Editorial Alaire

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Ni alto ni bajo, con la barba cuidada y los ojos llenos. Despacio, entre los rieles de su camino, avanza hasta la estepa de los ambiciosos. Calibra la estrategia en sus mapas emocionales... abierto el pecho a los dardos, no advierte la ensoñación del miedo. Sus piernas, arcos de triunfo, rescatan el movimiento de las espadas. No las necesita en su mente cautelarísima, no las usa en su roce amatorio ni las deja a merced de la vida de sus músculos.
Es un hombre vivo, veterano redentor de mejillas lejanas, de áreas sublimes o de nubes magistrales.
¿Quién podría ser el espejo de sus arcanos deseos? ¿Quién podría estrujar labiales rosa contra su piel inmune?
El cazador de lengua rica en fonemas, no retrocede ni un paso, no se desmarca de la subjetiva condición de ser místico varón.
Ni grueso ni delgado, con las flechas desenvainadas, imita a un Cupido hormonal, mientras Anteros se posa, sobre el correspondido sol de cien mil universos.
El cazador vence la ancestral batalla o así parece creerlo.
Ha devorado su presa de pelo largo y sedoso, ha bebido sus jugos con la desesperada iniciación de los mortales sedientos.

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Muy buena la estructura de este cazador, bajo los dioses, romano y griego, y la exaltación total del amor y la pasión.

Si he de serte sincero, he tenido que leerlo tres veces, porque se me ha ido la mente por otros derroteros. Espero que mi comentario sea lo más cercano posible a la realidad del escrito.

Sea como fuere, el escrito, tal y como lo planteas, tal y como lo he leído, me ha parecido muy bueno.

Un beso.

Alejandro Costa escribió: ↑Jue, 17 Jul 2025 19:40 Muy buena la estructura de este cazador, bajo los dioses, romano y griego, y la exaltación total del amor y la pasión.

Si he de serte sincero, he tenido que leerlo tres veces, porque se me ha ido la mente por otros derroteros. Espero que mi comentario sea lo más cercano posible a la realidad del escrito.

Sea como fuere, el escrito, tal y como lo planteas, tal y como lo he leído, me ha parecido muy bueno.

Un beso.

Agradezco muchísimo tu reflejo, querido Alejandro.
Es bueno que la aguda y brillante mente lectora se vaya por otros derroteros, esto hace que las palabras sean, un nido de provechosas interacciones. El poema es un ser vivo, una percepción nada estática.
Tu comentario es un tesoro, gracias por estar.

Besos y feliz verano.

interesantes versos y èpicos.
javier

Como es ya costumbre en tus poemas, Hallie, los versos lo hacen pensar a uno; e investigar incluso.

Hace muchos años, estudiando filosofía, me pasaron por delante los mitos greco-romanos, pero a Anteros no lo tenía presente -y confieso que a Cupido nunca le presté mucha atención- (la verdad es que de las mitologías que han pasado delante de mi vista, la greco-romana es la que menos ha despertado mi interés).

Pues me has hecho revisar información sobre el asunto, y me has hecho llegar a una conclusión: Hasta ahora en mi vida me he cruzado con Cupido, no con Anteros. Y así me ha ido.

En tu poema el "flechero" es el varón. Pero hay damas flecheras. Aunque tal vez no lo saben. Tal vez sueñan con Anteros mientras solo están dando curso a lo que aquí llamamos un "metejón". Un entusiasmo vigoroso pero muchas veces perecedero.

Excelente texto, Hallie. Para quedarse meditando.

Mi abrazo fraterno.

Lisandro

Hola, Hallie.
Estoy releyendo una colección de relatos cortos de Eduardo Galeano, que en 1995 publicó Alianza Editorial con el título "Mujeres". Por lo que agradezco, sobremanera, este "cazador".

Fonda aperta, raíña.

Javier Dicenzo escribió: ↑Jue, 17 Jul 2025 22:39 interesantes versos y èpicos.
javier

Gracias por tu generoso reflejo, Javier.
Salud y felicidad.

Lisandro Sánchez escribió: ↑Jue, 17 Jul 2025 22:57 Como es ya costumbre en tus poemas, Hallie, los versos lo hacen pensar a uno; e investigar incluso.

Hace muchos años, estudiando filosofía, me pasaron por delante los mitos greco-romanos, pero a Anteros no lo tenía presente -y confieso que a Cupido nunca le presté mucha atención- (la verdad es que de las mitologías que han pasado delante de mi vista, la greco-romana es la que menos ha despertado mi interés).

Pues me has hecho revisar información sobre el asunto, y me has hecho llegar a una conclusión: Hasta ahora en mi vida me he cruzado con Cupido, no con Anteros. Y así me ha ido.

En tu poema el "flechero" es el varón. Pero hay damas flecheras. Aunque tal vez no lo saben. Tal vez sueñan con Anteros mientras solo están dando curso a lo que aquí llamamos un "metejón". Un entusiasmo vigoroso pero muchas veces perecedero.

Excelente texto, Hallie. Para quedarse meditando.

Mi abrazo fraterno.

Lisandro

Gracias de corazón por la atención de tu lectura, Lisandro.

Cupido y Anteros, vaya dos (guiño). Suele ocurrir que el primero se lleve los honores y genere lágrimas (no siempre, claro). Has dado en la diana, es el responsable (a ver si podemos responsabilizar a un mito, eh) de los metejones, los jueguecitos de Cupido terminan en enamoramientos obsesivos, así como vos decís: transitorios, aunque acusen grandes niveles de respetable pasión. Anteros es el "gestor" mitológico de los amores correspondidos, se encarga de lazos más profundos...
Cazador es un hombre, uno revestido de chispas divinas, un hacedor, un valiente y, también un mortal ansioso. La masculinidad ancestral con sus mandatos interiores, con su cerebro espiado por la neurociencia, exhibe patrones y libera conductas.
Mente y cuerpo, espadas y palabras, urgencias y vida.

Un abrazo grande, querido compañero.

xaime oroza carballo escribió: ↑Jue, 17 Jul 2025 23:58 Hola, Hallie.
Estoy releyendo una colección de relatos cortos de Eduardo Galeano, que en 1995 publicó Alianza Editorial con el título "Mujeres". Por lo que agradezco, sobremanera, este "cazador".

Fonda aperta, raíña.

Querido Xaime, la generosidad de tu palabra irradia mucha luz; creo firmemente en el efecto mariposa, quizá la relectura de Mujeres ha generado un movimiento imperceptible, pero muy poderoso, que ha movido mi humilde inspiración para escribir Cazador. Cuando hablamos de influir los unos en los otros y viceversa, hablamos de la humanidad que llevamos dentro...

Abrazo enorme, amigo.

Una prosa poética de gran riqueza simbólica, el cazador vence o cree vencer en la batalla aunque podemos preguntarnos contra quién o qué(la ambición, la vanidad...). Original propuesta que lleva la calidad acostumbrada en ti. Me alegra leer algo tuyo de nuevo. Un abrazo grande.

Ramón Carballal escribió: ↑Vie, 18 Jul 2025 9:12 Una prosa poética de gran riqueza simbólica, el cazador vence o cree vencer en la batalla aunque podemos preguntarnos contra quién o qué (la ambición, la vanidad...). Original propuesta que lleva la calidad acostumbrada en ti. Me alegra leer algo tuyo de nuevo. Un abrazo grande.

Mil gracias por tu apoyo y tu bondad al leerme, querido amigo.
Un honor saber que te ha gustado.

Abrazo grande y felicidad a montones.

Qué bien escribes, Hallie, aunque debería decir más bien, cuánto brilla la danza de esas espadas por el brotar continuo, aun si no siempre en filo de palabra, de ese algo inexpresable por inagotable y no cognoscible (por fortuna, conocimiento es dominación) que algunas, úteros crativos en ebullición despierta (algunas, porque la creación, en todos sus sentidos más nobles, es privilegio de ellas, de ahí las únicas que dan vida a la vida, y disponen de aquellos cada vez menos vigentes valores propios de lo humano y su progresión (que no progreso al uso) y conservación: amor, empatía, solidaridad, inteligencia, sentido... Otro mundo habría de sostenernos ahí.

Orión es hermoso en lo alto, pero mucho menos hecho embiste sobre la tierra. Cabe Eros, aquí? Cabe. Pero cuál? Porque hay muchos, percederos la mayoría, confusos o perdidos, o prestos a la imagen del que triunfa. Hay algunas Dianas también (ay, los epítetos).

El Amor, con mayúscula, no es ese mercantilizado que espera ser correspondido, se da, y así, se basta.

En fin, mi vibración, tal esos unioversos atómicos en constante cambio o quizás sugerentemente vivos.

Creo que este texto es una de tus más hermosas, creativas, ricas e incitantes obras, infinitamente abiertas al sentido sin fin.

Que tinguis un avui, demà, demà passat i els altres vius, mansos i pacificats.

Una abraçada.

Estimat Julio: qué hermoso reflejo me has dejado aquí; no encuentro palabras para expresar mi gratitud. En poesía, las resonancias magnéticas, emocionales, espirituales, atemporales, son milagros generados in situ, pañuelos compartidos, noble conexión de azares, pre-claridad e inconsciente profundo.
Este cazador hombre, intrépido, defensor... es, o puede ser, un elemento vital en el imaginario colectivo y memorioso...

La teva presència en el meu humil text ho eleva i ho mima.
Gràcies per tant.

Una abraçada llarga.

No sé por qué... pero me ha sonado este cazador a don Juan Tenorio. Abrazo, y salud, Hallie.

Me alegra leerte de nuevo, amiga Hallie. Has dejado un poema de gran simbolismo y hermoso, que requiere más de una lectura para adentrarse en sus significados. Ha sido un placer pasar por tu lograda obra.
Un abrazo grande y felicidad