Editorial Alaire

Mundo de alquitrán,
sobra el vacío en esta habitación,
desborda en la calle
lo que te di alguna vez,
soy el mosquito en el negro ámbar,
la larva que no nace,
corazón de petróleo,
la metáfora que no leíste,
colgando en la larga sombra de un espino,
las luciérnagas cayeron al universo,
al pasado,
lentamente,
como una lágrima de hierro fundida
hundiéndose en aceite espeso,
sin tocar fondo, alejándose,
acercándose al amado olvido.

No recordaba el odio,
menos el amor,
andar por ahí lleno de grietas es común,
puedo mirar entre rendijas,
lo roto cuenta una historia,
me observo de reojo,
cuando mi espejo lo permite,
en lo que queda de el y entre el vapor,
en la quebrazón de la vida
y con los ojos trizados,
ciego en la penumbra,
¿pero sabes?
me sé la casa de memoria,
huelo las flores del mal,
salgo al patio y el sur arrastra la espada,
caen degollados los pájaros del ayer.

.....................................................................................
Siento subir un poema así, pero es lo que siento estos días.
Saludos compañeros.

Dentro de su tortura, tiene versos tan bellos como dolorosos.

Es un buen poema.

Espero que no te afecte en demasia.

Un abrazo.

Es un poema muy bien desarrollado. Evoca, duele, impele, dignifica sentidos y penas...
Gracias por compartir, Antonio.

Salud y felicidad.

Me gusta hasta el título, Antonio.

Es un gran poema y no te arrepientas nunca de escribir lo que sientes porque es necesario, libera, exorciza, sana el alma y nos gusta leerte.

Un abrazo enorme.

Unos versos iniciales que no nos preparan para el estallido final. Van al degüello del dolor.
Te felicito.
Salud.

Hay versos muy fuertes, y tan hermosos como dolorosos en tu poema.

Quizás estos sean "de los más simples" por llamarlos de alguna manera (jamás despectiva), pero son los que a mí me parecen desgarradores:

"Sobra el vacío en esta habitación"

"No recordaba el odio,
menos el amor,"

Me encantó.

Un abrazo.

Muchas gracias a cada uno de ustedes compañeros, como lo vengo diciendo desde ya hace bastante tiempo, me cuesta cada vez más escribir, no me dan ganas, solo lo hago cuando estoy muy acongojado.
Aprecio cada una de sus palabras, un abrazo.

Satír,