Editorial Alaire

Veinticinco años de espera
no se miden en relojes.

Lo sé porque odiabas mi verbo:
si negro, si opaco, si triste.

Y era una forma de negar el tiempo
hablarme de algún retrato,
desnudarte en un libro,
cantar conmigo
la lenta caída de los raíles.

Nunca comprendí el espacio
que parecía nudo.

Por eso ahora te cedo mi mesa
y no encuentro
en el menú del restaurante chino
ni tu cuerpo ni mi hambre.

Qué buen poema de amor!! y tiene una dureza, cierta parquedad que me encanto.

Gran poema Ramón, gran alegría también de leerlo este lunes.

Un abrazo y mis respeto a tu poesía.

.Veinticinco años de espera
no se miden en relojes.
.Con menos criptografía, para que los fabricantes de garabatos como yo lo entendamos mejor *sonrisas*, te has escrito un bello poema de amor y desamor. Enhorabuena.

Iben Xavier

Lo había leído? Creo que sip... Y es claro como el agua... Desamor de ese que nos persigue a todos... y el tiempo haciendo su tarea...

Me gustan tus poemas, por eso regreso.

Besotes,

Carmen

Observo un giro en la estructura del poema con respecto a los últimos, pero me ha gustado mucho como muestras la problemática del amor.
Un abrazo
Pilar

Es un poema precioso Ramón, pleno de imágenes de las que cortan, esas que hacen de la poesía un lenguaje indispensable en aquellas cosas que de otro modo, nunca serían contadas en su exactitud.

Un abrazo

Sara

Cavicchia escribió:Qué buen poema de amor!! y tiene una dureza, cierta parquedad que me encanto.

Gran poema Ramón, gran alegría también de leerlo este lunes.

Un abrazo y mis respeto a tu poesía.

Gracias, Gustavo, por tu amable comentario. Un abrazo.

Iben Xavier Lorenzana escribió:.Veinticinco años de espera
no se miden en relojes.
.Con menos criptografía, para que los fabricantes de garabatos como yo lo entendamos mejor *sonrisas*, te has escrito un bello poema de amor y desamor. Enhorabuena.

Iben Xavier

Gracias por tus palabras, Iben. Un abrazo.

Un poema completo que me ha gustado leer.
El remate es contundente y con sugerentes matices.
Para releerlo, estimado.

Un abrazo.
Óscar

No, veinticinco años de espera no se miden en relojes. Desde luego que no.

Verso corto en este caso, pero con un ritmo tan bueno como acostumbras, Ramón.


Blanca

Las metáforas son inteligentes. El poema logra con las palabras justas ofrecer un abánico de sensaciones claras y concretas que hace que el escrito ronde la perfección. La mente no se pierde en oscuros callejones. Un poema muy bueno.
Un abrazo.
J. Manuel

¡Qué poemazo, Ramón! Me dejó muda, tildada frente a la pc.
¡Buenísimo!

Un verdadero placer leerte.

Saludos y felicitaciones.

carmen iglesia escribió:Lo había leído? Creo que sip... Y es claro como el agua... Desamor de ese que nos persigue a todos... y el tiempo haciendo su tarea...

Me gustan tus poemas, por eso regreso.

Besotes,

Carmen

Seguro que lo has leido, Carmen, no es un poema nuevo. Besotes y mil gracias por el regreso.

Pilar Morte escribió:Observo un giro en la estructura del poema con respecto a los últimos, pero me ha gustado mucho como muestras la problemática del amor.
Un abrazo
Pilar

Un abrazo, Pilar, y muchas gracias por tu comentario.

Sara Castelar Lorca escribió:Es un poema precioso Ramón, pleno de imágenes de las que cortan, esas que hacen de la poesía un lenguaje indispensable en aquellas cosas que de otro modo, nunca serían contadas en su exactitud.

Un abrazo

Sara

Gracias, Sara, me alegra que te guste el poema. Un abrazo.