Eran negras
Publicado: Mar, 22 Ene 2008 13:32
Una lágrima negra
zigzagueó a través de la penumbra.
Y antes de caer,
y morir para hacerse carne,
me miró, con ironía,
y río a carcajadas.
Y luego tus ojos,
negros, como dos noches negras,
como un alma con rencores,
como un campo de batalla,
luego de la batalla,
recordaron el adiós
y quisieron homenajearla.
Germinaron, veloces,
las gotas de tu espanto,
como arrugas en la frente,
como pensamientos en la espera,
como colores en el alba.
Y una a una se inmolaba,
en honor a la primera,
con su líquido enlutado
por el brillo alegre
de la causa que las congrega.
Y eran negras.
Como una mente baldía,
como el tinte negro
de la tierra fértil,
como el orgullo de una raza,
como las nubes de frío.
Eran negras.
Como un vestido de gala,
como una mentira guardada,
como la sombra de todos,
como las sienes de algunos,
como una viuda de nadie.
Eran negras.
Y antes de inmolarse,
acaso por una cuestión
caprichosamente necesaria
acariciaban
tus pieles blancas.
Christian Cejas.
zigzagueó a través de la penumbra.
Y antes de caer,
y morir para hacerse carne,
me miró, con ironía,
y río a carcajadas.
Y luego tus ojos,
negros, como dos noches negras,
como un alma con rencores,
como un campo de batalla,
luego de la batalla,
recordaron el adiós
y quisieron homenajearla.
Germinaron, veloces,
las gotas de tu espanto,
como arrugas en la frente,
como pensamientos en la espera,
como colores en el alba.
Y una a una se inmolaba,
en honor a la primera,
con su líquido enlutado
por el brillo alegre
de la causa que las congrega.
Y eran negras.
Como una mente baldía,
como el tinte negro
de la tierra fértil,
como el orgullo de una raza,
como las nubes de frío.
Eran negras.
Como un vestido de gala,
como una mentira guardada,
como la sombra de todos,
como las sienes de algunos,
como una viuda de nadie.
Eran negras.
Y antes de inmolarse,
acaso por una cuestión
caprichosamente necesaria
acariciaban
tus pieles blancas.
Christian Cejas.