Editorial Alaire

Piedra a piedra enmudece la fuente. Ayer, un ayer no lejano, aún transcurría un hilo de agua y quedaba paciencia para llenar el cántaro. Hoy, la soledad pasea descalza calle arriba. Silba el viento en las gárgolas, secas, desnudas; disminuidas por la balconada huérfana de flores. Te espero; Moisés -rescatado del río- cruza sigiloso el alar. Bajo la luz de una luna azul y fría, sus ojos brillan como un presagio. Oigo tu voz llamándolo: «michina michina», entonces, animo al agua: ¡hierve, hierve! Regresas cansado, como cada noche, pero tu beso, como siempre, sabe a calor de hogar: a ti.


Blanca Sandino

Un gran gusto Blanca. Saludos.

Qué bonito y cuanta emoción en estas líneas
Un abrazo
Pilar

Rolando del Pozo escribió:Un gran gusto Blanca. Saludos.

Gracias, Rolando. Muchas.

Blanca

Gracias, Pilar. Surgió este texto de una visita a un pueblo de Castilla. Allí conocí a Moises. Moises... era un gata preciosa : ). Se quedaba inmóvil y durante un rato te miraba intensamente. Finalmente 'achinaba' los ojos. Si tus pensamientos eran limpios, se arqueba, se estiraba, se acercaba a ti, y tomaba asiento a tus pies. Eso decían sus dueños.

A veces, pienso que he tenido muchísima suerte. Hay tantas personas a quienes aprecio y recuerdo, que. Bueno, ya sabes lo que quiero decir.


Gracias. Muchas.

Pilar Morte escribió:Qué bonito y cuanta emoción en estas líneas
Un abrazo
Pilar