Editorial Alaire

Ramón Carballal escribió: ↑Sab, 22 Oct 2022 8:56 El auto camina lento, es un pájaro que sueña.

Tú te vestías de sur con un traje liviano de colores.

En junio los frutales dejan caer los carozos,
su pulpa derramada.

Los puestos de la carretera se exhiben al sol:
fresas, el amarillo del melocotón, las sandías sin abrir…

En nosotros reina el horizonte,
la raya azul del océano,
las casas de cal como dientes pulidos,
el resplandor de los tejados en el valle de la luz.

El verano llega con sus luciérnagas heridas,
la playa abraza tu cuerpo y son espuma tus labios
al besar mi silencio.

Por la noche los fuegos artificiales en la bahía,
y una sed infinita de beberte toda.

Marisa Peral escribió: ↑Sab, 22 Oct 2022 9:18 Maravilloso poema, Ramón.
Un regalo en este sábado de octubre.
Gracias y un abrazo.

Antonio Urdiales escribió: ↑Sab, 22 Oct 2022 11:44 Como siempre, mi querido amigo. Un buen poema con metáforas descriptivas que me llevan a imaginarme el lugar. Eso es poesía.

Un abrazo.

Pilar Morte escribió: ↑Sab, 22 Oct 2022 11:48 Un poema que recoge una vivencia con sensibilidad e inteligencia.
Me gustó leerte.
Abrazos

Armilo Brotón escribió: ↑Sab, 22 Oct 2022 17:00 Cuántos recuerdos, pasados y actuales, querido amigo has sido capaz de evocar con tus versos en esta persona que se siente cercana a ti. Esto es mi concepto actual de poesía, la que me gusta, la que yo no puedo hacer pero la admiro.
Ya en España pocos puestos de venta, de lo más peregrino que uno pueda imaginarse, se ven en la carretera pero por donde me muevo muchos, de todo tipo y me paro en ellos, hablo con los vendedores, me río, les regateo, y siempre les compro algo que acumulo sin sentido en el baúl de mis recuerdos. Es la sed de vivir, es la sed de sentir, es la sed de pertenecer a un clan que habita el mundo. Después, si puedo, abro una sandía, no exento de ternura.

Un abrazote Ramón, buen día

Mirta Elena Tessio escribió: ↑Dom, 23 Oct 2022 2:06

Ramón Carballal escribió: ↑Sab, 22 Oct 2022 8:56 El auto camina lento, es un pájaro que sueña.

Tú te vestías de sur con un traje liviano de colores.

En junio los frutales dejan caer los carozos,
su pulpa derramada.

Los puestos de la carretera se exhiben al sol:
fresas, el amarillo del melocotón, las sandías sin abrir…

En nosotros reina el horizonte,
la raya azul del océano,
las casas de cal como dientes pulidos,
el resplandor de los tejados en el valle de la luz.

El verano llega con sus luciérnagas heridas,
la playa abraza tu cuerpo y son espuma tus labios
al besar mi silencio.

Por la noche los fuegos artificiales en la bahía,
y una sed infinita de beberte toda.

Es hermoso como escribe estimado Ramón. Este poema lo leí desde el celular. Pleno de mágenes.
Destaco estos versos que te definen como un romántico.

El verano llega con sus luciérnagas heridas,
la playa abraza tu cuerpo y son espuma tus labios
al besar mi silencio.

Por la noche los fuegos artificiales en la bahía,
y una sed infinita de beberte toda.
Te dejo un fuerte abrazo hasta esa bahía que describes.-

Javier Dicenzo escribió: ↑Mar, 25 Oct 2022 22:56 interesante versificación, muy bien logrado.
javier

Julio Gonzalez Alonso escribió: ↑Vie, 28 Oct 2022 17:01 Gracias, Ramón. Conocer la razón de la sed es un primer paso para poder saciarla. Un abrazo de felicitaciones, pues siempre nos descubres algo nuevo de la mano de la poesía. Salud.