Editorial Alaire

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Los ojos de los niños.


Los ojos de los niños
son como
los ojos del hambre
o los ojos
del amor;
cada mañana se abren
buscando
nuevos horizontes
y cálidos soles,
y se cierran cada noche
con la angustia de un sueño
- vida fantasma -
en su retina
cansada. O con bailes imposibles
de estrellas
y princesas. A veces,
con nada.

Los ojos de los niños
interrogan siempre;
les encantan y sorprenden
el pájaro y la gota
que se desprende pura
del alero.

Los ojos de los niños
están tristes
en los días grises del invierno.

Los ojos
de los niños
son como
los ojos del hambre
o los ojos
del amor.

Son miradas sin sombra
al miedo de la vida. Respuestas
de pupilas abiertas al asombro.

Como los ojos
del hambre.

Desgranan sonrisas luminosas
o lágrimas
en los juegos
o en el viento
o en los ojos del amor.

Así son
los ojos de los niños.

http://www.imaxenes.com/imagen/124g_1_1il8798.jpg.html*
*
Gracias a imaXenes.com por el servicio de alojamiento de imágenes.


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Son miradas sin sombra
al miedo de la vida. Respuestas
de pupilas abiertas al asombro.

Como los ojos
del hambre.

Aplausos emocionados, l
agun maitea.

Blanca

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http://www.imaxenes.com/imagen/124g_1_1il8798.jpg.html*
*
Gracias a imaXenes.com por el servicio de alojamiento de imágenes.


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Me parece un gran acierto, amigo Julio, la elección del verso corto para este poema entrañable, delicado como el giro de una peonza.

Un abrazo,

Esteban

Hay dulzura en estos ojos de niño. Un placer leerlo
Un abrazo
Pilar

.


Conmovedores versos ilustrados por esas imagenes de inocencia que desgraciadamente se pierde dando paso al odio. Enhorabuena amigo Julio.

Iben Xavier


.

Julio González Alonso,
Buena analogía entre los ojos de los niños y los ojos del hambre. Describes bien esa curiosidad infantil de los ojos interrogativos abiertos como platos.

Saludos, Julio.

Hermoso y entrañable poema, querido amigo Julio.
Los niños, el amor, el hambre, sí, todo ello de importancia vital para los ojos que tendrán un día la vista muy cansada.
En fin, ha sido un placer leerte. Felicidades.
Un fuerte abrazo.

[JUSTIFY]Bravo Julio. ademàs de crear hermosos versos, construiste bellas imàgenes a travès de los ojos de los niños, me encantò la descripciòn y comparaciòn de los ojos con el hambre, màs allà de los famèlicos, tambièn estàn los voràces de curiosidad y esperanzas, tu poesìa tiene vida.
Felicitaciones, no te habìa leìdo nunca.

Sandra.[/JUSTIFY]

Hola Julio

Los ojos de los niños suelen ser hermosos, amigo mío, que me lo digan a mí cuando me veo reflejado en los de mi nieto. Pero a veces también son tristes, hay muchos niños tristes en este mundo.
Me encantó tu poema, compañero. un abrazo.
Mario.

tiernos versos Julio

me dejas pensando, pensando....

un abrazo

Blanca Sandino escribió:

Son miradas sin sombra
al miedo de la vida. Respuestas
de pupilas abiertas al asombro.

Como los ojos
del hambre.

Aplausos emocionados,
lagun maitea.

Blanca

Emocionado agradecimiento, querida amiga.
Salud.

Te leo, amigo Julio, con la emoción que el texto produce. Y te leo después de haber leído a Alonso citando tu poema; esa honda mirada poética a la mirada de los niños. Justo en este momento escribía algo sobre Gabriela Mistral y citaba que ella, maestra de América, como fue conocida o reconocida, donó todo lo que produjera su libro “Tala”, a la larga el más valorado por los estudiosos, a los niños huérfanos de la guerra civil española. Pienso en los ojos de los niños, esos niños que citas, y pienso en la labor humana del poeta, de cantar o denunciar, de hacer de la poesía un acto que supere la palabra y que se transforme en vida, en compromiso y en acción. Hay muchos niños marcados por el mundo, por los errores de otros, por la incomprensión de los humanos. Un excelente poema, Julio, donde lo formal es ampliamente ocultado por la belleza estética y por la emoción que el poema produce. Un gusto.

Un abrazo fraterno, Benjamín.

Esteban Granado escribió:Me parece un gran acierto, amigo Julio, la elección del verso corto para este poema entrañable, delicado como el giro de una peonza.

Un abrazo,

Esteban

Amigo Esteban, nadie como tú ha definido con notable acierto -a mi entender-el ritmo de este poema: de peonza. Y es que sí, eso me parece encontrar del juego infantil en estos versos que son pretendidamente ligeros y de apariencia infantil en el decir, o esa fue mi intención. Pero, de manera inconsciente, algo debió colarse de los juegos con que se distraen los niños. ¡Será de verlos tantos años durante tantos días y tantas horas! No sé, pero me ha gustado.
Muchas gracias y un abrazo.
Salud.

Pilar Morte escribió:Hay dulzura en estos ojos de niño. Un placer leerlo
Un abrazo
Pilar

Quien sabe descubrir esa dulzura, amiga Pilar, conserva lo mejor de su infancia en su corazón. Gracias por tu comentario y un abrazo.
Salud.

Iben Xavier Lorenzana escribió:.


Conmovedores versos ilustrados por esas imagenes de inocencia que desgraciadamente se pierde dando paso al odio. Enhorabuena amigo Julio.

Iben Xavier


.

Gracias, amigo Iben; comparto tu inquietud por lo que sigue a la pérdida de la inocencia infantil.

Salud.