Luces holográficas

[Ana Muela Sopeña]

Las máscaras se caen
por todas las esquinas del planeta.

Hay máscaras de amianto y de estraperlo,
diseñadas con luces holográficas
con los átomos cuánticos
y realidades de silicio.

Hay máscaras de agua
que argumentan sequías
solo para poner un precio
al líquido elemento.

Hay máscaras de fuego,
incendios provocados
como en cómics.

Hay máscaras de aire,
informaciones llenas de invenciones,
asuntos que no existen
solo para poder
desviar la atención de los que miran.
Son cortinas de humo.

Hay máscaras de tierra primigenia.
Combates emergentes en el sueño
y guerras como excusas de la sangre.

En medio del lamento colectivo
hay máscaras y máscaras que ruedan
por las carreteras del asfalto.

Todo es como un teatro
de sombras fantasmales.

Mas las máscaras se van desintegrando
gracias al rayo láser
de aquellos que no duermen
ni de noche ni de día.


Ana Muela Sopeña

[Carmen Moro Frías]

Hola Ana,
Vaya poema de física has elaborado. ¡Estupendo!
La máscaras como garantía de seguridad, no está mal.
Las mas holográficas con las humanas, pegadas a todo lo humano.
Gracias.
Un abrazo.

[Ana Muela Sopeña]

Gracias, Carmen, por venir:

Un beso grande
Ana

[Hallie Hernández Alfaro]

.

Los que no duermen porque han despertado y, son guardianes plenos con excelsos poderes, querida Ana. Son excelsos porque la frecuencia ha ido ganando en bondad, en humildad, en perseverancia. Tan fuertes como la mejor humanidad que han soñado nuestros genes.

Gracias por estar, por compartir y por ser; abrazo enorme.

[Ana Muela Sopeña]

Gracias, Hallie, por tus palabras.

Un beso enorme
Ana

[Raul Muñoz]

Muy sugerente planteamiento poético. Tal vez, aunque intuitivamente, la misma ignorancia se está armando de los avances de la ciencia en diseño tecnológico, gracias a la física cuántica. De tal manera, en lugar de comprender la realidad, con perfidia se ahonda más en el juego con las imágenes. Muy bien desarrollado el tema, para dejar abierto el interrogante y que cada uno se cuestione por sí mismo. También el final es muy elocuente, en la descripción de lo que podría ser una posible alternativa a la confusión. Me inspiró la lectura de tu lúcido y hermoso poema, Ana. Mi enhorabuena. Gracias por compartir.

Un abrazo.

[Alejandro Costa]

Interesante, como una clase de física.

Eso sí, con aire de poesía.

Es poesía.

Un beso.

Salud, paz y felicidad.

[xaime oroza carballo]

Las máscaras se caen
por todas las esquinas del planeta.

Hay máscaras de amianto y de estraperlo,
diseñadas con luces holográficas
con los átomos cuánticos
y realidades de silicio.

Hay máscaras de agua
que argumentan sequías
solo para poner un precio
al líquido elemento.

Hay máscaras de fuego,
incendios provocados
como en cómics.

Hay máscaras de aire,
informaciones llenas de invenciones,
asuntos que no existen
solo para poder
desviar la atención de los que miran.
Son cortinas de humo.

Hay máscaras de tierra primigenia.
Combates emergentes en el sueño
y guerras como excusas de la sangre.

En medio del lamento colectivo
hay máscaras y máscaras que ruedan
por las carreteras del asfalto.

Todo es como un teatro
de sombras fantasmales.

Mas las máscaras se van desintegrando
gracias al rayo láser
de aquellos que no duermen
ni de noche ni de día.


Ana Muela Sopeña

"Ni de noche ni de día"
Ese gran ritmo, desasosegador, que escancia el último aliento para abrir la esperanza de la palabra.

Gracias, Ana.
Bicos.

[Pilar Morte]

La física y la poesía se unen de forma muy interesante. El final muy bueno.
Un gusto leerte.
Un abrazo grande

[Armilo Brotón]

Me encanta cuando abordas estos temas científicos desde luz de tu escritura: esta sí es un láser que abre nuestra imaginación, se caen irremediablemente las máscaras, a mundos que permanecen ocultos, hasta que llega Ana Muela y los materializa en esos imbricados colores que determinan nuestra emoción.

Un goce leerte siempre y mi beso con admiración

[Ana Muela Sopeña]

Gracias, Raul, por tu acertado comentario:

Un beso grande
Ana

[Ana Muela Sopeña]

Gracias, Alejandro, por venir:

Un beso grande
Ana