Corazón cobarde

[Alejandro Costa]

Huir sin saber cómo ni a dónde,
creer que el cielo ya me espera,
y no entender de qué manera,
se busca aquello que se esconde.

Sentir que el viento duerme y calla,
el árbol llora y su hoja hiere,
para ahogar mientras se muere,
aquel dolor de la batalla.

Desmenuzar fruta podrida
sin la luz triste de la aurora,
y así sentir que llegó la hora
de empezar el viaje de huida.

Y en ese rumbo que me mueve,
de rajada alma y sin mirada,
de vida rota y fracasada,
nada encuentro que me renueve.

Buscar en las brasas del alma,
vagando por una fe ausente,
lejos de un río sin afluente
que estanca su agua en lenta calma.

Yacer por no saber llorar,
sufrir al no tener pañuelo
para seguir siendo el señuelo,
que ignoró el aroma de amar.

Y al fin, en duelo yo me bato
contra este fuego que me quema,
entre los versos de un poema
cuando se inmola mi alegato.

Y en este mundo que pronto arde,
donde las brasas lo devoran,
no quedará ayer, y lo ignoran,
los de hoy, de corazón cobarde.

[J. J. Martínez Ferreiro]

A parte de la profundidad lírica, destacar la muy conseguida musicalidad de estos cuartetos eneasílabos rimados.

Todo un placer de lectura, amigo Ricardo.

Un abrazo.

[Ana Muela Sopeña]

Eneasílabos profundos con interesantes rimas, Alejandro:

Un poema reflexivo... para pensar.

Gracias por compartir
Felicidades
Un beso
Ana

[Fernando Marcos Rentero]

Me encanta leerte, amigo Alejandro. Me recordaste los sonetos de la Garcilaso de la Vega:
"Escrito está en mi alma vuestro gesto,
y cuanto yo escribir de vos deseo;
vos sola lo escribisteis, yo lo veo
tan solo, que aun de vos me guardo en esto".

[Alejandro Costa]

A parte de la profundidad lírica, destacar la muy conseguida musicalidad de estos cuartetos eneasílabos rimados.

Todo un placer de lectura, amigo Ricardo.

Un abrazo.

Infinitas gracias, amigo Ferreiro.

Por cierto, nos estamos haciendo mayores, no soy "Ricardo" ja,ja,ja,ja

Un fuerte abrazo.