Dónde estás
Publicado: Jue, 03 Ago 2023 13:39
Hay rizos en las ramas del árbol más coqueto,
a tenor del paisaje que enaltece
es posible arriesgar lo sensorial
que reúne en el hombre la belleza.
El ladrón de diciembres
ha acudido dichoso,
con la mano perenne del secuestro,
vacía pero llena de intenciones,
como hacen los románticos,
se entrega por completo
al eufemismo de la carne.
No en vano, los colores le desvisten,
desvían su atención,
y la niebla le achucha entre los grises.
Su instinto laberíntico con lluvias de salidas
provocan la fatídica elección:
El amor o el olvido.
La memoria también nos selecciona,
y en sus múltiples almas
eleva las vivencias, ah, red de cielos libres.
La mente no descuida
los recuerdos,
superarlos no implica que ya no te hagan daño,
es cambiar el sentido por curvas de experiencia.
Te pido que me ilustres, porque ya me perdí.
Te pido que satures mis defectos.
Te pido que me enseñes a mirarte.
Te pido que me digas dónde está la belleza.
a tenor del paisaje que enaltece
es posible arriesgar lo sensorial
que reúne en el hombre la belleza.
El ladrón de diciembres
ha acudido dichoso,
con la mano perenne del secuestro,
vacía pero llena de intenciones,
como hacen los románticos,
se entrega por completo
al eufemismo de la carne.
No en vano, los colores le desvisten,
desvían su atención,
y la niebla le achucha entre los grises.
Su instinto laberíntico con lluvias de salidas
provocan la fatídica elección:
El amor o el olvido.
La memoria también nos selecciona,
y en sus múltiples almas
eleva las vivencias, ah, red de cielos libres.
La mente no descuida
los recuerdos,
superarlos no implica que ya no te hagan daño,
es cambiar el sentido por curvas de experiencia.
Te pido que me ilustres, porque ya me perdí.
Te pido que satures mis defectos.
Te pido que me enseñes a mirarte.
Te pido que me digas dónde está la belleza.