No dejarás ningún rastro

[Ramón Carballal]

¿Quién reconocerá tus huellas si no hay camino?
Como pisar la piel del aire, etéreo y sutil el paso
que no dejó su forma de retícula en el haz de mi pecho.
Pisas en la noble sed de la palabra sin el ardor del rebelde
mientras yo con las extremidades rotas busco el contorno
que dejaron mis sandalias en la húmeda arena de la playa.
Y es que no hay recuerdo ni memoria en tu tímido hollar,
solo barro y lluvia sobre el perfil desvaído que va borrándose
como la vida se borra en la matriz omnímoda del tiempo.

[Gustavo Cavicchia]

La meta es el olvido.
Yo he llegado antes.

J. L. BORGES

[Alejandro Costa]

Nadie dejará rastro.

Tan solo las hojas de un recuerdo sin escribir, y la fatigosa historia, de ser, sin haber sido.

Pero lo que nadie podrá obviar, es que esta tierra fue pisada por nosotros, aunque no quede ninguna huella.

Un escrito, magnífico, con una profundidad extrema.

Con tu sello personal.

Un abrazo.

Salud, paz y felicidad.

[Marisa Peral]

Mucha profundidad en este poema, Ramón.
Me ha gustado leerte en este caminar sin rastro pero con tu huella inimitable.

Bicos.

[Ramón Carballal]

La meta es el olvido.
Yo he llegado antes.

J. L. BORGES

Interesante. Un abrazo.

[Pilar Morte]

Hermoso, conciso y exacto poema. Muestras con mucha belleza las huellas del camino. Felicidades.
Un abrazo grande

[Julio Gonzalez Alonso]

Lo demás, no sé; pero tu poesía sí que dejará el rastro de una huella hermosa. Un abrazo. Salud.

[Raul Muñoz]

Cuánta delicadeza destilan tus versos. Mucho amor a la poesía transmites y mucha paz. Un placer de lectura, Ramón. Gracias por compartir.

Un abrazo.

[E. R. Aristy]

¿Quién reconocerá tus huellas si no hay camino?
Como pisar la piel del aire, etéreo y sutil el paso
que no dejó su forma de retícula en el haz de mi pecho.
Pisas en la noble sed de la palabra sin el ardor del rebelde
mientras yo con las extremidades rotas busco el contorno
que dejaron mis sandalias en la húmeda arena de la playa.
Y es que no hay recuerdo ni memoria en tu tímido hollar,
solo barro y lluvia sobre el perfil desvaído que va borrándose
como la vida se borra en la matriz omnímoda del tiempo.

Inteligente y bello poema, Ramón. Celebremos estar vivo en este momento. Tu lírico poema goza de magnífica imaginaría. Abrazos.

[Carmela Viñas]

Muy bello tu poema, Ramón. Me recordó aquel epitafio de John Keats" Aquí descansa alguien cuyo nombre fue escrito en el agua".

Pasaremos por la vida siendo anónimos, con apenas un suspiro que se lo llevará el aire.
Abrazos.