El día que olvidamos

[E. R. Aristy]

EL DÍA QUE OlVIDAMOS


Como rayos de un sol deslumbrante, vi todos tus rostros. El tiempo y la oportunidad no esperaron su turno. Acaba de suceder. Hubo una vez un patio cuya existencia dábamos por sentada, sin embargo, la realidad aún más profunda tenía la textura de una madeja entre nuestros dedos. No éramos conscientes de que eso era todo, que nada es real, a menos que lo deseemos e inocentemente entremos en su forma y la mordamos.
Amamos con absoluta credulidad y sin la menor duda porque la voz del hablante hacía vibrar las pestañas de quienes sueñan.

Te recuerdo en cicatrices que viajan sin rumbo sobre mis rodillas. En túneles ingrávidos donde llevo la venda en los ojos y cuenta como un eco luminoso que me revelaría tu escondite. La única evidencia de lo que pasó y de lo que sólo fueron deseos, caprichos y galimatías es nuestro enorme vacío. Él fue lo único que no sucedió como esperábamos. Todo sucedió por sí solo, sin esfuerzos, ni dolores de cabeza, no deseábamos nada más que esa música invisible. La melodía de frecuencia imperceptible del día que olvidamos.


E.R.Aristy

[Armilo Brotón]

Muy bello poema ERA. Me abriga, con emoción, la atmósfera del momenta que tan bien has sabido recrear, me resulta sinestésico, una gozada de sensaciones.
Si me permites un apunte, hay palabras que se repiten muy cercanas. Me refiero, concretamente, al verbo suceder.
Me encantó leerte amiga.

Un abrazo

[Marisa Peral]

EL DÍA QUE OlVIDAMOS


Como rayos de un sol deslumbrante, vi todos tus rostros. El tiempo y la oportunidad no esperaron su turno. Acaba de suceder. Hubo una vez un patio cuya existencia dábamos por sentada, sin embargo, la realidad aún más profunda tenía la textura de una madeja entre nuestros dedos. No éramos conscientes de que eso era todo, que nada es real, a menos que lo deseemos e inocentemente entremos en su forma y la mordamos.

Amamos con absoluta credulidad y sin la menor duda porque la voz del hablante hacía vibrar las pestañas de quienes sueñan.


E.R.Aristy

Me gusta leerte, Roxane, siempre hay algo que aprender en tus poemas.
No somos conscientes de lo que tenemos hasta que nos falta y vivimos en un mundo de fantasía, creyendo ciegamente en lo que tenemos delante en ese momento, sin pensar en que todo tiene un final y todo muere.

Un abrazo enorme, querida amiga.

[Ramón Carballal]

Una prosa poética tan brillante como triste. Me gustó mucho la lectura. Abrazos.

[Pilar Morte]

Una prosa poética hermosa y donde el final de una relación está bien tratado. Me gustó mucho leerte.
Un abrazo grande

[Carmela Viñas]

Preciosa obra, Roxane. Perfecta en su forma y en la voz doliente de un final.
Te felicito. Siempre es un placer venir a tus orillas poéticas.
Abrazos.

[Carmen Moro Frías]

Hola ERA.
Un poema elegante. Para amar hay que deshacer la madeja cruzada de malentendidos.
Evidentemente solo se ama desde la "credulidad" que acepta todo.
ERA me ha gustado mucho. Un abrazo

[Alejandro Costa]

Tristeza impregnada de calidad.

Una prosa muy bella.

Un beso.

Salud, paz y felicidad.

[Óscar Distéfano]

Has descrito un momento supremo, que se ha hecho emoción y memoria. Es que la vida se valora en su real dimensión en la nostalgia. Te aplaudo, querida.

Un abrazo de empatía.
Óscar

[Julio Gonzalez Alonso]

Estupendo ejercicio de prosa poética que los compañeros te celebran y yo comparto. Un abrazo grande, y salud.

[José Manuel F. Febles]

EL DÍA QUE OlVIDAMOS


Como rayos de un sol deslumbrante, vi todos tus rostros. El tiempo y la oportunidad no esperaron su turno. Acaba de suceder. Hubo una vez un patio cuya existencia dábamos por sentada, sin embargo, la realidad aún más profunda tenía la textura de una madeja entre nuestros dedos. No éramos conscientes de que eso era todo, que nada es real, a menos que lo deseemos e inocentemente entremos en su forma y la mordamos.
Amamos con absoluta credulidad y sin la menor duda porque la voz del hablante hacía vibrar las pestañas de quienes sueñan.

Te recuerdo en cicatrices que viajan sin rumbo sobre mis rodillas. En túneles ingrávidos donde llevo la venda en los ojos y cuenta como un eco luminoso que me revelaría tu escondite. La única evidencia de lo que pasó y de lo que sólo fueron deseos, caprichos y galimatías es nuestro enorme vacío. Él fue lo único que no sucedió como esperábamos. Todo sucedió por sí solo, sin esfuerzos, ni dolores de cabeza, no deseábamos nada más que esa música invisible. La melodía de frecuencia imperceptible del día que olvidamos.


E.R.Aristy
Querida Aristy, una prosa de gran brillantez, propia de la pluma que lo ha escrito. La categoria de tu hacer difumina el amargor que, empequeñas dosis cierran un gran escrito poetico. Aprovecho este momento para decirte que sigo en el empeño, de que seas tú la Prologuista de mi poemario núm.29. Al no dar con tu perfil en el Foro, te envío mi Correo electrónico para recibir tu respuesta. . jmfdez_58@hotmail.com Muy agradecido.

José Manuel

[E. R. Aristy]

EL DÍA QUE OlVIDAMOS


Como rayos de un sol deslumbrante, vi todos tus rostros. El tiempo y la oportunidad no esperaron su turno. Acaba de suceder. Hubo una vez un patio cuya existencia dábamos por sentada, sin embargo, la realidad aún más profunda tenía la textura de una madeja entre nuestros dedos. No éramos conscientes de que eso era todo, que nada es real, a menos que lo deseemos e inocentemente entremos en su forma y la mordamos.
Amamos con absoluta credulidad y sin la menor duda porque la voz del hablante hacía vibrar las pestañas de quienes sueñan.

Te recuerdo en cicatrices que viajan sin rumbo sobre mis rodillas. En túneles ingrávidos donde llevo la venda en los ojos y cuenta como un eco luminoso que me revelaría tu escondite. La única evidencia de lo que pasó y de lo que sólo fueron deseos, caprichos y galimatías es nuestro enorme vacío. Él fue lo único que no sucedió como esperábamos. Todo sucedió por sí solo, sin esfuerzos, ni dolores de cabeza, no deseábamos nada más que esa música invisible. La melodía de frecuencia imperceptible del día que olvidamos.


E.R.Aristy
Querida Aristy, una prosa de gran brillantez, propia de la pluma que lo ha escrito. La categoria de tu hacer difumina el amargor que, empequeñas dosis cierran un gran escrito poetico. Aprovecho este momento para decirte que sigo en el empeño, de que seas tú la Prologuista de mi poemario núm.29. Al no dar con tu perfil en el Foro, te envío mi Correo electrónico para recibir tu respuesta. . jmfdez_58@hotmail.com Muy agradecido.

José Manuel

Te he envido un email a tu correo electronico de hotmail y un mensaje privado por Alaire. Un abrazo grande, querido Jose Manuel. Gracias!

[Raul Muñoz]

Es un viaje psicodelico muy emocionante e inquisidor de la misma realidad tan compleja, fruto de nuestra cognición perceptiva. Ah, fabulosa la música de fondo, la frecuencia imperceptible; aunque, me da qué pensar e intuyo, que más que imperceptible sería indescriptible. Aquí, en tu hermosa y brillante prosa poética, todo es aquí y ahora, pura atención presencial. Todo esto me sugiere tu valiosa obra, Roxane. Mi enhorabuena. Gracias por compartir.

Un abrazo.

[Ramón Castro Méndez]

EL DÍA QUE OlVIDAMOS


Como rayos de un sol deslumbrante, vi todos tus rostros. El tiempo y la oportunidad no esperaron su turno. Acaba de suceder. Hubo una vez un patio cuya existencia dábamos por sentada, sin embargo, la realidad aún más profunda tenía la textura de una madeja entre nuestros dedos. No éramos conscientes de que eso era todo, que nada es real, a menos que lo deseemos e inocentemente entremos en su forma y la mordamos.
Amamos con absoluta credulidad y sin la menor duda porque la voz del hablante hacía vibrar las pestañas de quienes sueñan.

Te recuerdo en cicatrices que viajan sin rumbo sobre mis rodillas. En túneles ingrávidos donde llevo la venda en los ojos y cuenta como un eco luminoso que me revelaría tu escondite. La única evidencia de lo que pasó y de lo que sólo fueron deseos, caprichos y galimatías es nuestro enorme vacío. Él fue lo único que no sucedió como esperábamos. Todo sucedió por sí solo, sin esfuerzos, ni dolores de cabeza, no deseábamos nada más que esa música invisible. La melodía de frecuencia imperceptible del día que olvidamos.


E.R.Aristy

Una preciosa prosa poética que invita a reflexionar sobre esos rumbos que toma la vida, donde el amor es el hecho mas relevante. Me encantan tus propuestas porque siempre me hacen pensar, detenerme, reflexionar, y eso son cosas siempre muy cercanas.

Aplaudo tu texto.

Un enorme y afectuoso abrazo.