Editorial Alaire

Echar de menos la niñez, no está nada mal, no. Ayuda a contrarrestar ese adulto en el que nos hemos convertido; Peter, Wendy, Campanilla, Capitán Garfio, los niños perdidos, nos conducen, generalmente y sin remedio, a ella.

Padecer el síndrome de Peter Pan, es, me temo, otra cuestión.

Me ha gustado tu 'Nunca Jamás' : )

Blanca

La verdad es que yo me considero Peter Pan, llevo dos decadas y aún así no dejo la niñez. Je, claro tampoco soy tan inmaduro

Qué gusto que me hagáis recordar a mis amigos Wendy, Campanita y los niños perdidos. Todos juntos nos divertimos tanto. Gracias por acercarte aquí Blanca.

"La niñez jamás se pierde ella está siempre ahí latiendo..."

¡Salud por hoy y siempre!

Precioso poema, amigo Wilmer.
Creo que tienes una voz personal y creo que has nacido con la cualidad que procura versos amigos del futuro para siempre.
En el ritmo, en mi opinión, está la parte menos favorecida de tu poema.
Luego, hay cosillas como los signos de puntuación, interrogación, ortográficos, sintaxis, etc., que está claro que irás ajustando con el tiempo, porque esas cosas, al no depender de una facultad innata, tarde o temprano se aprenden.
Ha sido un placer leerte. Felicidades.
Te mando un fuerte abrazo.

Hola Wilmer

La magia está en aquella niñez
que no se olvida, que aún se siente
así los años aborden el tren
de la etapa adulta.


La magia puede estar en cualquier época de la vida si se sabe vivirla, amigo mío. Porque también (aunque es bueno a veces sentirse niño), hay que saber cuando se deja de serlo. me gustó el poema. Un abrazo.
Mario.