Editorial Alaire

En agradecimiento a Rafael


La tormenta humedece las canciones azules
sembrando el aire de polen caduco.
Toma el racimo ajeno buscando el germinado último,
que haga cosecha en los surcos del alma.

La tristeza dibuja la distancia y ciega el norte.
Ya no sirve mirar hacia atrás -al este de la luz-
solo el poniente entiende el rayo que oculta el día´
el que amó cuanto celan las tinieblas,
y nos llevó sendero verde al trono del centro.

Hoy despierta la música que lapida la voz del día,
enredando vientre y alma, confundiendo las claves;
agotando la retina donde muere la imagen,
el rostro que desnuda la soledad.

Sin pensar, mil pavesas rodearon mi nombre
de un tronco ajeno que fundía esperanza y amistad,
dejando briznas de luz, luciérnagas de un verso,
y una estrella donde sostener el sueño

Leyendo estos dos versos:

Ya no sirve mirar hacia atrás -al este de la luz-
solo el poniente entiende el rayo que oculta el día´
ya mereció la pena la lectura.

El resto no hace sino acrecentar el estremecimiento.

J

Luego entraré, en cuanto pueda escribirte algo más o menos a la medida de tu regalo, o eso espero porque hoy tengo un día de lo más movidito.
En fin, tener amigas como tú es un gran lujo, del que yo obviamente me siento muy satisfecho. Agradecido hasta el entrecejo, o más, recibe un abrazote de tu amigo Rafel.

Ya no sirve mirar hacia atrás -al este de la luz-
solo el poniente entiende el rayo que oculta el día´ "


París bien vale una misa...

Un gran abrazo.

José Manuel F. Febles

Todo un derroche de sensibilidad, Pilar. Este canto tuyo a la amistad, llenará de alegría a Rafael, pero también a quienes pensamos que la amistad es, por encima de cualquier otra cosa, lo más valioso que podemos dar y recibir.

Aplausos, guajina.

Blanca

Es un poema bellísimo, Pilar y como dice Blanca, de una sensibilidad extraordinaria. Un lujo cantarle así a la amistad. Un abrazo.

Pilar Morte escribió:En agradecimiento a Rafael


La tormenta humedece las canciones azules
sembrando el aire de polen caduco.
Toma el racimo ajeno buscando el germinado último,
que haga cosecha en los surcos del alma.

La tristeza dibuja la distancia y ciega el norte.
Ya no sirve mirar hacia atrás -al este de la luz-
solo el poniente entiende el rayo que oculta el día´
el que amó cuanto celan las tinieblas,
y nos llevó sendero verde al trono del centro.

Hoy despierta la música que lapida la voz del día,
enredando vientre y alma, confundiendo las claves;
agotando la retina donde muere la imagen,
el rostro que desnuda la soledad.

Sin pensar, mil pavesas rodearon mi nombre
de un tronco ajeno que fundía esperanza y amistad,
dejando briznas de luz, luciérnagas de un verso,
y una estrella donde sostener el sueño

El poema va in crescendo, hasta acabar en dos estrofas laudables. Ese verso en el que hablas de "briznas de luz" y de luciérnagas me ha parecido fantástico, conmovedor. Se nota que Rafel está encantado con el homenaje que le has dispensado. Como para no estarlo.

Saludos a ambos, y enhorabuena a ti, Pilar, por este hermoso poema.

aplaudo tu inspiración Pilar y aplaudo a Rafael por inspirarte


fuerte abrazo

.

Es precioso, Pilar. Derrama sensibilidad y cariño por todos lados!

Abrazotes para ti y para Rafael.

Se escuchan mis aplausos, eh??

Hallie

Delicado homenaje (supongo que a Rafael Calle) donde la palabra se hace dueña del mensaje. Miras a poniente y ultimas los sonidos del día. Es el momento de la magia y la poesía.

Un beso con cariño.

josé ortiz escribió:Leyendo estos dos versos:

Ya no sirve mirar hacia atrás -al este de la luz-
solo el poniente entiende el rayo que oculta el día´
ya mereció la pena la lectura.

El resto no hace sino acrecentar el estremecimiento.

J

Gracias por dejar tu huella a mis letras. Me alegra verte
Un abrazo
Pilar

José Manuel F. Febles escribió:Ya no sirve mirar hacia atrás -al este de la luz-
solo el poniente entiende el rayo que oculta el día´ "


París bien vale una misa...

Un gran abrazo.

José Manuel F. Febles

Gracias por acercarte y dejar tu huella
Un abrazo
Pilar

Hoy despierta la música que lapida la voz del día,
enredando vientre y alma, confundiendo las claves;
agotando la retina donde muere la imagen,
el rostro que desnuda la soledad.

El poder de la palabra es inmenso, amiga mía, como inmensas son las imágenes que encierra este brillante poema. Un placer leerte. Abrazos.
Mario.

Rafel Calle escribió:Luego entraré, en cuanto pueda escribirte algo más o menos a la medida de tu regalo, o eso espero porque hoy tengo un día de lo más movidito.
En fin, tener amigas como tú es un gran lujo, del que yo obviamente me siento muy satisfecho. Agradecido hasta el entrecejo, o más, recibe un abrazote de tu amigo Rafel.

El lujo es haberos conocido. Me alegra tu agradecimiento
Un abrazo
Pilar

Blanca Sandino escribió:Todo un derroche de sensibilidad, Pilar. Este canto tuyo a la amistad, llenará de alegría a Rafael, pero también a quienes pensamos que la amistad es, por encima de cualquier otra cosa, lo más valioso que podemos dar y recibir.

Aplausos, guajina.

Blanca

Me alegra sentirte cerca. Realmente es un gran valor el de la amistad
Un abrazo
Pilar