Romance para una dama
Publicado: Mié, 19 Nov 2008 8:37
- I -
¡Ojos verdes, ojos verdes
del color de la esperanza!,
que su mirar cristalino,
trocó en mirada de escarcha
una mañana de sol
vil, oscura y despiadada.
¡Qué sencillo de contar
el sueño de la muchacha!,
que dormido yace aún
como una losa en su alma.
Pero el sol no es sino el sol
que tras hoy trae el mañana,
y si niña un día fue,
hoy se ha convertido en dama
enferma del desamor
que por sus poros derrama…
porque un día el azul mar
plegó de su amor, las alas.
- II -
¡Qué difícil el camino
por derrotas ya pisadas!.
Tras la estela del dolor
su nao cía sofocada,
sin grumete a su timón,
ni capitán en su alcázar.
No hace aguas pero sí,
ha rendido a su esperanza,
fundiéndola en el crisol
de su alma con su espada.
Y enmascara el corazón,
tras el cuero de una adarga…
para que no vuelva el sol
a hacer noche su mañana.
Por eso teme al amor,
porque es pasto de sus llamas,
porque un día el azul mar
plegó de su amor, las alas.
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¡Ojos verdes, ojos verdes
del color de la esperanza!,
que su mirar cristalino,
trocó en mirada de escarcha
una mañana de sol
vil, oscura y despiadada.
¡Qué sencillo de contar
el sueño de la muchacha!,
que dormido yace aún
como una losa en su alma.
Pero el sol no es sino el sol
que tras hoy trae el mañana,
y si niña un día fue,
hoy se ha convertido en dama
enferma del desamor
que por sus poros derrama…
porque un día el azul mar
plegó de su amor, las alas.
- II -
¡Qué difícil el camino
por derrotas ya pisadas!.
Tras la estela del dolor
su nao cía sofocada,
sin grumete a su timón,
ni capitán en su alcázar.
No hace aguas pero sí,
ha rendido a su esperanza,
fundiéndola en el crisol
de su alma con su espada.
Y enmascara el corazón,
tras el cuero de una adarga…
para que no vuelva el sol
a hacer noche su mañana.
Por eso teme al amor,
porque es pasto de sus llamas,
porque un día el azul mar
plegó de su amor, las alas.
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