Mentes caducas

[Alejandro Costa López]

Cuando la mente se vuelve caduca
y espiran laureles de coronas pasajeras,
la noche, vagabunda, desconfiada,
se viste de temor y tormenta,
ataviada de vuelos de aire impuro
que a la mente hace soñar despierta.

Los túneles se cierran al horizonte
en la latitud de coordenadas disuasorias,
donde, no existe punto infinito
capaz de imaginar el final de la aurora.

Fluyen lentamente las sensaciones,
y la mente se maltrata,
es demasiado irresponsable amotinar los recuerdos,
dejarlos sin fondear
y no defenderlos en el abordaje.

A veces, somos tan solo lo que vemos,
lo que tras el cristal no se deforma,
aquello que en su esfuerzo mantiene la sombra
y que nos roza y nos pellizca,
para sentirnos vivos, reales.

Y en esa realidad
se encuentran nuestras mentes caducas,
en espera de soñar el último sueño…
… espirando laureles en las cejas dormidas.

[Rossana Arellano]

Alejandro Costa López = RobinHood = Ladrón de versos

Mmmmmm, Bien

Tercera vez que encuentro tu poesía
Recibe un último abrazo del día
Buenas noches por estas latitudes
Te leo
Rossana

[Mario Martínez]

Hola Alejandro

Cuando la mente se vuelve caduca, malo, amigo mío. No hay que dejar que suceda, hay que trabajarla para que siempre se mantenga joven aunque el cuerpo camine hacia el fracaso.
Me gustó el poema. Abrazos.
Mario.

[Pilar Morte]

Por mucho que lo intentemos el deterioro es inevitable, pero hay que seguir en la batalla. Me gustó leerte
Un abrazo
Pilar

[Tristany Joan Gaspar]

Un poema cíclico muy interesante. Parece que se resuelva al final, para rece que ahabla el autor dando luz sobre el tema, pero el poema no hace más que remontarse a su inicío.
Me ha gustado mucho y me ha parecido muy original.
Un abrazo
Joan

[Alejandro Costa López]

Mil besos, tardíos, pero con dicha...
Gracias, Rossana.

[Alejandro Costa López]

Gracias Mario.
Un abrazo.

[Alejandro Costa López]

Gracias por la visita, Pilar.
Un abrazo.

[Alejandro Costa López]

He llegado, Joan, tarde muy tarde, pero he llegado.
Un fuerte abrazo.