Editorial Alaire

Empieza el llanto
de la guitarra.
Se rompen las copas de la madrugada.
Empieza el llanto de la guitarra.
Es inútil callarla.
Es imposible callarla.
Llora monótona
como llora el agua,
como llora el viento
sobre la nevada.
Es imposible callarla.

(F.Garcia Lorca)



GUITARRA



Guitarra de taberna, arrinconada
sin traste ni cordal en tu armadura,
que no hay nadie que abrace tu cintura
a la compaña de una voz templada

Yo sé muy bien que en la oquedad callada
de tu canoro vientre aún perdura
el olvidado son, la partitura
de una canción de amor desesperada.

En tu oscuro brocal tiembla el lamento,
la resignada nota retenida,
el arpegio varado en tu instrumento.

¡Ay guitarra gitana, adormecida,
qué saben del prodigio de ese tiento
clavado entre los surcos de tu herida!

©



Tiento: palo del flamenco


<bgsound>

Amigo Vicente, junto con darte la bienvenida, te felicito por este excelente poema; un soneto lleno de emoción y de lenguaje, de riqueza en todo el sentido de la palabra. Un gusto leerte y saberte en nuestro foro.

Un abrazo fraterno, Benjamín.

Muchas gracias, Benjamín.
Es un placer recibir la bienvenida y el elogio de quien tanto admiro y aprecio.


Mi abrazo

Vicente Fernández-Cortés escribió:Empieza el llanto
de la guitarra.
Se rompen las copas de la madrugada.
Empieza el llanto de la guitarra.
Es inútil callarla.
Es imposible callarla.
Llora monótona
como llora el agua,
como llora el viento
sobre la nevada.
Es imposible callarla.

(F.Garcia Lorca)



GUITARRA



Guitarra de taberna, arrinconada
sin traste ni cordal en tu armadura,
que no hay nadie que abrace tu cintura
a la compaña de una voz templada

Yo sé muy bien que en la oquedad callada
de tu canoro vientre aún perdura
el olvidado son, la partitura
de una canción de amor desesperada.

En tu oscuro brocal tiembla el lamento,
la resignada nota retenida,
el arpegio varado en tu instrumento.

¡Ay guitarra gitana, adormecida,
qué saben del prodigio de ese tiento
clavado entre los surcos de tu herida!

©


Tiento: palo del flamenco


<bgsound>

Aunque no soy muy dado a los sonetos, éste me ha parecido digno de mención. El segundo cuarteto y el primer terceto contienen abundantes dosis de belleza, con un lenguaje rico en matices: "canoro vientre", "oscuro brocal", "arpegio varado"... Hay un buen uso de la adjetivación.

Saludos, Vicente, y bienvenido a este foro.

¡Vaya! Me ha salido un competidor en sonetos.
Y además uno que puede hacerme sombra.
Debería estar triste, y sin embargo, ya ves estoy contento, que digo, contentísimo de que estás aquí, amigo mío. Pues no sabes cómo echaba de menos a alguien que también se inspirase en consonancias. Aunque debo de reconocer que mi poesía consonante (ya sabes que lo libre me va menos), ha sido acogida en estos foros de estupenda manera, como sé que será acogida la tuya (y todo cuanto publiques, no lo dudes).
He vuelto a releer el soneto. Realmente excepcional.
En fin, bienvenido a los foros y un abrazo, querido compañero.
Mario.

Yo sé muy bien que en la oquedad callada
de tu canoro vientre aún perdura
el olvidado son, la partitura
de una canción de amor desesperada.

En tu oscuro brocal tiembla el lamento,
la resignada nota retenida,
el arpegio varado en tu instrumento.

Caray, me ha encantado. Y qué envidia, pero qué envidia, me da.


Blanca


Oh Dios mío oh Dios mío oh Dios mío. Ahora, además de a Mario, ¿tendré que aborrecer, también, a él? Cachis en la mar...

Muchas gracias, Oscar, por valorar en tan alta estima este soneto inspirado en esas viejas guitarras desvencijadas y colgadas en muchos mesones antiguos de nuestra geografía española. Soy guitarrista aficionado y siempre me ha dado pena esa imagen evocadora de glorias pasadas ya resueltas por el inevitable desgaste que produce el tiempo, ese cruel e inexorable depredador de toda existencia.


Mi abrazo

¡Vaya! Me ha salido un competidor en sonetos.
Y además uno que puede hacerme sombra.

Me temo, querido amigo, que este nuevo forista que accede al foro con su exiguo cartapacio de sonetos no hará sombra alguna a tu reconocido magisterio en el dominio del monstruo de catorce patas.
En cualquier caso se agradece el sobresalto y el elogio.

Mi abrazo fuerte

No creo yo, Blanca, que pueda ni deba suscitar envidia a nadie. Estoy seguro que cualquier poeta de este foro, incluida por supuesto tú, escribis mejores sonetos que yo.
De todas formas, muchas gracias por tu valoración.

Mi abrazo