Un día alzarás los ojos...y me verás en el techo.
Un día sabrás que habito...insolente en tu lecho.
Un día estaré durmiendo...debajo de tus papeles.
Un día estaré cantando...en tu vaso y tus manteles.
Un día verás que asomo ...por tu máquina callada,
para pedirte que escribas...mi carta tan esperada.
Un día al irte a dormir...o despierto en la alborada,
creerás hallar el aroma...de mi perfume en tu almohada.
Un día al llegar a casa...querrás que yo te abra la puerta.
ese día verás mi rostro...por tu ventana desierta.
Un día cuando te nombren...creerás que yo te llamo.
Un día sabrás que mi ausencia...te cosquillea en las manos.
Un día irás por la casa...buscando quién sabe qué,
ese día oirás mis pasos ...caminando trás tus pies.
Un día abrirás los brazos...para buscar mi tibieza,
ese día sentirás el hombro vacío ...del peso de mi cabeza.
Un día no muy lejano...mis mágicas jugarretas,
harán que dejes de lado...los gestos de tu careta.
Un día vas a mandarme tu angustia...en un telegrama,
sabiendo que no es posible...que siga siendo un fantasma.
El día que esto suceda...comprenderás de repente,
que nada en el mundo importa,
cuando te duele la ausencia.
SOLEDAD REY