Editorial Alaire

Yo pensé primero en un vagón sin madre,
en una tableta de chocolate mutilada
o en una vértebra que amara la locura de las gaviotas.
Su perfil es de labios rojos, su cintura quiebra la manzana
o surge como la fosa abisal del mediodía.
Me adentro en el redil de los monstruos mecánicos,
busco la piedra en un ojo de gelatina,
se descabeza un número con cuchillos de primavera.
¿Por qué no cantan pájaros
en las espigas del cementerio?
Tengo en las manos bramidos de mar,
quinielas que el hombre de gris no tatuó,
las mañanas aquí forman un eco
de estómagos azules.

.

El impacto de tus versos es fantastico, amigo Ramon. Mi reverencia.

Iben Xavier

Ramón Carballal,

Me estoy acostumbrando a la calidad suprema de tus versos...


gracias por comaprtir

un abrazo fuerte

Ramón Carballal escribió:
Yo pensé primero en un vagón sin madre,
en una tableta de chocolate mutilada
o en una vértebra que amara la locura de las gaviotas.
Su perfil es de labios rojos, su cintura quiebra la manzana
o surge como la fosa abisal del mediodía.
Me adentro en el perfil de los monstruos mecánicos,
busco la piedra en un ojo de gelatina,
se descabeza un número con cuchillos de primavera.
¿Por qué no cantan pájaros
en las espigas del cementerio?
Tengo en las manos bramidos de mar,
quinielas que el hombre de gris no tatuó,
las mañanas aquí forman un eco
de estómagos azules.

hay fuerza, originalidad y mucha maestria en tus versos...grande amigo. un abrazo

Iben Xavier Lorenzana escribió:.

El impacto de tus versos es fantastico, amigo Ramon. Mi reverencia.

Iben Xavier

Gracias por tu generoso comentario, Iben. Un abrazo.

Yo pensé primero en un vagón sin madre,
en una tableta de chocolate mutilada
o en una vértebra que amara la locura de las gaviotas.
Su perfil es de labios rojos, su cintura quiebra la manzana
o surge como la fosa abisal del mediodía.
Me adentro en el perfil de los monstruos mecánicos,
busco la piedra en un ojo de gelatina,
se descabeza un número con cuchillos de primavera.
¿Por qué no cantan pájaros
en las espigas del cementerio?
Tengo en las manos bramidos de mar,
quinielas que el hombre de gris no tatuó,
las mañanas aquí forman un eco
de estómagos azules.


Me dices por allí, en otro post, que siempre me acuerdo de comentarte; y es verdad, pero mira, con todo el respeto que le tengo a tu persona: te digo que te comento porque me encanta tu poesía y en ello no me mueve nada más que eso, digo, no es por ser tu amigo de letras, si no por tu talento.

Ahora los palos Jjejeje bueno, vamos a este poema tan bello en sus metáforas, pero sabes algo; se me escapa su significado, pues creo que es un lenguaje interno el que desarrollas, y tú me dirás -vamos hombre, como todos- jejeje, así que para mí el mercado es uno mismo y también el mercado de afuera; es toda sensación mezclándose en este poema y toda tristeza también, como un eco, como todo eco, azul y triste.

No lo entendí mucho, si me gusto mucho en sus imágenes y como siempre lo disfrute.

A tu salud amigo; desde Mendoza.

Tengo en las manos bramidos de mar,
quinielas que el hombre de gris no tatuó,
las mañanas aquí forman un eco
de estómagos azules.

En tu línea, en tu estilo, y pleno de imágenes. Me ha gustado mucho, Ramón. Y por poner un pero chiquito chiquito, y que no tiene ninguna importancia, hay dos 'perfil' my cercanos, igual son precisos, no estoy segura. Y quizá, si no cambiara mucho el significado que has querido dar, en el segundo de los versos que destaco (por destacar alguno) 'quinielas' me ha sonado... iba a decir 'moderna', pero no es eso, y no encuentro la forma de explicarlo. Bueno, digamos que el verso me ha encantado, incluso prescindiendo de ella: 'Tengo en las manos bramidos de mar que el hombre de gris no tatuó'.

No la echo de menos : )

Aplausos, guajín.

Blanca

Ricardo Serna G escribió:Ramón Carballal,

Me estoy acostumbrando a la calidad suprema de tus versos...


gracias por comaprtir

un abrazo fuerte

Siempre generoso, Ricardo. Muchas gracias por tus palabras. Un abrazo.

Jaume vendrell KYUSS escribió:

Ramón Carballal escribió:
Yo pensé primero en un vagón sin madre,
en una tableta de chocolate mutilada
o en una vértebra que amara la locura de las gaviotas.
Su perfil es de labios rojos, su cintura quiebra la manzana
o surge como la fosa abisal del mediodía.
Me adentro en el perfil de los monstruos mecánicos,
busco la piedra en un ojo de gelatina,
se descabeza un número con cuchillos de primavera.
¿Por qué no cantan pájaros
en las espigas del cementerio?
Tengo en las manos bramidos de mar,
quinielas que el hombre de gris no tatuó,
las mañanas aquí forman un eco
de estómagos azules.

hay fuerza, originalidad y mucha maestria en tus versos...grande amigo. un abrazo

Muchas gracais, Jaume, por tu amable comentario. Un abrazo.

Blanca Sandino escribió:

Tengo en las manos bramidos de mar,
quinielas que el hombre de gris no tatuó,
las mañanas aquí forman un eco
de estómagos azules.

En tu línea, en tu estilo, y pleno de imágenes. Me ha gustado mucho, Ramón. Y por poner un pero chiquito chiquito, y que no tiene ninguna importancia, hay dos 'perfil' my cercanos, igual son precisos, no estoy segura. Y quizá, si no cambiara mucho el significado que has querido dar, en el segundo de los versos que destaco (por destacar alguno) 'quinielas' me ha sonado... iba a decir 'moderna', pero no es eso, y no encuentro la forma de explicarlo. Bueno, digamos que el verso me ha encantado, incluso prescindiendo de ella: 'Tengo en las manos bramidos de mar que el hombre de gris no tatuó'.

No la echo de menos : )

Aplausos, guajín.

Blanca

Tienes razón, Blanca y te agradezco la apreciación, sobra un "perfil". Tenia la impresión de que lo habia subsanado cuando leí el borrador, pero veo que no fue así, haré una corrección que intente no cambiar el sentido que le quise dar al poema. La otra palabra: "quinielas" si me parece necesaria. Gracias, amiga, por tu opinión. Un abrazo.

Hay mucha fuerza en tus versos. Disfruté del poema
Un abrazo
Pilar

Cavicchia escribió:Yo pensé primero en un vagón sin madre,
en una tableta de chocolate mutilada
o en una vértebra que amara la locura de las gaviotas.
Su perfil es de labios rojos, su cintura quiebra la manzana
o surge como la fosa abisal del mediodía.
Me adentro en el perfil de los monstruos mecánicos,
busco la piedra en un ojo de gelatina,
se descabeza un número con cuchillos de primavera.
¿Por qué no cantan pájaros
en las espigas del cementerio?
Tengo en las manos bramidos de mar,
quinielas que el hombre de gris no tatuó,
las mañanas aquí forman un eco
de estómagos azules.


Me dices por allí, en otro post, que siempre me acuerdo de comentarte; y es verdad, pero mira, con todo el respeto que le tengo a tu persona: te digo que te comento porque me encanta tu poesía y en ello no me mueve nada más que eso, digo, no es por ser tu amigo de letras, si no por tu talento.

Ahora los palos Jjejeje bueno, vamos a este poema tan bello en sus metáforas, pero sabes algo; se me escapa su significado, pues creo que es un lenguaje interno el que desarrollas, y tú me dirás -vamos hombre, como todos- jejeje, así que para mí el mercado es uno mismo y también el mercado de afuera; es toda sensación mezclándose en este poema y toda tristeza también, como un eco, como todo eco, azul y triste.

No lo entendí mucho, si me gusto mucho en sus imágenes y como siempre lo disfrute.

A tu salud amigo; desde Mendoza.

Tengo el defecto(o la virtud, no lo sé)de no ver la realidad tal y como es, cuando la pienso se me ocurren poemas como éste que, quizá, respondan a unos códigos demasiado personales.
En mi ciudad habia un precioso mercado antiguo que fue derribado para construir uno nuevo, ultamoderno. Este poema es producto de la visita que hice a las nuevas instalaciones. Los primeros versos responden a la impresión exterior del edificio, los siguientes a algunas cosas que me pareció percibir al pasearme entre los puestos, etc. Siempre confío en que la complicidad o la imaginación del lector puedan sintonizar con este tipo de poemas, a veces se consigue y otras, no. Gracias por darme tu opinión sincera, Gustavo. Un abrazo.

Ramón Carballal escribió:

Cavicchia escribió:Yo pensé primero en un vagón sin madre,
en una tableta de chocolate mutilada
o en una vértebra que amara la locura de las gaviotas.
Su perfil es de labios rojos, su cintura quiebra la manzana
o surge como la fosa abisal del mediodía.
Me adentro en el perfil de los monstruos mecánicos,
busco la piedra en un ojo de gelatina,
se descabeza un número con cuchillos de primavera.
¿Por qué no cantan pájaros
en las espigas del cementerio?
Tengo en las manos bramidos de mar,
quinielas que el hombre de gris no tatuó,
las mañanas aquí forman un eco
de estómagos azules.


Me dices por allí, en otro post, que siempre me acuerdo de comentarte; y es verdad, pero mira, con todo el respeto que le tengo a tu persona: te digo que te comento porque me encanta tu poesía y en ello no me mueve nada más que eso, digo, no es por ser tu amigo de letras, si no por tu talento.

Ahora los palos Jjejeje bueno, vamos a este poema tan bello en sus metáforas, pero sabes algo; se me escapa su significado, pues creo que es un lenguaje interno el que desarrollas, y tú me dirás -vamos hombre, como todos- jejeje, así que para mí el mercado es uno mismo y también el mercado de afuera; es toda sensación mezclándose en este poema y toda tristeza también, como un eco, como todo eco, azul y triste.

No lo entendí mucho, si me gusto mucho en sus imágenes y como siempre lo disfrute.

A tu salud amigo; desde Mendoza.

Tengo el defecto(o la virtud, no lo sé)de no ver la realidad tal y como es, cuando la pienso se me ocurren poemas como éste que, quizá, respondan a unos códigos demasiado personales.
En mi ciudad habia un precioso mercado antiguo que fue derribado para construir uno nuevo, ultamoderno. Este poema es producto de la visita que hice a las nuevas instalaciones. Los primeros versos responden a la impresión exterior del edificio, los siguientes a algunas cosas que me pareció percibir al pasearme entre los puestos, etc. Siempre confío en que la complicidad o la imaginación del lector puedan sintonizar con este tipo de poemas, a veces se consigue y otras, no. Gracias por darme tu opinión sincera, Gustavo. Un abrazo.

Claro que es una virtud, ya lo sabia jejeje, por eso me gusta tu poesía.

En parte creo que me paso esto con el poema porque el titulo queda en la cabecera de la página y no encima de las letras de los primeros versos, veo que la mayoría aquí hace eso, pero sabes, la mente y la mirada buscan naturalmente el centro de la página y en esto yo creo, que en toda obra o texto, el titulo es lo más importante, y en si, el primer eslabón para una correcta elaboración de un escrito.

Pero tienes toda la razón y la comparto plenamente contigo; es el poema quien busca a sus lectores, quien en definitiva forma una díada con aquel que cree que lo elige, sin darnos cuenta que es al revés.

La poesía vive; tu poesía amigo.


Un abrazo.

Pilar Morte escribió:Hay mucha fuerza en tus versos. Disfruté del poema
Un abrazo
Pilar

Gracias por dejar tu huella, Pilar. Un abrazo.

A propósito de lo leído en los comentarios sólo puedo decir que, a mi entender, la poesía sólo es posible desde una mirada personal... Y creo que tú la tienes, lo has demostrado de sobra... Por eso y por la riqueza de tus imágenes (algunas casi mágicas) sigues siendo de mis lecturas favoritas en este y en todos los lares...

Abrazotes de sábado,

Carmen