Editorial Alaire

En sobresalto,
vi esparcidos por las aguas rotas
los pétalos de mis sueños,
llevándose con ellos,
la bella fragancia de la inspiración
custodiada.

Caminé, herida,
por las cornisas de un escurridizo
verbo ceniciento.
Era el vacío, la sequedad
de un brillo tras el amanecer
de escarcha.
Era la mudez de un eco
aprisionado por la rojiza nada.

Súbitamente,
el letargo de las horas sin rimas,
profirió, él mismo, un grito de necesaria rebeldía.
Y fue el mar, para quedarse,
la esperanza azul que me obnubila,
la danza sutil de las sinalefas.

Y tú y yo
―nos volvimos, eternamente somos―,
el refugio del sagrado recuerdo,
donde jamás mueren
los lirios.

Todos los derechos reservados.

Bello en su tristeza, Carmela:

Celebro que hayas vuelto. Se te echaba de menos en este foro.

Tu poema es suave, sutil y exquisito.

Felicidades
Un abrazo
Ana

Este poema de gran lirismo y belleza esquisita exhala mucha tristeza a partir de un lenguaje evocador y utilizando recursos como la metáfora.
Un saludo, amiga Carmela, de uno nuevo.

Ana Muela Sopeña escribió: ↑Mié, 10 Dic 2025 23:25 Bello en su tristeza, Carmela:

Celebro que hayas vuelto. Se te echaba de menos en este foro.

Tu poema es suave, sutil y exquisito.

Felicidades
Un abrazo
Ana

Muchas gracias, querida Ana, por tu presencia y bellas palabras al poema.
Yo tambien los he echado mucho de menos!
Abrazos.

Horacio O'Clock escribió: ↑Jue, 11 Dic 2025 1:36 Este poema de gran lirismo y belleza esquisita exhala mucha tristeza a partir de un lenguaje evocador y utilizando recursos como la metáfora.
Un saludo, amiga Carmela, de uno nuevo.

Muchas gracias por tan amable comentario, Horacio. Celebro que disfrutaras de la lectura.
Bienvenido a Alaire!
Abrazos.

De una belleza arrebatadora este poema. Me alegra leerte de nuevo, es evidente que sigues en plena forma. Un fuerte abrazo.

Me parece muy bello ser los guardianes, junto a la pareja, de lo recuerdos. Ambos pueden agrandar momentos.
Me ha gustado la suavidad por la que discurre el poema hasta ese final original.
Un beso.

Precioso, Carmela.

Es tan triste como lírico y poético.

Me alegra verte de nuevo y con más fuerza.

Me ha gustado mucho.

Un beso.

Me ha encantado volver a leerte, Carmela.
Como te he oído recitar poemas, ahora cuando los leo los imagino con tu voz, y todavía me gustan más.
Precioso el final. Todos deberíamos ser un "tu y yo", donde vivan los lirios.
Gracias.
Abrazos.

Ramón Carballal escribió: ↑Jue, 11 Dic 2025 18:27 De una belleza arrebatadora este poema. Me alegra leerte de nuevo, es evidente que sigues en plena forma. Un fuerte abrazo.

Muchas gracias por tu presencia y palabras en estos versos, Ramón.
Volver se hacía imperioso, por retomar el camino de las letras,pero aún más por leer el camino de los otros.
Otro abrazo.

Ana García escribió: ↑Jue, 11 Dic 2025 19:49 Me parece muy bello ser los guardianes, junto a la pareja, de lo recuerdos. Ambos pueden agrandar momentos.
Me ha gustado la suavidad por la que discurre el poema hasta ese final original.
Un beso.

Muchas gracias,Ana,por destacar la esencia del poema. Perdida la palabra, solo ese refugio da sentido a todo.
Gracias por tu presencia.
Un beso.

Alejandro Costa escribió: ↑Jue, 11 Dic 2025 20:21 Precioso, Carmela.

Es tan triste como lírico y poético.

Me alegra verte de nuevo y con más fuerza.

Me ha gustado mucho.

Un beso.

Siempre amables tus palabras, Alejandro. Muchas gracias.
Celebro que disfrutaras del poema y me alegra tu alegría por mí vuelta.
Abrazos.

Ulises C.J. escribió: ↑Jue, 11 Dic 2025 22:26 Me ha encantado volver a leerte, Carmela.
Como te he oído recitar poemas, ahora cuando los leo los imagino con tu voz, y todavía me gustan más.
Precioso el final. Todos deberíamos ser un "tu y yo", donde vivan los lirios.
Gracias.
Abrazos.

Ulises, muchas gracias por tu presencia aquí y tus palabras. Recitar poemas en la radio fue un gran desafío para mí jeje
La culpa de los finales buenos la tienen los recuerdos y los lirios. Sin ellos, no hay inspiración.
Abrazos.