Editorial Alaire

ATRÁS QUEDAN


Atrás quedan los venenosos pétalos
de una flor de cuyo abrazo huido
temblaba las solapas de mi vida.

Atrás, esa lluvia de noches insomnes
ese frío invierno azotándome
las venas gastadas por penumbras.

Atrás queda la herida sin ternura de su acento
las vanas palabras pronunciadas
el glaciar de indiferencia de sus besos.

Atrás,
todo queda atrás,

menos tú,

que has llegado con la inocente lluvia,
con el aroma ausente de proscritas auroras,

sobre tus sendas
voy sembrando un latido,

aunque mis días anden demacrados de pensarte
aún queda un esplendor en mis manos confusas
y nuevos amaneceres donde inventarnos.

Buen poema, Manuel.

Blanca

Atrás,
todo queda atrás,

menos tú,

que has llegado con la inocente lluvia,
con el aroma ausente de proscritas auroras,

sobre tus sendas
voy sembrando un latido,

aunque mis días anden demacrados de pensarte
aún queda un esplendor en mis manos confusas
y nuevos amaneceres donde inventarnos.

Me encanto esa melanconlia amigo, sobre tus sendas voy sembrando un latido.

Me encanto, saludos.

Gracias Joan y Blanca, muchas







http://gonzavales.blogspot.com

Manuel Gonzalez Vales escribió:


ATRÁS QUEDAN


Atrás quedan los venenosos pétalos
de una flor de cuyo abrazo huido
temblaba las solapas de mi vida.

Atrás, esa lluvia de noches insomnes
ese frío invierno azotándome
las venas gastadas por penumbras.

Atrás queda la herida sin ternura de su acento
las vanas palabras pronunciadas
el glaciar de indiferencia de sus besos.

Atrás,
todo queda atrás,

menos tú,

que has llegado con la inocente lluvia,
con el aroma ausente de proscritas auroras,

sobre tus sendas
voy sembrando un latido,

aunque mis días anden demacrados de pensarte
aún queda un esplendor en mis manos confusas
y nuevos amaneceres donde inventarnos.

El poema me ha gustado mucho, en líneas generales, pero esos cuatro versos que te he subrayado me han parecido de una belleza extraordinaria. En tus letras hay amor, romanticismo, nostalgia y esperanza, ¿qué más se puede pedir?

Saludos, Manuel, y un placer conocer tu poesía.