Editorial Alaire

Creo advertir un simbolo polisémico en esa lluvia dulce y fértil. Es un poema cercano, pero con mucha profundidad, que hace soñar al lector. A mí me ha encantado (como todas tus creaciones) y estoy seguro que a muchos también les subyugará porque el poema es hermoso y evocador.
Un fuerte abrazo, poeta amigo.

Jerónimo

Una lluvia sutil en el plano de la realidad, fertlizadora e inspiradora en el plano simbólico.

Belleza en esta puro.

Un gran poema, Óscar

Felicitaciones
Un beso grande
Ana

Sigo por aquí leyendo y comentando lo que merece la pena leer y comentar. En poesía moderna no es importante lo que se dice, sino cómo se dice. Un abrazo.

Gran poema, amigo Óscar, trufado de muy logradas imágenes, todo un caudal de lírica belleza.
Mi aplauso.

Un fuerte abrazo.

Pura ensoñación todo el poema. Entresaco estos versos:

Su voz aturde —eterno duende—,
punza el aroma a mundo antiguo,
agobia la eufonía de entrañables anécdotas,
galopes de nostalgia que transitan
los prados infantiles.

La lluvia despeja recuerdos que nos pillan por sorpresa. Disfruto del agua que cae libre.
Un placer de lectura.
Un beso.

Óscar Distéfano escribió: ↑Lun, 03 Oct 2022 11:26 Es imposible amar la lluvia de este día

En el momento de mayor ceguera,
de suspendida ensoñación,
llegó la lluvia con pinceladas libres,
barnizando los árboles, las alas de los pájaros.

Su voz aturde —eterno duende—,
punza el aroma a mundo antiguo,
agobia la eufonía de entrañables anécdotas,
galopes de nostalgia que transitan
los prados infantiles.

Corpúsculos de acero caen
sobre el tendido césped del espíritu,
sobre la rosa cardinal del alma.

Ya no alcanza su hechizo
ante la vil tarea de espantarme
las moscas de la herida.

Eco hostil de la angustia,
néctar tardío,
lienzo inservible a la mirada lívida.

Ha llegado la lluvia con sus diosas alegres,
pero no logran arrancarme
de mi sed harapienta
en este escaso fluir de mis nacientes.

Creo que esa lluvia regó tu espacio en un mal momento.
Pero todo es reversible, tú puede hacer que esa lluvia sea mansa y lave tus heridas.
Sin embargo rescato una estrofa que me encanta.

Corpúsculos de acero caen
sobre el tendido césped del espíritu,
sobre la rosa cardinal del alma.

Es una estrofa lírica, me imagino esa rosa cardinal del alma.
Eso no se ve ni se puede tocar. Pero está allí sobre el tendido cesped. Y el crepúsculo aunque gris es luminoso
y encendido como el resto de tus verso. Abrazos Óscar, me ha gustado y lo he disfrutado.Gracias. por compartir.-

Es un poema que hay que alabar, necesariamente. Me encanta la lluvia y me encanta el tratamiento que en este poema le has dado. Felicidades y un abrazo.

Jerónimo Muñoz escribió: ↑Lun, 03 Oct 2022 12:12 Creo advertir un símbolo polisémico en esa lluvia dulce y fértil. Es un poema cercano, pero con mucha profundidad, que hace soñar al lector. A mí me ha encantado (como todas tus creaciones) y estoy seguro que a muchos también les subyugará porque el poema es hermoso y evocador.
Un fuerte abrazo, poeta amigo.

Jerónimo

Gracias, Jerónimo, por los conceptos, muy amables, por cierto. En efecto. he tratado de comunicarme a través de una alegoría (hace mucho que vengo intentando manejar el lenguaje alegórico). Siempre me ha sorprendido que la poesía produce la paradoja de crear belleza describiendo dolor.

Un abrazo, poeta.
Óscar

Me ha encantado, amigo Óscar, esta lluvia de versos que lo empapa todo, que barniza sí y saca brillo pero no sana, no logra lavar y desdibujar cicatrices y miserias.

Todo un placer de lectura, querido amigo.

Abrazos y salud.

Un Poema de gran lirismo y muy bello, evocador de ensoñaciones y recuerdos, pero también de angustias y tristezas pues no logra saciar la sed "la lluvia con sus diosas alegres".
Un cordial saludo, amigo y admirado poeta.

Ana Muela Sopeña escribió: ↑Lun, 03 Oct 2022 14:50 Una lluvia sutil en el plano de la realidad, fertlizadora e inspiradora en el plano simbólico.

Belleza en estado puro.

Un gran poema, Óscar

Felicitaciones
Un beso grande
Ana

Me gusta tu comentario, esos dos planos que descubres. Enriquece el poema. Enhorabuena.

Un abrazo con cariño.
Óscar

Óscar Distéfano escribió: ↑Lun, 03 Oct 2022 11:26 Es imposible amar la lluvia de este día

En el momento de mayor ceguera,
de suspendida ensoñación,
llegó la lluvia con pinceladas libres,
barnizando los árboles, las alas de los pájaros.

Su voz aturde —eterno duende—,
punza el aroma a mundo antiguo,
agobia la eufonía de entrañables anécdotas,
galopes de nostalgia que transitan
los prados infantiles.

Corpúsculos de acero caen
sobre el tendido césped del espíritu,
sobre la rosa cardinal del alma.

Ya no alcanza su hechizo
ante la vil tarea de espantarme
las moscas de la herida.

Eco hostil de la angustia,
néctar tardío,
lienzo inservible a la mirada lívida.

Ha llegado la lluvia con sus diosas alegres,
pero no logran arrancarme
de mi sed harapienta
en este escaso fluir de mis nacientes.

Sube para deleite de todos.

Un abrazo de los grandes, amigo.

Óscar Distéfano escribió: ↑Lun, 03 Oct 2022 11:26 Es imposible amar la lluvia de este día


Ya no alcanza su hechizo
ante la vil tarea de espantarme
las moscas de la herida.

Eco hostil de la angustia,
néctar tardío,
lienzo inservible a la mirada lívida.


en este escaso fluir de mis nacientes.

¡Cuántas veces nos encontramos sorprendidos y envueltos en situaciones emocionales como éstas! El valor está en acertar a expresarlo con la convicción contagiosa con que lo has hecho tú, y reconocernos en el poema. Un abrazo decembrino, Óscar. Salud.

Óscar Distéfano escribió: ↑Lun, 03 Oct 2022 11:26 Es imposible amar la lluvia de este día

En el momento de mayor ceguera,
de suspendida ensoñación,
llegó la lluvia con pinceladas libres,
barnizando los árboles, las alas de los pájaros.

Su voz aturde —eterno duende—,
punza el aroma a mundo antiguo,
agobia la eufonía de entrañables anécdotas,
galopes de nostalgia que transitan
los prados infantiles.

Corpúsculos de acero caen
sobre el tendido césped del espíritu,
sobre la rosa cardinal del alma.

Ya no alcanza su hechizo
ante la vil tarea de espantarme
las moscas de la herida.

Eco hostil de la angustia,
néctar tardío,
lienzo inservible a la mirada lívida.

Ha llegado la lluvia con sus diosas alegres,
pero no logran arrancarme
de mi sed harapienta
en este escaso fluir de mis nacientes.

Hola Oscar, un muy buen trabajo el que nos presentas hoy. Me encanta la riqueza de tu léxico, el atreverte a explorar lo nuevo, lo que no se ha dicho y eso es algo digno de admirar y comentar. Esa lluvia pertinaz siempre remueve emociones que tienen mucho que ver con el amor, parafraseando a Alberto Cortez.

Saludos amigo mio

Javier