Cosas de la memoria

[Ara López]

Reposando en el más profundo silencio,
existe pero no es.

Como quien retira la tapa de la urna
para memorizar la muerte,
el andar de la mirada lo expone
y justifica su peso, su forma.

Ahora sobre el blanco,
expuesto y desnudo,
llora, grita y ríe,
sufre, añora y ama,
escasos segundos que le has prestado
para emular la vida.

Has revelado este poema
sólo para transformarlo
en un fantasma de la memoria.

[Ramón Carballal]

Los fantasmas de la memoria siguen ahí acompañándonos lo queramos o no. Me gusta y me parece un poema muy bueno, de un simbolismo profundo y llegador. Abrazos.

[Alejandro Costa]

Muy potente, Ara.

Los fantasmas existen y están entre nosotros. Deambulan en nuestra menta, nos hacen sufrir, nos envuelven en un halo aterrador y nos dirigen por caminos que nunca se saben dónde dormitan.

Pero, a veces, son esos mismos fantasmas los que nos ayudan a seguir, a convertirnos en más fuertes, a crear, y convertir nuestra memoria en su casa. La mente es el mayor amigo del ser humano y, a la vez, su mayor enemigo.

Tan solo hay que aprender a luchar y defenderla.

Has revelado este poema
sólo para transformarlo
en un fantasma de la memoria.

Algo así como estos versos, que me parecen fascinantes.

Un besazo, con todo mi corazón y mi cariño.

[Hallie Hernández Alfaro]

Coincido sílaba a sílaba en el reflejo de Ramón, querida poeta.
Pulcro, intenso, con grandeza.

Gracias por estar y por ser a nuestro lado.
Abrazos.

[Ara López]

Los fantasmas de la memoria siguen ahí acompañándonos lo queramos o no. Me gusta y me parece un poema muy bueno, de un simbolismo profundo y llegador. Abrazos.

Mi estimado Ramón, razón no te quito, los fantasmas gozan de independencia.

Un gran abrazo.

[Ara López]

Muy potente, Ara.

Los fantasmas existen y están entre nosotros. Deambulan en nuestra menta, nos hacen sufrir, nos envuelven en un halo aterrador y nos dirigen por caminos que nunca se saben dónde dormitan.

Pero, a veces, son esos mismos fantasmas los que nos ayudan a seguir, a convertirnos en más fuertes, a crear, y convertir nuestra memoria en su casa. La mente es el mayor amigo del ser humano y, a la vez, su mayor enemigo.

Tan solo hay que aprender a luchar y defenderla.

Has revelado este poema
sólo para transformarlo
en un fantasma de la memoria.

Algo así como estos versos, que me parecen fascinantes.

Un besazo, con todo mi corazón y mi cariño.

Querido Alejandro, gracias por siempre dedicarme tiempo y palabras.

De esas luchas: mucho por decir y por olvidar.

Un abrazo.

[Ara López]

Coincido sílaba a sílaba en el reflejo de Ramón, querida poeta.
Pulcro, intenso, con grandeza.

Gracias por estar y por ser a nuestro lado.
Abrazos.

Mi queridísima Hallie, siempre agradeceré tu presencia por mis letras.

Te mando un abrazo fuerte.

[Carmen Moro Frías]

Hola Ara
Estupendo poema. Ay!!! la maldita memoria lo guarda todo y lo pierde todo. Un abrazo.

[Julio Gonzalez Alonso]

¡Qué breve e intenso poema! Me encantan los versos de cierre, final y resumen de un estado de ánimo, de un sentimiento hecho de retazos de muchos sentimientos. Enhorabuena. Salud.