Editorial Alaire

El mundo que habitamos es la preparación,
cómo -Como- aprender a manejar la bicicleta sin ruedines.

Teorías que confluyen nos hacen diferentes,
no la naturaleza, no la evolución.

Porque estas ganas/ansias de creerme el elegido
no se van, esperan penitencia
mas nada las indulta,
acaso el alma nunca se confiese,
tal vez Dios se nos venga demasiado profundo.

Al fin y al cabo hablar conmigo va salvando
los obstáculos.
No soy lo que pensaba ayer.

Aterrizo en mi mente,
me sacrifico de nuevo.

Y me libro del librepensamiento
-Ah, macuto indeciso, el multiplicador
de mis horas, que escapan del tiempo,
succiona,
estruja,
aprieta,
agita,
la ridícula base de todas las creencias.-
de lo fácil que es ponerme al día
con todos los relojes congelados
en vacíos, poesía, y en lo que se me olvida
-Adónde irá a parar la cosa.
Nunca sé si me falla la memoria,
o el nexo entre el pasado y el presente
me ha dado manga ancha.-.

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Me ha gustado esta reflexión lírica y moral. Tantos poetas en un solo hombre...tiene que ser difícil gestionarlo.

Abrazo grande y felicidad a montones.

Poema hermoso, repleto de aciertos en su planteamiento, abierto a la indagación profunda. Me parece muy original en la expresión. Un placer pasar por tu trabajo poético, Ricardo.

Un abrazo, amigo.

Gracias Hallie y Raul.
Me alegran vuestras palabras para este trabajo.
Abrazos y felicidad.