Editorial Alaire

A José Manuel Fernández Febles

Pasa la vida
que parece un naufragio,
pero es destino.


Jamás el tiempo es solo del reloj.
Ondea la belleza en el destino
sumergida en un libro de secretos
en mitad del presagio de una nube.

Musitas las plegarias de tu álbum,
a la vez que recuerdas de memoria
nudos llenos de quarks en un avión.
Un día descubriste en Ulurú
el melodioso ardor dentro del bosque,
la lluvia con su brillo sideral.

Fraguas toda la sangre en el Alef,
en mitad de la herida del embate.
Recuperas el arte desde el sur,
nadie puede dormir como un delfín.
Al parecer el agua es como el alba,
no entona su misterio en el zaguán.
De verdad que la niebla tiene sed,
enlaza su letargo como un breve
zarandeo en los círculos de luz.

Filosofas despacio como un chef,
encantas la visión como algún duende,
brota siempre el amor de un baobab.
Luces con las estrellas de cristal.
Esperas que la fe siempre te eleve,
silencias los archivos de otras vidas.


Ana Muela Sopeña

---

José Manuel, espero que te guste este acróstico doble que he escrito con tu nombre.

Y cómo no le va a gustar a este querido compañero!!!
Eres genial Ana.
Abrazos mediterráneos, bonita.

Elegante, bien escrito y con un lirismo excepcional.

Encima se lo dedicas a un buen poeta y un buen amigo.

Enhorabuena para ambos.

Un beso para ti, un abrazo para José Manuel.

Ana Muela Sopeña"
A José Manuel Fernández Febles

Pasa la vida
que parece un naufragio,
pero es destino.


Jamás el tiempo es solo del reloj.
Ondea la belleza en el destino
sumergida en un libro de secretos
en mitad del presagio de una nube.

Musitas las plegarias de tu álbum,
a la vez que recuerdas de memoria
nudos llenos de quarks en un avión.
Un día descubriste en Ulurú
el melodioso ardor dentro del bosque,
la lluvia con su brillo sideral.

Fraguas toda la sangre en el Alef,
en mitad de la herida del embate.
Recuperas el arte desde el sur,
nadie puede dormir como un delfín.
Al parecer el agua es como el alba,
no entona su misterio en el zaguán.
De verdad que la niebla tiene sed,
enlaza su letargo como un breve
zarandeo en los círculos de luz.

Filosofas despacio como un chef,
encantas la visión como algún duende,
brota siempre el amor de un baobab.
Luces con las estrellas de cristal.
Esperas que la fe siempre te eleve,
silencias los archivos de otras vidas.


Ana Muela Sopeña

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José Manuel, espero que te guste este acróstico doble que he escrito con tu nombre.


Mi muy querida y admirada poeta, Ana Muela. Soy hombre que ha recibido, a lo largo de mi existencia, una gran cantidad de sorpresas que han dejado lamentos negativos o negación de la dicha: la añoranza, en cambio, es la luz de los recuerdos.
Esta inmensa sorpresa entra en el cupo de la grandeza y de la amistad de una gran poeta, cuyo camino, no está en el silencioso archivo de otras vidas.
La amistad, el adios inacabado, los pilares de la razón mansa, llegan a mis ojos. Ana, yo no olvidaré la virtud que me ha sobrecogido de gozo, contradición misteriosa de la poeta que me escribe un poema que conforma, en parte, algunos sentimientos de mi vida. Después de esta pequeña mirada, me llama la atención sobre la forma poética de premiar mi amistad sincera. Para concluir, querida amiga, recibe desde la distancia la gratitud que desde el alma te envío.

Desde la soledad de mi isla, un abrazo fuerte.

José Manuel.

Gracias, Concha, por tus efusivas palabras sobre este poema dedicado a José Manuel:

Un fuerte abrazo
Ana

Agradezco tus palabras, Alejandro:

Son un verdadero regalo para mí.

José Manuel es un gran poeta, lleno de sensibilidad y buen decir y se merece todos los homenajes.

Un abrazo grande
Ana

Un precioso poema con imágenes originales que atrapan al lector. Abrazos.

Grande y cercano, Ana. Destila, todo él, amistad y reconocimiento. Hermosa cantiga de Alba.

Bicos, raíña.

Querido José Manuel:

Me alegra mucho que hayas recibido estos versos en forma de acróstico con optimismo y gratitud.

Seguiremos, en este camino de la poesía, interactuando y siendo fieles servidores de la palabra.

Con un abrazo grande
Ana

Muchas gracias por venir, Ramón:

Un abrazo
Ana

Las dos primera estrofas muestran , de principio, la forma de pensar y de recibir la vida. Un poema sugerente y hermoso.
Un placer leerte.
Abrazos y felicidad

Al margen del ejercicio lúdico nos has dejado un poema preciosos Ana.
Tenía que ser así cuando una gran poetisa se lo dedica a un gran poeta.
Abrazos.

Bellísimo tu acróstico doble y estos versos que destilan amistad y un camino poético de esperanza, Ana. Hermosa dedicatoria a otro gran poeta.
Felicidades a ambos.
Abrazos .

Eres genial, Ana, como amiga, compañera y qué decir como escritora y poeta.
Felicidades por este acróstico doble dedicado a José Manuel F.Febles.

Un fuerte abrazo a los dos.

Gracias, Xaime, por venir:

Un fuerte abrazo
Ana