Efímeras novedades

[Ignacio Mincholed]

...

La novedad no se instala,
corre continua
como el agua nueva,
tan vieja siempre,
en la boca de la fuente.
El aire apura a las nubes,
igual que la luz empuja al día
nuevo, tan viejo siempre,
hacia la entrada de la noche.

Vivo,
la efímera novedad de las estaciones;
luces de aire y agua.

Recuerdo,
la efímera enajenación de la juventud;
voz en discordia.

Acepto,
la plástica aparición de las arrugas;
tiempo útil, siempre viejo,
siempre ligero, efímeramente nuevo.

...

[Ana Muela Sopeña]

Todo pasa. No podemos aferrarnos a nada. Es terrible, pero es así, Ignacio...

Tu poema describe con sutileza y elegancia estas realidades.

Felicitaciones
Un beso enorme
Ana

[Alejandro Costa]

Todo es efímero, o a veces así lo parece.

Todo pasa y todo queda, pero lo nuestro es pasar, ya lo dijo el poeta.

Son facetas de la vida, pasos que se van dando en ella. Para los infelices, los desdichados, los apartados del mundo, todo les habrá parecido, eterno, les parecerá eterno.

Para aquellos que tengan una vida tranquila, feliz, sin problemas, que el sol les brille y la luna les dibuje una noche bella constantemente, la vida será efímera, corta, muy corta. Incluso es posible que demasiado.

Tu paseo por los versos, me ha parecido preciso y precioso.

Me ha gustado.

Un fuerte abrazo.

Salud, paz y felicidad.

[Marisa Peral]

Qué acertado este breve, Ignacio.
Sintetizas en pocos versos la realidad cotidiana.
Ayer ya no existe y hoy es tan solo un latido.
Sin embargo en este momento soy más joven que mañana.

Efímeras e inquietantes novedades.

Un abrazo.

[Ricardo López Castro]

Muy bella reflexión.
Me ha encantado.
Abrazos y felicidad, amigo Ignacio.

[Pilar Morte]

Imágenes justas y bellas para describir el paso del tiempo. Nos identificamos en tus acertados versos.
Un abrazo y felicidad

[E. R. Aristy]

...

La novedad no se instala,
corre continua
como el agua nueva,
tan vieja siempre,
en la boca de la fuente.
El aire apura a las nubes,
igual que la luz empuja al día
nuevo, tan viejo siempre,
hacia la entrada de la noche.

Vivo,
la efímera novedad de las estaciones;
luces de aire y agua.

Recuerdo,
la efímera enajenación de la juventud;
voz en discordia.

Acepto,
la plástica aparición de las arrugas;
tiempo útil, siempre viejo,
siempre ligero, efímeramente nuevo.

...

Un poema de excepcional belleza. Me gusta esa relación sabia acerca de lo efímero y lo eternal, de lo nuevo y lo viejo. Es un paseo poético por la mtanoia personal. Salud y poesía, Ignacio.

[Rafel Calle]

Tan bello como interesante trabajo, amigo Ignacio.
Felicidades y un abrazo.