Editorial Alaire

Mario Martínez escribió:Hola Joan

Hay días


que sabe dulce la muerte


Hay días en que la muerte sabe a vida, pero son los menos.
Aunque te confieso que algunas veces también a mi me sabe a rojo terciopelo de tristezas. Me gustó el poema. Un abrazo.
Mario.

Aubriel Camila de la Prad escribió:"... al perfume de olvidadas violetas."

Todos los recursos sensoriales en tu poema, Joan. Se ve, se huele, se palpa, hasta huele a muerte dulce, a violetas. Y emociona.
Es un poemazo!

Besos.

Maika Silva escribió:Si sentirnos vencidos implica entregarnos de lleno a un perfume tan hermoso como el de las violetas, quizás no sea tan malo el espectáculo.
Diría yo que pensamos demasiado, caballero, pero de una u otra forma todos acabaremos dandonos por vencidos, al final de cuentas la vida nos pasa por encima cuanto más creemos estar en control de la misma.
Creo que hay que peregrinar...ya le dije, dejar volar las obligaciones, soltar lo que tenemos asido fuertemente como si nos perteneciera y perdernos en las tristezas y alegrías inesperadas de aquél que recorre un camino que no espera y que, por ende, no puede preveer.
Claro, yo lo se, es una quimera pero, quizás un día lo rapte y le obligue a comenzar a luchar de veras.
De mi mundo onírico al suyo, caballero.
.:Tati:. Asi es amiga mia quizas no sea tan mala la derrota, ese perfume que nace en la piel del desertor. Abrazos siempre.

Pilar Morte escribió:Retratas muy bién el sabor que a veces tiene la muerte. Un placer leerte
Un abrazo
Pilar

carmen iglesia escribió:Este poema tiene un aire así como de hermosa decadencia.

Por cierto, este verso

a espejo empañando en vaho

no sé si la forma verbal no es la que debía ser o es el artículo o es que yo no lo he entendido:

a espejo empañado en vaho

a espejo empañando el vaho

Me gustó.

Un abrazo,

Carmen

Fermín Lasarte escribió:Hermoso Joan, ante pluma caigo de nuevo amigo. Es genial la nostalgia que expelen tus versos. Hay días que la muerte sabe a poemas lentos que conmueven a los lectores. Tu poema sabe a una muerte dulce. Me encantó compañero.
Un abrazo grande.