio fraternal
de los gemelos, sabiéndonos del todo,
sin un rincón que fuera mío, o tuyo.
Ahogados por lo nuestro.

Ahora que estamos lejos, tuvimos que aprender
a ser tú y yo
-cada uno sin el otro-

Y en este nuevo cuerpo separado,
nos conocemos juntos
y nos gustamos más.


...

Un torrente de sentimientos, supongo que la poesía es eso o eso forma parte de la poesía, o son parte indivisible la una de la otra, o son dos, como ustedes, y uno no es capaz de separarlas...
Me encantó el poema, por su fuerza, por la sinceridad y franqueza con la que habla, un abrazo, Luna.-

[Mario Martínez]

Hola Ignacio

Me han gustado mucho estas reflexiones con respecto a los mellizos, mi ciudad es uno de los puntos geográficos (no sé cual será la razón, quizá la proliferación de cigüeñas, jejeje), donde más mellizos y gemelos hay, hasta el punto de que se suelen hacer concentraciones y acuden hermanos de todos los puntos del pais.
Siempre nos preguntamos sobre las afinidades de estos dobles, tú me has ayudado a conocer algo de ellas. Un abrazo hasta Zaragoza, compañero.
Mario.

[Hallie Hernández Alfaro]

Qué poema tan bueno, Ignacio! Es como si las imágenes se escindieran y segregaran vida y más vida...

Enhorabuena y aplausos muy fuertes!!!!!!!

Hallie

[Tristany Joan Gaspar]

Muy buenoy originaltu poema que pasa por estado angustiosos.
transmites sensaciones de nostalgia y de miedo en tus versos.
meha gustado mucho, me ha llamado mcuho la atención este poema que casi me pierdo.
Mis felicitaciones, aplausos y un cordial abrazo.
Joan

[Ignacio Fajardo]

Qué bien Ignacio, siempre me ha llamado la atención la relación que se crea entre mellizos o gemelos.

La fusión vivida en la gestación y en el posterior desarrollo, indudablemente crea un vínculo muy singular.

Dices mucho sobre ello en tu poema y me ha gustado cómo lo expresas.

Gracias por mostrarlo.


Saludos

Lidia

Gracias Lidia por tu comentario razonado y generoso.

Un beso.

[Ignacio Fajardo]

Muy bien descrito el hecho de ser gemelo, con su divertimento y sus problemas de identidad. Me gustó el poema
Un abrazo
Pilar

Gracias Pilar con tu comentario y tu lectura.

Un beso.