Editorial Alaire

DE COMPRAS POR LA CALLE DELICIAS , ZARAGOZA

Luces fugaces y baratas, plásticos
que fueran pura plata e incluso seda,
y tanto escaparate que te enreda
con promesas de lujos tan fantásticos.
Tus ojos se saldrán de puro elásticos
en el flujo incesante en que no queda
nada del que pasa, cual humareda
esfumada entre chinos y caucásicos.
Oh delicias del pobre consumista,
con el rico Rockefeller va soñando
mientras anda por la calle hecho un artista.
Pero dure la alegría, siempre y cuando
no se gasten los chavos que a la vista
en vacía cartera van sonando.

Original y con un olor a realidad.

Me ha gustado.

Un abrazo.

Hola, Pascual.

Nos compran con unos cuantos brillos y lentejuelas. Y letras a lo grande con el nombre de algún famoso diseñador donde los pobres nos sentimos importantes.

Lo peor no es lo del monedero vacío sino las cabezas huecas. Y cada vez más.

Cuando uno sabe de dónde viene no entra en ciertos asuntos. Y si se hace a sabiendas de lo que hace.

Un saludo.

Muchas gracias, Antonia y Alejandro. Esa calle es ahora un Dédalo de puestos de bazares chinos, bares baratos, etc., donde vive y compra gente pobre, inmigrantes de diferente origen, etc. Muy bulliciosa! Me gusta a pesar de todo. Es pintoresca. Un abrazo a los dos.

Feliz Pascua de Resurrección, amigo Pascual.
Hace mucho tiempo que el lujo cambió y la oferta de los países emergentes que ganaron la partida.
El lujo ha quedado para los ricos y los demás preferimos tener tres por el precio de uno, sea el objeto que sea.
Me ha gustado leerte, felicidades.

Saludos.

Muchas gracias querida Marisa y feliz Pascua para ti también. El consumismo barato y las cervezas dan alegría a la gente humilde, que así
se conforma sin protestar. Un nuevo opio para el pueblo.
Un abrazo muy fuerte, Marisa!

Hace muchos años me gustaba ir a comprar a la calle Delicias, hoy ha cambiado tanto que es otra calle. Igualmente el barrio no es lo que era. Tu poema está muy acertado. A mí también me sigue gustando pasear los cascos antiguos. Me gustó leerte.
Un abrazo y felicidad

Cuánto me alegro de que hayas frecuentado y aún lo hagas la Calle y el Barrio Delicias, donde yo tengo a mucha familia viviendo, y donde me crié. Un abrazo, Pilar, y muchas gracias.