Editorial Alaire

Como cada mañana desde que el tiempo es tiempo,
el mundo se despereza indolente acusando la resaca vespertina,
luego se contempla ojeroso frente al espejo, incapaz de aceptar su propia imagen,
y mientras se restriega con parsimonia los ojos para quitarse las legañas,
tupidas como una vasta tela de araña,
esboza una mueca de hastío y bosteza enseñándonos sus colmillos,
sucios y buidos y con un frío brillo en el filo.

Con el pitido de la cafetera y el olor a gasolina,
la mediana de la carretera se difumina en rayas de cocaína,
el resplandor de un faro en la niebla nubla la vista de nicotina,
y en un choque frontal, el conductor sale despedido por el parabrisas.

La muerte es un ritual tan antiguo como la noche de los tiempos.

¿Cuántas vueltas de campana nos dará hoy la vida?

© Óscar Bartolomé Poy. Todos los derechos reservados.

Oscar, me produce una sensación muy honda este poema, como si estuvieras contando algo que ya he vivido, y en realidad no es así. Tus imágenes son cada vez más nítidas, más fuertes.
Un poema bellísimo, como todos tus poemas.

Besos.

¿Cuántas vueltas de campana nos dará hoy la vida?

Vete a saber, amigo mío, vete a saber...
Somos campana que el tiempo tañe sin reposo hasta que termina por enmudecernos para siempre.
Me gustó el poema, amigo mío. Un abrazo.
Mario.

Óscar,muy buen poema que disfrute leyendo.Escrito en un lenguaje claro y rotundo,acorde al tema tratado y con el que consigues una gran profundidad.

La vida es un misterio que nos pasa por delante y apenas vislumbramos a adivinar.
Hay tanta locura,tanto absurdo y uno se ve tan pequeño...

Mi enhorabuena y mi saludo.

Un poema excelente y sorprendente, me han cautivado los giros que da el poema hacía situaciones inesperadas, de todas maneras parece que estás contando una historia real.
Felicidades por tu maravilloso ingenio y un fuerte abrazo Óscar.
Joan

Sin duda buenos versos, profundos y heridos en la mano del poeta.

Un gusto, saludos

Espero que si damos una vuelta de campana sea, como el juego, para quedarnos en pié
Un abrazo
Pilar

Aubriel Camila de la Prad escribió:Oscar, me produce una sensación muy honda este poema, como si estuvieras contando algo que ya he vivido, y en realidad no es así. Tus imágenes son cada vez más nítidas, más fuertes.
Un poema bellísimo, como todos tus poemas.

Besos.

Yo tampoco lo he vivido, o sí, lo he vivido en mi imaginación. La imaginación es una experiencia vicaria. Me hablas de provocar sensaciones, y nada deseo más que eso cuando escribo.

Me alegro de que mi poema te haya parecido bello. Un abrazo, mi estimada amiga Aubriel.

Mario Martínez escribió:¿Cuántas vueltas de campana nos dará hoy la vida?

Vete a saber, amigo mío, vete a saber...
Somos campana que el tiempo tañe sin reposo hasta que termina por enmudecernos para siempre.
Me gustó el poema, amigo mío. Un abrazo.
Mario.

Te quedas con el último verso, donde comparto mi duda existencial con el lector, haciéndole partícipe de mis reflexiones.

Gracias por darme tu opinión. Celebro que el poema haya sido de tu agrado. Un abrazo, amigo Mario.

emerio henriquez escribió:Óscar,muy buen poema que disfrute leyendo.Escrito en un lenguaje claro y rotundo,acorde al tema tratado y con el que consigues una gran profundidad.

La vida es un misterio que nos pasa por delante y apenas vislumbramos a adivinar.
Hay tanta locura,tanto absurdo y uno se ve tan pequeño...

Mi enhorabuena y mi saludo.

Me gusta acercarme a esos misterios de la vida, entre los cuales el más insondable es la muerte. Celebro que hayas disfrutado de mi poema, y que te haya gustado el lenguaje utilizado.

Saludos, Emerio, y un placer verte por mis letras.

ÓSCAR...


la muerte es un hábito tan cotidiano como ese pitido de la cafetera, compañero.

Excelentes tus letras.


Un abrazo

como la vida misma...grande tu poema...un abrazo Oscar

Precioso poema, amigo Óscar.
Ese giro hacia el verso largo, creo que te favorece mucho, y puede que no sea casual, ya que tu prosa es excelente y el verso libre mayor es, dentro del mundo de los versos, lo que más se le parece.
Ha sido un placer leerte. Felicidades por el poema.
Un cordial abrazo.

Tristany Joan Gaspar escribió:Un poema excelente y sorprendente, me han cautivado los giros que da el poema hacía situaciones inesperadas, de todas maneras parece que estás contando una historia real.
Felicidades por tu maravilloso ingenio y un fuerte abrazo Óscar.
Joan

Por suerte para mí, no es real, en un sentido biográfico, aunque es una historia que ocurre a diario: una persona se levanta después de una noche de excesos, desayuna, coge el coche (hasta ahí todo normal y rutinario) y, en un descuido, pierde el control y la vida en la carretera. Y todos los años vividos se pierden en unas milésimas de segundo. En fin, una realidad de telediario.

Me alegro de que te haya gustado y sorprendido mi reflexión sobre el ritual de la muerte, tan antiguo como la vida. Un abrazo, mi estimado amigo Joan.

Joan Port escribió:Sin duda buenos versos, profundos y heridos en la mano del poeta.

Un gusto, saludos

Celebro que hayas apreciado esa profundidad en mis versos.

Saludos, Joan, y gracias por tu opinión.