Editorial Alaire

A Sara A., con amor y devoción

Libérame de las ataduras de la carne,
elévame por encima de la mortal condición,
liba mi alma con tu lengua de mariposa
y dibuja con ella en el aire una espiral de amor.

Sólo tú puedes hacerlo,
sólo tú tienes ese don,
quiero dejar de ser humano
y sólo a ti te es dado convertirme en un dios.

Fertiliza mi espíritu con tu polen,
chúpame hasta la última gota de sangre
y déjame exangüe, ahíto de amor;
mátame para hacerme revivir,
que pronto brotaré de la tierra con raíces nuevas,
convertido en el árbol de la vida,
tu mágico elixir.

Ya no quiero ser cuerpo,
ya he perdido mi caparazón,
ya nunca más seré oruga,
nunca más volveré a arrastrarme por el suelo,
porque ahora vuelo, vuelo como una mariposa,
ahora soy el eco de una caracola
en la blanca arena de tu corazón.

© Óscar Bartolomé Poy. Todos los derechos reservados.

Hola Óscar



Libérame de las ataduras de la carne,
elévame por encima de la mortal condición,
liba mi alma con tu lengua de mariposa
y dibuja con ella en el aire una espiral de amor.


Ya el primer cuarteto deja entreveer la belleza del poema y su fuerza expresiva. La total lectura de los versos lo confirma. Fue un placer leerte, amigo mío, Abrazos.
Mario.

Estoy de acuerdo con la opinión de Mario.


Blanca

vehemencia, excitación por alzar el vuelo,
por liberarse de esa manifiesta carnalidad
que nos embiste y atropella en su abuso

te leo compañero

.

Envidia me está dando Sara de ser la inspiración de estos versos tan hermosos.
Un placer leerte
Un abrazo
Pilar

Óscar Bartolomé Poy,
Siempre grato leerte, este dedicado una bella pieza poética de enormes imágenes desde el principio hasta el fin, tu poema exquisito banquete para el alma lleno de esa magia que tú sabes imprimirle a tus letras, enhorabuena tu poesía.

Cariños y mi admiración
ligia

Notable intento en el que la vehemencia evoca el sentimiento más desagarradoramente romántico. La versificación, muy interesante. Felicidades, Óscar.
Salud.

Óscar Bartolomé Poy,

Magnífica estructura, tema y ritmo


te felicito

querido amigo

Un abrazo fuerte

me ha encantado este poema Óscar, tiene mucha fuerza y nos arrastra a compartir tus sentimientos.
me ha gustado de principio a fin.
Excelente.

Un fuerte abrazo

Joan

Mario Martínez escribió:Hola Óscar



Libérame de las ataduras de la carne,
elévame por encima de la mortal condición,
liba mi alma con tu lengua de mariposa
y dibuja con ella en el aire una espiral de amor.


Ya el primer cuarteto deja entreveer la belleza del poema y su fuerza expresiva. La total lectura de los versos lo confirma. Fue un placer leerte, amigo mío, Abrazos.
Mario.

Gracias por ser el primero en comentar mi poema. Siempre me agrada que me indiquen qué versos han gustado más.

Saludos, Mario.

Blanca Sandino escribió:Estoy de acuerdo con la opinión de Mario.


Blanca

Me alegro. Gracias por tu escueto comentario, Blanca.

Alonso de Molina escribió:vehemencia, excitación por alzar el vuelo,
por liberarse de esa manifiesta carnalidad
que nos embiste y atropella en su abuso

te leo compañero

.

No seré como Platón y diré que la carne es la cárcel del alma -juntas están mejor que separadas, y el cuerpo es nuestro vehículo sensitivo-, pero desde el punto de vista poético, es una idea muy atractiva.

Saludos, Alonso.

Pilar Morte escribió:Envidia me está dando Sara de ser la inspiración de estos versos tan hermosos.
Un placer leerte
Un abrazo
Pilar

A mí, como a Kierkegaard, lo que me da envidia es el espejo, que puede capturar y devolver la imagen de Sara.

Un abrazo, Pilar, y gracias por el comentario.

Óscar Bartolomé Poy escribió:A Sara A., con amor y devoción

Libérame de las ataduras de la carne,
elévame por encima de la mortal condición,
liba mi alma con tu lengua de mariposa
y dibuja con ella en el aire una espiral de amor.

Sólo tú puedes hacerlo,
sólo tú tienes ese don,
quiero dejar de ser humano
y sólo a ti te es dado convertirme en un dios.

Fertiliza mi espíritu con tu polen,
chúpame hasta la última gota de sangre
y déjame exangüe, ahíto de amor;
mátame para hacerme revivir,
que pronto brotaré de la tierra con raíces nuevas,
convertido en el árbol de la vida,
tu mágico elixir.

Ya no quiero ser cuerpo,
ya he perdido mi caparazón,
ya nunca más seré oruga,
nunca más volveré a arrastrarme por el suelo,
porque ahora vuelo, vuelo como una mariposa,
ahora soy el eco de una caracola
en la blanca arena de tu corazón.

© Óscar Bartolomé Poy. Todos los derechos reservados.

Hermoso, Oscar! Es, de los poemas tuyos que he leído, uno de los más románticos.
Como siempre las imágenes son maravillosas y como siempre hacés uso de la anáfora de una manera magistral.
Mis aplausos para tu talento.

Besos.

Ligia Calderón Romero escribió:Óscar Bartolomé Poy,
Siempre grato leerte, este dedicado una bella pieza poética de enormes imágenes desde el principio hasta el fin, tu poema exquisito banquete para el alma lleno de esa magia que tú sabes imprimirle a tus letras, enhorabuena tu poesía.

Cariños y mi admiración
ligia

Me alegra verte por aquí, Ligia. Gracias por tu comentario. Me alegro de que te hayan gustado las imágenes de mi poema.

Un abrazo, mi estimada amiga.