Editorial Alaire

En la profunda sima de los extremos
las luces parpadean su olor de abeto;
una rama vencida, sin destino,
observa que los astros son pompas de jabón
que de celeste arcilla invisten cada imagen.

Revestidos de vodka,
de café o con zapatos de cristal
encienden sin olvidos los envases de plata,
en tanto que un aliento con ojos apretados
escarba los sonidos, las campanas,
los olores del blanco invierno
a la sombra de una estrella sin pausa,
donde una madre y su hijo, arrodillados,
inmersos en la fría memoria de los témpanos,
fingen ser el incendio que alimenta la noche.


Hay un lago olvidado en los océanos,
una danza postrada a la miseria.

Hay
un árbol desnudando los desiertos
un corazón sujeto con cristales
y un día en Navidad lleno de hartura.


En las últimas horas esparcidas de barro
unas manos susurran cabizbajas,
congeladas, sin más brillo ni lunas
que entallen los disfraces, proclamando oropeles
con “padresnuestros” abatidos
y vértigos clavados en los sueños;

morirse
será la reclusión final del alarido,
los trucos de la muerte, las agujas calladas
de un mundo sin misterio ni estaciones.

Así es la raza que acuna el aguacero

Sorprendente, Alonso. Un magnífico poema de Navidad, un poema de altura que va creciendo verso a verso, manteniendo la tensión hasta llegar a su excelente final. Mi admirado aplauso.
Un abrazo.
Julián Borao

Sobre todo en la segunda parte, Alonso, logras dotar al poema de un lenguaje poético altísimo, donde además, la expresión rítmica fragua al léxico y lo vuelve alto, sorprendente, pero cercano. Hay un dolor de vida, un aroma a cotidiano, pero oculto de las propias realidades humanas, en tu poema. Existe una visión poética del todo, que aún en el espanto, edifica la conciencia humana. Hay poesía, de la alta, en este poema. Un gusto leerte, buen amigo, en unos días te cobraré los mojitos pendientes en Almería.

Un abrazo fraterno, desde Mallorca, desde el sueño, B.

Precioso poema que nos muestra una visión diferente de la Navidad. Un placer leerte esta mañana
Un abrazo y Feliz Navidad
Pilar

Alonso de Molina escribió:
Hay un lago olvidado en los océanos,
una danza postrada a la miseria.

Esos dos versos, Alonso, que podrían aparentar ser los menos poéticos de todos, lo son, en mi opinión, mucho más. Son un revulsivo, llevan al lector que hasta el momento permanecía expectante -las fechas, el sonido conducen a ello-, cobijado en un ritmo que le es conocido, a la cruda realidad que ya no se oculta, del resto del poema. Duros pero igualmente bellos.

"Así es la raza que acuna el aguacero"

Cierto, muy cierto. Así son. Así somos.

Gran, gran, gran poema.

Feliz Navidad, y cariños para ambos.

Blanca

Un gran placer Alonso. Saludos cordiales.

Muy bueno este poema. Por el título pensé encontrarme otra cosa... pero bien puede leerse prefectamente fuera del contexto de la navidad. Elegancia y maestría define tu escrito, siempre a mi humilde criterio (que no es poco, jejeje, es broma).
Excelente, amigo Alonso.
Un abrazo
J. Manuel

Excelente poema, un final espectaculay y un título con trampa.

Me ha gustado muchisimo leerlo, me ha parecido un gran poema.

Mis felicitaciones y un fuerte abrazo

Joan

Alonso de Molina escribió:



En la profunda sima de los extremos
las luces parpadean su olor de abeto;
una rama vencida, sin destino,
observa que los astros son pompas de jabón
que de celeste arcilla invisten cada imagen.

Revestidos de vodka,
de café o con zapatos de cristal
encienden sin olvidos los envases de plata,
en tanto que un aliento con ojos apretados
escarba los sonidos, las campanas,
los olores del blanco invierno
a la sombra de una estrella sin pausa,
donde una madre y su hijo, arrodillados,
inmersos en la fría memoria de los témpanos,
fingen ser el incendio que alimenta la noche.


Hay un lago olvidado en los océanos,
una danza postrada a la miseria.

Hay
un árbol desnudando los desiertos
un corazón sujeto con cristales
y un día en Navidad lleno de hartura.


En las últimas horas esparcidas de barro
unas manos susurran cabizbajas,
congeladas, sin más brillo ni lunas
que entallen los disfraces, proclamando oropeles
con “padresnuestros” abatidos
y vértigos clavados en los sueños;

morirse
será la reclusión final del alarido,
los trucos de la muerte, las agujas calladas
de un mundo sin misterio ni estaciones.

Así es la raza que acuna el aguacero

Estimado amigo Alonso:

La enorme abundancia de metáforas
con un significado casi críptico
y sublimemente poético
que nos ofrece este poema
hacen de él
casi un Tratado de Hermenéutica
que por extrañas sendas
conduce y cautiva al lector.

No me canso de leerlo
y disfrutar cada vez con nuevos matices
de su riqueza expresiva.

Felicidades y un abrazo.

* * *

Ante un poema como éste, sólo queda ponerse de pie y Sentir.

Ovación cerrada!!

Hallie

Va un abrazo fuerte de navidad para tí y los tuyos.

julián borao escribió:Sorprendente, Alonso. Un magnífico poema de Navidad, un poema de altura que va creciendo verso a verso, manteniendo la tensión hasta llegar a su excelente final. Mi admirado aplauso.
Un abrazo.
Julián Borao

gracias por tus buenas palabras querido Julián


Te deseo lo mejor

Feliz Navidad y Año nuevo 2009

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Benjamín León escribió:Sobre todo en la segunda parte, Alonso, logras dotar al poema de un lenguaje poético altísimo, donde además, la expresión rítmica fragua al léxico y lo vuelve alto, sorprendente, pero cercano. Hay un dolor de vida, un aroma a cotidiano, pero oculto de las propias realidades humanas, en tu poema. Existe una visión poética del todo, que aún en el espanto, edifica la conciencia humana. Hay poesía, de la alta, en este poema. Un gusto leerte, buen amigo, en unos días te cobraré los mojitos pendientes en Almería.

Un abrazo fraterno, desde Mallorca, desde el sueño, B.

coincido contigo B.
a la parte primera, sobre todo al inicio demasiado directo,
debiera darle una manecita de barniz, remozarla en arena
o conectarle un quinqué, algo que la haga brillar,...
algo tendré que hacerle

te agradezco mucho tu crítica, se aprende siempre, y los buenos ojos con que miras mis textos


otro abrazo, nos vemos muy pronto en Almería



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Pilar Morte escribió:Precioso poema que nos muestra una visión diferente de la Navidad. Un placer leerte esta mañana
Un abrazo y Feliz Navidad
Pilar

Muchísimas gracias Pilar por tu amable comentario

Te deseo lo mejor

Feliz Navidad y Año nuevo 2009

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Blanca Sandino escribió:

Alonso de Molina escribió:
Hay un lago olvidado en los océanos,
una danza postrada a la miseria.

Esos dos versos, Alonso, que podrían aparentar ser los menos poéticos de todos, lo son, en mi opinión, mucho más. Son un revulsivo, llevan al lector que hasta el momento permanecía expectante -las fechas, el sonido conducen a ello-, cobijado en un ritmo que le es conocido, a la cruda realidad que ya no se oculta, del resto del poema. Duros pero igualmente bellos.

"Así es la raza que acuna el aguacero"

Cierto, muy cierto. Así son. Así somos.

Gran, gran, gran poema.

Feliz Navidad, y cariños para ambos.

Blanca

Blanca

un fuerte abrazo para ti, gracias por estar siempre

Te deseo lo mejor

Feliz Navidad y Año nuevo 2009

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Rolando del Pozo escribió:Un gran placer Alonso. Saludos cordiales.

gracias Rolando, el placer mío por verte aquí


Te deseo lo mejor

Feliz Navidad y Año nuevo 2009

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