Poemas importantes de nuestro tiempo (A Alberto Madariaga)

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F. Enrique
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Poemas importantes de nuestro tiempo (A Alberto Madariaga)

Mensaje sin leer por F. Enrique »

Reconozco que he sido vencido por el mundo ¿Quién no se ha sentido así alguna vez y ha entregado incondicionalmente su cuchara de madera a un señor tan implacable? Pero yo añadiría más, he sido masacrado por él como si fuera un hondero ilota caído sin ninguna gloria en el desfiladero de las Termópilas. Así se sentía Pasolini cuando escribió uno de los poemas más famosos de nuestro tiempo. Análisis tardío, con sus llamativos fallos (quizás no los tenga) es un poema importante, en tanto que el poeta atraviesa su propio drama y lo traslada a los demás porque nos habla de la angustia insaciable que corroe a cada individuo y que nos ha traído el nuevo mundo que, desde ya, tiene sabor a rancio. Un terrible escenario en el que todos queremos ser protagonista y acabamos haciendo un cameo (sin ser famosos) en el que pasamos con el libro de instrucciones de la vida bajo el brazo, un libro que no pensamos leer ni por casualidad; quizás sea cierto que un artículo decente se escribe en cinco minutos y se tarda horas en escribir uno bueno.
1

Al príncipe.

Si regresa el sol, si cae la tarde,
si la noche tiene un sabor de noches futuras,
si una siesta de lluvia parece regresar
de tiempos demasiado amados y jamás poseídos del todo,
ya no encuentro felicidad ni en gozar ni en sufrir por ello:
ya no siento delante de mí toda la vida…
Para ser poetas, hay que tener mucho tiempo:
horas y horas de soledad son el único modo
para que se forme algo, que es fuerza, abandono,
vicio, libertad, para dar estilo al caos.
Yo, ahora, tengo poco tiempo: por culpa de la muerte
que se viene encima, en el ocaso de la juventud.
Pero por culpa también de este nuestro mundo humano
que quita el pan a los pobres, y a los poetas la paz.

Pier Paolo Pasolini

De: «La religión de mi tiempo», 1961
Traducción de: Delfina Muschietti

Un ligero recorrido por los que son, desde mi punto de vista, algunos de los poemas más importantes de nuestro tiempo. No tienen porque ser necesariamente los mejores.



2

Acabó todo chica triste, es la joya literaria de Dylan, con permiso de algunas de las canciones en que se vio espoleado por los alucinógenos el cantante de Duluth. Es un monumento hiriente y perdurable al desamor, al despecho más militante; Mientras ella exista / no hallaré la paz / y, sin embargo, / deseo fervientemente / que siempre exista.

Joan Báez canto está canción con devoción como si fuera dirigida a otra, como si no llevara en la garganta privilegiada una ruptura traumática con el cantante.
3

La riqueza - Pasolini.



Cercana a los ojos

Cercana a los ojos y los cabellos sueltos
sobre la frente, tú, pequeña luz,
dispersa, enrojeces mi cuaderno.
De adolescente, en tu pálida llama,
ardía hasta la noche, y era extraño
escuchar al viento y a los grillos solitarios.
Entonces, en la olvidada habitación
dormían mis parientes, y mi hermano,
descansaba inerte tras un muro delgado.
¿Dónde está ahora, luz roja?
No hablas, sin embargo iluminas; y suspira
el grillo en el silencio de los campos.
Y mi madre se peina al espejo
de una manera antigua como tu luz,
pensando en su hijo ya sin vida.

(Pasolini - Versión española: Francisco Enrique León)

Una desesperada vitalidad

Tenía veinte años, incluso menos, dieciocho,
diecinueve… y había vivido un siglo,
una vida entera.

Al constatar consumido por el dolor
que nunca podría dar mi amor
sino a mis manos o al musgo de las trincheras.

O quizás a la tierra de una tumba desolada...
veinte años y, con una historia humana y toda
su poesía, una vida se había acabado.

(Traducción de Francisco Enrique León)

La riqueza es, definitivamente, el poema turbio que más clarifica el pensamiento de Pasolini. Estamos solos con el monstruo que se retuerce en el interior de cada uno. Imitamos a los ricos en nuestros delirios descorchando una botella de champán cuando nuestro cava debería ser un ejemplo a seguir.

Deduzco que esos muchachos, de los que nos habla Pasolini, son aquellos contra los que se rebeló el poeta amargamente.
, Hijos de un bienestar que no les había posibilitado desarrollar un hambre verdadera de Justicia. La policía, hombres del Sur en buena parte, sufrió brutalmente las iras de aquellos muchachos acomodados y malcriados que decían que querían cambiar el mundo siguiendo las consigas del Mayo francés. Pasolini puso el dedo en la llaga; primero debían cambiarse a ellos mismos.

¿Por qué soy contrario al aborto a pesar de ser progresista? Porque considero que la vida de un niño empieza en el momento, no siempre bien definido, de la Concepción. Debemos reservar un lugar en nuestras almas para lo sagrado, hace que el pobre sea honrado a pesar de su perra suerte y de algunos partidos que les enseñan a engañar. El Estado debe ser laico, no por ello debe desterrar lo sagrado.
4

Palabras para Julia - José Agustín Goytisolo.






Tú no puedes volver atrás
porque la vida ya te empuja
como un aullido interminable,
interminable.

Te sentirás acorralada,
te sentirás perdida o sola,
tal vez querrás no haber nacido,
no haber nacido.

Pero tú siempre acuérdate
de lo que un día yo escribí
pensando en ti, pensando en ti
como ahora pienso.

La vida es bella, ya verás
como a pesar de los pesares
tendrás amigos, tendrás amor,
tendrás amigos.

Un hombre solo, una mujer
así tomados, de uno en uno,
son como polvo, no son nada,
no son nada.

Entonces siempre acuérdate
de lo que un día yo escribí
pensando en ti, pensando en ti
como ahora pienso.

Otros esperan que resistas,
que les ayude tu alegría,
que les ayude tu canción
entre sus canciones.

Nunca te entregues ni te apartes,
junto al camino, nunca digas
no puedo más y aquí me quedo,
aquí me quedo.

Entonces siempre acuérdate
de lo que un día yo escribí
pensando en ti, pensando en ti
como ahora pienso.

La vida es bella, ya verás
como a pesar de los pesares
tendrás amigos, tendrás amor,
tendrás amigos.

No sé decirte nada más
pero tú debes comprender
que yo aún estoy en el camino,
en el camino.

Pero tú siempre acuérdate
de lo que un día yo escribí
pensando en ti, pensando en ti
como ahora pienso.

(José Agustín Goytisolo - Versión: Paco Ibáñez)
5

¿Puedes distinguir entonces
el Paraíso del Infierno?
¿Los cielos azules del dolor?
¿Puedes distinguir un campo verde
de una fría vía de acero?
¿Un velo de una sonrisa?
¿Piensas que puedes distinguirlos?

¿Lograron que cambiaras
tus héroes por fantasmas?
¿Cenizas ardientes por árboles?
¿Aire cálido por una brisa fresca?
¿una comodidad fría por el cambio?

¿Lograron que cambiaras
un paseo en un parte de guerra
por un papel protagónico en una jaula,
el amor en el presente, la muerte en el pasado?

Cómo me gustaría
que estuvieras aquí.

Solo somos dos almas
nadando en una pecera
año tras año
corriendo sobre la misma vieja escena.

¿Qué hemos encontrado?
Los mismos miedos de siempre.
Ojalá estuvieses aquí.
(Roger Waters)






Ojalá estuvieses aquí de Roger Waters, Roger, con más titubeos de los aconsejables, tuvo que hacerse cargo del liderato de Pink Floyd tras la caída en la locura del genial Syd Barret. Durante tres años le rindió homenaje con maravillosas canciones. La mejor de todas es esta, en que lo encumbra en el recuerdo y en la que no deja lugar a dudas de su izquierdismo radical criticando con saña a la sociedad de consumo surgida de la posguerra que rinde un culto grotesco y deforme a la comodidad. Syd murió loco hace unos pocos años, se nos frustró la avenida del nuevo Carroll, así nos lo anunciaba Mira cómo juega Emily o El espantapájaros.

6




Ver a un amigo llorar - siendo rigurosos con la gramática podemos decir que pocas veces Brel estuvo más desafortunado, no enlaza bien los versos; va de un problema a otro sin solución de continuidad, sus elipsis son poco menos que insostenibles. Pero es tan hermoso y hondo lo que dice, nos remueve tanto la sensibilidad si es que nos queda entre tanto desastre; ya no sentimos que llevamos dos cruces al hombro y otras muchas en la maleta que no queremos abrir.

Nos acerca a un hombre con un cáncer de pulmón terminal que tiene ansias de vida a pesar de que le falta la respiración Un flamenco que ataca sin contemplación al grupo humano al que pertenece, aunque a veces, y sin resultados, intenta arreglarlo con sentidas declaraciones de amor a su tierra. Un ser humano con muchos pecados inconfesables que ante el dolor siempre tiene el recuerdo de la niñez para volver a soñar., a sentir que sigue vivo.
7


Crucifixión - Phil Ochs, este tejano que no amaba los rifles (rigurosamente era un hombre del Este) creó su obra más ambiciosa partiendo de una analogía que comparaba el magnicidio de John Fitzgerald Kennedy con la muerte de Cristo, curiosamente Phil era judío, aunque debido a la salud mental de su padre no recibió formación religiosa. Esta canción fue un fracaso comercial, solía ser la norma, la Guerra Fría hizo que los americanos no quisieran saber nada de un comunista, Phil escribió otro poema importante sobre la figura de Cristo, una deliciosa balada , El carpintero, que antecede al principio de la Última tentación de Cristo de Scorsese,
7



De Vita Beata - Jaime Gil de Biedma. Los Novísimos marcaron diferencias pronunciadas con la poesía social de los 50. Jaime es y no es de ellos, de él se suele hablar de poesía de la Experiencia, unos pocos, a veces, desmintiendo a Gardel, crean distancias siderales. Es el poeta de su época que más persiste entre los jóvenes, quizás porque fuera el más frágil y el que mejor supo mirarse hacia dentro.






De Vita Beata

En un viejo país ineficiente,
algo así como España entre dos guerras
civiles, en un pueblo junto al mar,
poseer una casa y poca hacienda
y memoria ninguna. No leer,
no sufrir, no escribir, no pagar cuentas,
y vivir como un noble arruinado
entre las ruinas de mi inteligencia.

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No volveré a ser joven

Que la vida iba en serio
uno lo empieza a comprender más tarde
-como todos los jóvenes, yo vine
a llevarme la vida por delante.

Dejar huella quería
y marcharme entre aplausos
-envejecer, morir, eran tan sólo
las dimensiones del teatro.

Pero ha pasado el tiempo
y la verdad desagradable asoma:
envejecer, morir,
es el único argumento de la obra.
8

Gloria Fuertes

Sociedad de Amigos y Protectores
de Espectros, Fantasmas y Trasgos.
Muy señores suyos.
Tengo el disgusto de comunicarles,
que tengo en mi casa y a su disposición
un fantasma pequeño
de unos dos muertos de edad
que habla polaco y dice ser el espíritu del Gengis Kan.
Viste sábana blanca de pesca
con matrícula de Uranio
y lleva un siete en el dobladillo
que me da miedo zurcírselo
porque no se está quieto.

Aparece al atardecer,
o de mañana si el día está nublado,
y por las noches cabalga por mis hombros
o se mete en mi cabeza a machacar nueces.
Con mi perro se lleva a matar
y a mí me está destrozando de los nervios.
Dice que no se va porque no le da la gana.

Todos los días hace que se me vaya la leche,
me esconce el cepillo, la paz y las tijeras,
si alguna vez tengo la suerte
de conciliar el sueño
ulula desgañitándose por el desván.
Ruego a ustedes manden lo que tengan que mandar
y se lleven de mi honesto pisito
a dicho ente,
antes de que le coja cariño.


9


Cerrado por derribo - Sabina siempre ha tenido una capacidad asombrosa para escribir poemas magistrales. Pero hay que reconocer que en sus primeros y últimos discos los alterna con canciones rutinarias.




Nos quedamos por la mitad, cuando asentaba los 50. Ahí, siguiendo las anáforas de un soneto de Lorca, escribe Cerrado por derribo, por si fuera poco le da continuidad y le busca una hermana melliza que la iguala en calidad; Nos sobran los motivos. Ambas expresan las intimidades más aireadas de un poeta que habla de sí mismo con la temeridad de aquel que piensa que no le queda nada que perder.

10



Ruego para ser enterrado en una playa de Sète - Georges Brassens. Cotmprendo que ,entre el bueno de Georges y su paisano Paul Valéry, haya exquisitos que se queden con el simbolismo metafórico y preciosista de este último. El propio Georges en esta canción se siente pequeño ante la grandeza de Paul, al fin y al cabo dio un paso adelante en la poesía. que aún se marca cuando escribimos o soñamos que lo hacemos. Después estamos los que consideramos a Brassens el mejor poeta francés del siglo xx y La prière puede que sea
el poema que mejor lo justifique. Eligió la misma estrofa de "El cementerio Marino" ,como homenaje sincero a Valéry, para hacer un repaso a todas sus obsesiones, hablar del amor y reírse, una vez más, de la muerte. Pero los amigos lo primero. Pidió encarecidamente en la canción ser enterrado en el Cementerio de los pobres junto a la playa de la Cornisa. Se cumplió, aunque nos parezca mentira a los españoles, los franceses tienen cosas buenas.
11

Crímenes perfectos - Andrés Calamaro. Cuando eres adolescente tienes los sentimientos a flor de piel, cosas insignificantes se magnifican y dos veces a la semana piensas que tu mundo se ha perdido irremediablemente para volver a surgir no sabes desde dónde. El rockero más grande en español de la historia, tuvo que enfrentarse con el terror en esa etapa tan delicada de la vida, salió adelante, pero quedó tocado hasta el punto de no saber si gritar de alegría por el primer Mundial de Argentina o llorar por los muertos y desaparecidos. Andrés con sus pocos años lo tuvo claro: " La moneda cayó / de la mano de la soledad / y el dolor.

Andrés hace una analogía terrible de ese terror con el amor de pareja, parece un contrasentido que te haga llorar quien te ama, pero ocurre. "No me castigues con tus crímenes perfectos.
12
De la publicidad

Reportaje de moda en Marrakech.
Tres loin de l'innocence este perfume.
Una fotografía retocada
con acuarelas suaves. Si desea
reparamos su piel. Esta revista cuenta
familiares parábolas al fin:
de cómo maquillar los sueños agresivos
o cómo estilizar la derrota y el tedio.
Perfumada de Armani
la nada es altamente soportable.

De "Problemas de doblaje" 1982

Del descifrar

Fluir en la corriente sagrada de los versos
de una noche a otra noche
y ser atropellada, ser mordida
por la negra belleza que estalla en las palabras.

Y qué saturación sentir el aire
de otros mundos, la hoja que temblaba
en la lluvia con sol, los astros asomados
a la leve escritura,
un aroma olvidado de la infancia
o un placer sumergido
en las aguas más hondas de la vida:

carne que se entreviese
-erótico fulgor rosado y denso-
bajo el encaje oscuro del poema.

De "Problemas de doblaje" 1982

De la publicidad - Aurora Luque. Sumergida en la nostalgia de las lenguas clásicas y traductora de ellas, Aurora, las sumerge en un baño de modernidad conjugando lo que creíamos eterno con la volatilidad de las marcas y de las frases recurrentes que sólo sirven para definir un momento preciso. La mixtura, además de interesante, es eficaz para hablarnos de la deriva reivindicativa de la mujer occidental.
13



Canción del amor perdido - Fabrizio de André. Sorprende que Faber, como la marca de lápices, escribiera está canción en su primera juventud. Es apabullante escuchar lo que dice de un amor muy maduro, cuando los años caen con todo su peso, cuando se va la pasión y solo queda un poco de ternura. Su introspección psicológica no tiene nada que envidiar a la de Dostoievski. Quizás debería haber traído aquí la experiencia agónica de 'Hotel Supramonte", es posible que sea la mejor canción de amor italiana. Pero hay que estudiarse un manual para entenderla plenamente ¿Cómo pudo perdonar a sus secuestradores? Cuando compro un televisor lo primero que hago es coger el mando a distancia, acto seguido tiro el manual de instrucciones.
14

Joan Margarit - Joana

Cuadro con pájaros

El muro es, de este lado, oscuro y triste,
tal como sucedía en aquel cuento
que un día te expliqué. Si fuese cierto, hoy
todos los pájaros que tú pintaste
te esperarían en el otro lado
cantando para ti: la parte clara
de la que hablaba el cuento
te acogería como yo y tu madre
si pudieses volver de nuevo a casa.
Mientras cuento la historia para mí,
miro los últimos pájaros que pintaste.
Aquí, en el lado lóbrego del muro,
¿de qué forma podría pagar esta ilusión
de sentirte en la brisa de un instante?

No hay milagros.

Llovía con desidia.
Diecinueve de octubre, las nueve de la noche.
Joana iba asustada hacia el quirófano
rodeada por nosotros, que quedamos
en la salita mal iluminada junto a los ascensores.
Dicen que en un intento
de salvarse le dijo te quiero al cirujano.
Creíamos que un hada podría devolvernos
la Joana tranquila, la de siempre,
con sus confiados ojos centelleantes.
A las once mirábamos
las gotas de la lluvia en el cristal
como si resbalaran por la noche.
La noche era una hora de guadaña.
Siempre encuentro un momento para leer a Margarit en estos días. De todo lo mucho y bueno que ha escrito me quedo con cualquier poema de Joana, una inmersión sincera en el dolor recibido con el estoicismo de los hombres verdaderamente buenos. Hay pocos, a ellos les está reservado el poder transmitir la emoción de cada instante con un verso de amor.
15


American pie - Don McLean.

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Nuestro autor tiene talento, lo derrama en profundas canciones de amor, pero está atrapado en un poema de1971, esta, homenaje sincero y sentido a Buddy Holly, habla de la deriva sentimental de su país desde la muerte del gran cantante hasta ese año. Don no levantaría cabeza del éxito de American pie, a partir de ahí sólo otra canción suya, la misteriosa y fascinante Vincent consagrada a la memoria de Van Gogh, se escucharía por la radio.

La letra de la Canción, tocada por un cripticismo volitivo e inquietante es para enmarcar. Su épica sentimental, su recuerdo de los viejos muchachos, la música que hace sonreír y llorar sólo están al alcance del mejor Dylan, de hecho esta canción sería de audiencia obligatoria en el bachillerato si hubiera sido escrita por el trovador de Duluth.
***
Don McLean, el chico que aquel 3 de Febrero de 1959, repartía los periódicos con la funesta noticia del accidente en primera plana, fue sincero cuando le preguntaron por su carrera, dijo que viviría para siempre del día que la música murió. Este impresionante monumento con un título de un cripticismo extravagante cuyo autor se regocija en no ayudar a desvelar; ¿Pastel Americano?. La canción, una de esas joyas que brillan de tarde en tarde, tiene una letra a la altura de los mejores poetas y un ritmo in crescendo que se extiende, casi, por toda la canción, no tuvo continuación, que recuerde de McLean solo puedo citar otra canción de gran mérito, Vincent, un emocionado mensaje con el alma de Van Gogh.

Pero febrero me estremecía
con cada periódico que entregaba,
malas noticias en los portales,
no pude dar un solo paso.
No puedo recordar si lloré
cuando pensé en su chica viuda,
algo me caló muy adentro
el día que la música murió.






Buddy Holly tenía un talento equiparable al de Lennon o McCartney, una sonrisa eterna y la determinación de cambiar la música. y otras cosas; se enamoró perdidamente de una hispana y se casó con ella, para disgusto de algunos, Sabía lo que quería y lo demostraba en cada nueva composición que hacía. Murió, junto a Ritchie Valens, The Big Bopper, y el joven piloto que conducía la avioneta, aquel día condenadamente frío de Febrero, llevándose con él las canciones que, sin duda, hoy estaríamos tarareando sin saber por qué. Como en un guión que hubiera escrito un visionario que creyera en el destino, parecía que el único de los tres músicos que estaba predestinado a morir aquel día era Buddy Holly; The Big Bopper logró su plaza, la avioneta solo tenía cuatro contando la del piloto, a costa de uno de los acompañantes de Holly, a causa de la fiebre, el autobús disponible tenía estropeada la calefacción, y Ritchie Valens estaba resignado a largas horas de travesía temblando cuando el otro músico de Holly que le propuso jugarse la última plaza con él y la perdió.
16
Si yo no hubiera fracasado,
cerrado mis puertas con llaves.
Si no hubiera heridas
en las despedidas,
cómo diría te quiero,
si lo digo y no me lo creo.

Quién pudiera pensar
con los ojos en paz
y verse a sí misma
por el mismo prisma
que a los demás.


Con los ojos en paz - Eva Sobredo. Cecilia, como si de una broma pesada se tratara, era tres en una. Parece ser que con la que más se identificaba era con Eva Sobredo; así firmaba sus canciones. Nos dejó cuando pergeñaba proyectos ambiciosos, meter en música varios poemas de Valle- Inclán, por ejemplo. Es cierto que perdimos algo muy bello con su adiós. Cecilia, al contrario que sus colegas de entonces que estaban influenciados terriblemente por la Chanson, bebió con profundidad en las fuentes anglo-sajonas del momento, siempre tuvo un camino para seguir a Dylan o Paul Simon.

17

Soy un rumor por las esquinas
que anuncia que va a llegar
el día que todos los hombres
Juntos podrán caminar.
La guitarra a la mañana
le habló de libertad
(Jesús de la Rosa - Rumor)




Con hojas de menta - Manuel Molina . Aunque nació en Ceuta, aquí siguen viviendo muchos familiares suyos, Manuel se sentía sevillano hasta los huesos del alma. Fue componente de Smash el grupo que puso en el mapa al rock andaluz, conjugando con gracia y hondura esta tendencia musical con el flamenco y el progresismo, cuando no era retrógrado y buenista. Lo mejor vendría después, cuando formó pareja con la que sería su mujer durante muchos años, Lole
Montoya. El primer disco de la pareja; Nuevo día es una muestra de la pujanza del Nuevo Flamenco,
Manuel escribía expresamente para la voz hipnótica y profunda de ella. Nuevo día se encuentra en el top 10 de la música popular española, acompañado por el Omega de Enrique Morente y Lagartija Nick y el Hijos del agobio de Triana.
18

Sabes, fuiste un patán pendenciero
que se burlaba del miedo
y el miedo no se fue.






A mi adolescencia - Joan Baptiste Humet. Se movió con soltura entre la Canción de autor y la mal llamada música ligera, además le daba mucha importancia a la música. Pero era ante todo poeta. Algunas canciones suyas como Qué no soy yo, El invento y Clara, estuvieron en la parte alta de la lista de éxitos. Pero los tiempos cambiaron y su sensibilidad a flor de piel no halló continuidad en un mundo que leía otros poemas menos comprometidos con la realidad cotidiana y la aceptación digna de la derrota. Hoy le escuchamos algunos que disfrutamos con lo que decía aunque nos arranque una lágrima.
19

! Ay mi amor, sin ti no entiendo el despertar¡
!Ay mi amor sin ti mi cama es ancha¡
!Ay mi amor, que me desvela la verdad
entre tú y yo la soledad
y un manojillo de escarcha¡



Romance de Curro el Palmo - Serrat. Juanito, de niño, escuchaba en un Poble sec ya frecuentado por andaluces La niña de puerta oscura. Sentía la Copla como si fuese suya. Esta canción es la mejor incursión que hizo en ella. Consiguió queriendo que los adolescentes de entonces, alérgicos a la inmortal canción andaluza, nos dignáramos a mirarla, algo bueno debe tener cuando le gusta a Serrat nos decíamos mirándonos con un gesto de escepticismo.
20

Cabo Sounion

Al pasar de los años,
¿qué sentiré leyendo estos poemas
de amor que ahora te escribo?
Me lo pregunto porque está desnuda
la historia de mi vida frente a mí,
en este amanecer de intimidad,
cuando la luz es inmediata y roja
y yo soy el que soy
y las palabras
conservan el calor del cuerpo que las dice.

Serán memoria y piel de mi presente
o sólo humillación, herida intacta.
Pero al correr del tiempo,
cuando dolor y dicha se agoten con nosotros,
quisiera que estos versos derrotados
tuviesen la emoción
y la tranquilidad de las ruinas clásicas.
Que la palabra siempre, sumergida en la hierba,
despunte con el cuerpo medio roto,
que el amor, como un friso desgastado,
conserve dignidad contra el azul del cielo
y que en el mármol frío de una pasión antigua
los viajeros románticos afirmen
el homenaje de su nombre,
al comprender la suerte tan frágil de vivir,
los ojos que acertaron a cruzarse
en la infinita soledad del tiempo.


Aunque tú no lo sepas.


Como la luz de un sueño,
que no raya en el mundo pero existe,
así he vivido yo
iluminando
esa parte de ti que no conoces,
la vida que has llevado junto a mis pensamientos...

Y aunque tú no lo sepas, yo te he visto
cruzar la puerta sin decir que no,
pedirme un cenicero, curiosear los libros,
responder al deseo de mis labios
con tus labios de whisky,
seguir mis pasos hasta el dormitorio.

También hemos hablado
en la cama, sin prisa, muchas tardes
esta cama de amor que no conoces,
la misma que se queda
fría cuanto te marchas.

Aunque tú no lo sepas te inventaba conmigo,
hicimos mil proyectos, paseamos
por todas las ciudades que te gustan,
recordamos canciones, elegimos renuncias,
aprendiendo los dos a convivir
entre la realidad y el pensamiento.

Cabo Sounion - Luis García Montero. El autor era joven a mediados de los 90, pero ya había alcanzado una madurez insultante. En este poema funde con singular acierto la poesía de la experiencia cotidiana con un clasicismo tierno y perdurable que recuerda a la melancolía de Cavafis.

21

Katy Parra - Coma idílico

No maldigas el tiempo que perdiste
conquistando mi alma
y otras cosas.
¿Aún deseas que te diga
lo que quieres oír?
Sírveme otra cerveza,
arráncame la ropa con los dientes
y destroza a pedradas
el castillo de arena y cicatrices
que a diario restauras
en alguna bahía de mi olvido.


María

Se llamaba María.
Era como una lluvia
levísima de otoño,
con los ojos muy dulces,
del color de los bosques
en los cuentos de hadas.

Era como una luz
trasnochada y cumplida,
como la infatigable
sustancia de un domingo.

La soñé tantas noches
que acabé por creer
que mi vida era un sueño.
"Coma idílico” es un poemario de complicidades, de guiños y citas cultas, emocional y vital por el que se desborda la vida a borbotones. Se trata de un libro que, a través de la ironía, responde a un ajuste de cuentas con la vida y el desamor a través de un tono coloquial, sencillo y vitalista. (Internet)
22

La mujer de cristal - Víctor y Diego.

Cristal, mío,
te quiero partida en mil pedazos
para mil veces tenerte.






Eran conocidos como los Simon y Garfunkel españoles, supongo que para su alegría, ya que la armonía de sus voces no tenía nada que envidiar a la del dúo de la música popular por excelencia. Tuvieron un par de años muy buenos con éxitos como "Tiempo de amor" y "El parque". Se movieron entre el folk y el rock, con guiños pronunciados al pop y su alegre melancolía. Su canción se orientaba a la protesta con ejemplos delicados y profundos como " Mi escuela" o "El afilador" donde dejaban que la nostalgia labrara un hueco insondable. "La mujer de cristal es una canción de amor desgraciado y, por lo tanto, de muerte.

22




Los sonidos del silencio - Paul Simon. La muerte de John Fiztgerald Kennedy hizo que el mundo que había imaginado el joven Paul y la " Nueva Frontera" se tambaleara bruscamente. Su canción se vistió de negro y le hizo pensar que el mundo ya no sería como antes. Era una vuelta a la oscuridad, una plegaria teñida de desesperanza.

La canción más popular de 1965, está envuelta por la mejor literatura. Paul no era ajeno a que en su país la poesía vivía su época de esplendor con los testimonios oscuros de Allen Ginsberg, Anne Sexton y Sylvia Plath a la cabeza. Paul se sentía atraído por el mundo poético de Robert Frost.
23




Lágrimas en el Cielo - Eric Clapton. El guitarrista más popular del rock pasó por el trauma más horrible que uno puede experimentar, perdió a uno de sus hjos, siendo niño, en un accidente. Poco después compuso, o le compusieron a medida, un canto fúnebre que pasa por ser, junto a la inmarchitable Lyla, su mejor canción. Carga de profundidad para abordar una pena inconsolable.

24

Era el invierno (Ella decía) - Francis Cabrel.


Francis no es sólo ese baladista tierno que nos ha dejado temas inmortales con canciones como La quiero a morir, La tinta de tus lágrimas o Ella escucha crecer las flores, es un hombre comprometido con su tiempo y hazañas. No le importa arremeter contra el mundo de los toros, tan querido en el Sur de Francia, o tratar con espíritu crítico el drama de la inmigración; aquellos que se jugaron la vida por alcanzar la tierra prometida, ahora sienten nostalgia de su país porque no es necesario mirar el reloj. En este toca un tema maldito; el de el suicidio en aquellos que apenas han empezado a vivir. Estremecedora.

25


Comentó por ahí
que yo era un chaval ordinario;
pero cómo explicar
que me vuelvo vulgar
al bajarme de cada escenario.




Ojos de Gata - Enrique Urquijo. Enrique y Sabina se conocían, en uno de sus encuentros surgió esta canción. No se sabe quién fue más culpable. Lo cierto es que cada uno la llevó a su terreno: Joaquín, por rancheras, lograría uno de sus más sonados éxitos. La versión de Enrique no llegó a levantar, ni de lejos, el mismo revuelo, pero quedó grabada para siempre en la mente de los seguidores del Poeta de la tristeza.
26




Cadillac solitario - Sabino Mendes. Sabino y Loquillo son una pareja imprescindible del rock español; el uno escribe las canciones, el otro las dramatiza y las hace suyas. Para los que tenemos cierta edad Cadillac solitario es un himno imperecedero a los sueños y al amor perdidos.
27


Cuando ella pasa por mi calle
hasta los geranios le guiñan los ojos.



Helena - Serrat. En 1974 Serrat volvía a cantar en catalán . Sólo habían pasado unos meses desde el antológico y descarnado homenaje a Miguel Henández. En ese año nuestro trovador más querido y brillante aún no sabía que se convertiría en el último exiliado de una dictadura oxidada y asfixiante. Helena es una de las canciones de la obra maestra imperecedera de Serrat en su lengua vernácula, en ella llora, como si fuera el Strand más profundo y enamorado del aire, la ausencia de la mujer que le había robado la sonrisa pícara y tierna. Helena es la Canción al amor herido más hermosa de nuestra música.
28




Zombis- Dolores O'Riordan - Las drogas lograron por sí solas que Dolores nos dejara un legado irregular y fragmentario, escuchando esta canción le perdonamos casi todo, nos estremece hasta la médula que sienta los gritos de impotencia, nos hace pensar en la religión del terror en la que creen muchos nacionalistas ciegamente. Penetra en la sinrazón perversa y sangrienta del terrorismo, con más patetismo aún de como lo hiciera Fassbinder en una de sus películas. Una de las canciones más importantes de los 90. Debemos perdonarle las lagunas oscuras a la que supo llorar ante la tumba de Yeats, el poeta quería una Irlanda libre sin violencia.

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El hombre en la Luna - REM. Estaremos de acuerdo en que Michael Stipe es un cantante limitado, en que la Gramática no va con él ( aún así tiene poemas impresionantes). Pero tiene un gran carisma y, sobre todo, es honesto hasta donde se puede ser. En un tiempo de crisis social y económica, como fueron los 90, no le volvió la espalda. a los problemas más graves de un tiempo cuyas garras se han alargado hasta nuestros días, fue decisivo para llevar a los más jóvenes la esencia del segundo grupo más importante de la Historia; Velvet Underground, y meter a REM en ella. El hombre en la Luna es la mejor canción del trío californiano, en ella, teniendo como hilo conductor al cómico Andy Kauffman, va desgranando frustraciones y sueños irrealizables.
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Aleluya - Jeff Buckley. La mejor canción de una época proclive al drama.



He estado aquí antes, pequeña,
conozco esta alcoba, he hollado sus caminos,
solía estar solo antes de encontrarte,
sobre un arco de mármol vislumbré tu bandera
pero el amor no es una marcha triunfal.
(Leonard Cohen – Aleluya - Versión - F. E. León)

Jeff Buckley solo publicó un disco en vida, Grace, aclamado por la crítica y por grandes nombres del mundo de la música, no tanto por el público aunque con el paso del tiempo haya logrado cifras respetables de venta. Era el año 1994, fue una aparición relativamente tardía y sorprendía que no se hubiera acelerado su lanzamiento por ninguna discográfica desde que en 1991 dejara a la audiencia en estado de trance con la interpretación de cuatro canciones, una de ellas a capella, durante un concierto en homenaje a su padre, el también cantante, Tim Buckley, muerto por sobredosis en 1974 cuando Jeff tenía 8 años, aunque casi nunca había convivido con él, pues lo abandonó cuando solo tenía unos meses. Este es un hecho que marcaría su personalidad tendente a un pesimismo lírico y profundo en sus letras, y su convencimiento de que aquellos que vivió fueron unos tiempos difíciles que habían consagrado a la soledad como una diosa implacable en el torbellino de unas comunicaciones vacías y sin alma, un momento en que las grandes empresas especulaban con el destino de millones de asalariados y una cortina oscura no dejaba que pasara la luz de las buenas intenciones.

Grace, considerado, desde el mismo momento de su publicación, una obra maestra deslumbrante desde un punto de vista cualitativo y emocional, contaba con composiciones propias en las que desarrollaba con entrega la amplia gama de su virtuosismo vocal con una gran variedad de registros usados con maestría y una precisión que hacía parecer innata su habilidad para pasar de graves a agudos sin solución de continuidad según lo requerían las palabras, y dos versiones[1]. Una faceta esta en la que se empleó con verdadera devoción y en la que conseguía que los oyentes se quedaran con la impresión de que las canciones elegidas habían encontrado su interpretación definitiva, que nadie podría igualarlas (ni siquiera Bob interpretó tan bien a Dylan) pues las abordaba con fe, convencimiento y con sensibilidad, una virtud esta última que se nombra indefectiblemente como su característica más acusada y a la que no renunciaba a pesar de saber que era denostada en aquel momento tan prosaico y asertivo.

No incluyó ninguna de sus magníficas versiones de Dylan en el disco, pero sí la que le proporcionaría su mayor éxito y la que todos cantan aunque no conozcan al autor; Hallelujah, publicada en 1984 por su compositor, Leonard Cohen. A pesar de su calidad y la celebridad del poeta no había llamado especialmente la atención del gran público, fue Buckley quien hizo que éste advirtiera que Cohen había añadido una nueva obra maestra a su cuenta repleta de pasiones y desengaños, quien la convirtió en el himno de la triste alegría que ha podido desplegar todo su significado entre el amor, la mística, las referencias bíblicas y el ansia indescriptible de inmortalidad; otros grandes cantantes la han elegido en momentos especialmente emotivos; el independiente y exquisito Rufus Wainright hizo una magnífica aunque no pudo quitarse de la mente el influjo sentimental de la memoria de Jeff, quizás la última a tener en cuenta sea la estremecedora de Chester Bennintong para ofrecer un sentido adiós a su amigo Chris Cornell en su funeral.

Jeff Buckley murió ahogado en el río Wolf a su paso por Memphis adonde se había desplazado para grabar su segundo disco, solo tenía treinta años. Parece ser que pagó caro su atrevimiento al sumergirse en el río vestido y con botas, mientras cantaba en voz alta, una canción de Led Zeppelin, en lo que no era más que un juego en un instante de euforia. Sus seguidores sostienen que su trastorno bipolar, confesado poco antes, habría estado en el origen de ello, una fase de manía habría propiciado su temeridad, ese momento en que no se percibe el peligro, en el que cualquier obstáculo, por muy difícil que sea, parece fácil de superar.


[1] La otra versión es Lilac wine, una canción situada en la zona tibia dentro del repertorio de Nina Simone por su falta de profundidad que Jeff supo elevar sacando un partido sorprendente a la calidad impresionante de su voz.

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Correrán los caballos desbocados,
horadando la vena y los sentidos.
¡Qué apetencia de mares esparcidos
en la brisa lejana del pecado!

(F. Enrique León - Mares Lejanos)


La aguja y el daño hecho - Neil Young.



Estamos de acuerdo en que Neil Young está muy por encima de muchos en el mundo del rock a la hora de escribir unas buenas letras, pero no podemos compararlo con Dylan, Bowie o Reed. Sin acabar, quizás, de unir demasiado bien los versos, y emborronando un poco con un exceso de lenguaje coloquial un texto de un lirismo estremecedor que sobrecoge y nos presenta a las claras las dimensiones de la tragedia, en esta canción no se aleja demasiado de ellos y logra imágenes que han quedado en la memoria colectiva como ilustraciones efectivas que ayudan a intentar alejarnos del problema.

Neil supo darle con una voz introspectiva la emoción que el asunto requería, sugerir todo el desastre que se acumula en el mundo de las drogas, en concreto de la heroína que acababa de llevarse a dos amigos que tocaban con él en el grupo, habla de la muerte o vivir como si se estuviera muerto, chicos brillantes, buenos músicos que ya viven entre los muertos le recuerdan a un sol que se pierde para siempre detrás de las montañas.

Gran guitarrista y gran cantante, perseverante y con ideas propias ¿no sería pedirle demasiado que fuera un poeta maravilloso?

En esta canción no pudo liberarse del sentimiento de culpa que le perseguía, sobre todo, por la muerte del primero de sus amigos ya que intervino para poder evitarla y no hubo suerte, se notaba un cierto resquemor cuando años más tarde intentaba decir que no había sido culpa suya, había sido la propia víctima quien se hundió en el abismo blanco de la droga que busca el nirvana. Neil lo despidió cuando vio que no podía sostener la guitarra en un ensayo, lo envió a Los Ángeles, le pagó una rehabilitación que nunca llegó. Ni un solo momento debió sentirse culpable, pero los buenos tipos como él no suelen justificarse por lo que ocurre delante de sus ojos.
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A mis venas - Fernando Merlo
El poeta es ese viejo pescador solitario que lleva ochenta y tantos días sin pescar un solo pez y del que todos piensan que su aventura se ha acabado, pero él sale cada mañana con la esperanza de atrapar ese emperador cuyo tamaño y bravura en la lucha por su vida le otorgue la única victoria posible para mitigar el peso de la sombra de un vencido. Los que pierden no pueden quejarse, como decía el pragmatismo de los romanos, pero sí pueden demostrar lo injusta que puede ser una derrota, que las garras de la indiferencia no pueden arañar el orgullo de haberse hecho lo que era necesario para evitarla.



Fernando Merlo fue un poeta transgresor y valiente que encontraría ese pez al final de su vida de la forma más inesperada, viendo su trayectoria con las formas hasta entonces; un soneto con regusto clásico de factura impecable que, como en estos casos, es un regalo sonoro para los oídos; eso sí con una temática realista y demoledora, era heroinómano y, como en el resto de su poesía, insiste en la presencia de la muerte en esa nieve, un terreno propicio para acabar con los sueños que alentaba en los primeros escarceos de un amor que mata. No tenía ni treinta años cuando fue encontrado muerto detrás del túnel con una aguja clavada en su brazo. A buen seguro, hubiera conseguido conciliar le estética que perseguía con el fondo en el que insistía con devoción de haber vivido más, de habernos mostrado la angustia de un perdido en plena madurez, en la reconciliación con la existencia a pesar de su falta de sentido.

Fernando Merlo encontró en la poesía el instrumento preciso con el que explayar su originalidad, sus dudas, su talento y la agonía vitalista reflejada en su obsesión por la muerte, por el miedo que sentía cada vez que castigaba su propio cuerpo, el alma de su resistencia, la gloria de un poeta que proyectaba sus laureles hacia el futuro.


Estos cauces que ves amoratados
y de amarillo cieno revestidos,
eran la flor azul de los sentidos,
que hoy descubre sus pétalos ajados.

Besos verdes de aguja en todos lados
hieren la trabazón de los tejidos
y denuncian los brazos resentidos,
la enigmática piel de los drogados.

Las que llevaban vida y alimento
son tibias cobras de veneno breve,
blanco caballo con la sien de nieve.

Trotando corazón y sentimiento
que por las aguas de la sangre vierte
con rápido caudal la lenta muerte.



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Bob Marley


Le llaman Harry el yonqui,
vive en el Barrio Chino;
chaqueta negra, pantalón vaquero,
Y cómo toca el blues el tío.

No, mujer, no llores - un yonqui desconocido. No soy muy devoto de Bob Marley, pero algunas de sus canciones, empezando por la de Redención, hacen que crea en él, aunque me cueste trabajo aceptar que adorara como a un Dios a un déspota como el Negus. Esta canción se la tomó prestada a un músico callejero de Kingston.

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El espectáculo debe continuar - Brian May.




Lo que fuera arrancar besos en el olvido
es un trotar sin gracia invocando la suerte,
pasan enfermedades, citas que nos aguardan
con la fragilidad sincera de los cuerpos,
y pasan comentarios vacíos que no llegan
mientras toda la muerte reina en los hospitales
y el verso se nos hunde sin libertad ni orquesta
.
No tenía en mente a Falstaff cuando escribí lo que muestro, hablaba de una situación propia, pero he acabado por ver su sombra en la descripción que hacía de mí mismo, de mis aspiraciones, de mis sueños perdidos, de la amistad que no sabemos distinguir cuando la llenamos de ideales que no resisten la confrontación con los intereses de la realidad. El amor sigue sin decirnos por qué hacemos daño a las personas que amamos cuando las imaginamos fuertes, por qué ellas nos lo hacen a nosotros cuando nos ven más desprotegidos.

Aunque admiro a Orson Welles y conozco una buena parte de su obra mi contacto con "Campanadas a medianoche" se remite a una crítica magistral que leí hace mucho tiempo y que no he vuelto a encontrar pero incorporó su personaje protagónico a mi vida.

Shakespeare era moderno, pero no hasta el punto de hacer morir a su personaje de tristeza, lo llevaría, como noble que era aunque no lo pareciera ya que tenía corazón, al campo de batalla para que se encontrara con la muerte y pudiera, como un valiente, saborearla en un trance definitivo.

Cuando todo ha pasado, después de una desilusión, es fácil discernir que se tildó de amistad lo que no era sino una relación interesada; el bufón no deja de ser un triste que recurre a la ironía para que la verdad sin tapujos no le delate. Falstaff, noble y plebeyo al mismo tiempo, pensaba que tenía a un rey como amigo y se las tiene que ingeniar para que la gente se ría de la corona sin saberlo, qué significa la gloria de derecho divino ante las ansias terrenales de existir, su apego a los cascabeles es algo vocacional, es un rebelde que persigue con desesperación la vida en una sociedad que siempre tiene en el punto de mira a la Camarda aun cuando la cubra con el vestido de una promesa confusa e interesada que se rebela, arrinconando a la razón, contra el viaje definitivo.
Las chanzas se apagaron como viejos vestidos,
lo que fuera brillante
se convirtió en derrota,
armarios retraídos que no tienen deseo
y que guardan portadas de revistas sin fecha.
Brian May vio la oscuridad implacable de la muerte en los ojos cansados de su compañero de fatigas, lo fútil de la gloria cuando se asiste en soledad a unos últimos pasos que se dan sin saber si la tristeza y la amargura forman parte también del espectáculo, y se esfuma la alegría de la vida cuando no quedan ganas de reír porque el maquillaje se ha agrietado mientras el poeta sin gracia escribe versos en el rincón del jardín donde florecen las mariposas condenadas por el tiempo y se cierran las cortinas cuando ya no distingues entre una reina o un peón si ambos tenían el triunfo en la mano, pero perdieron la partida entre la realidad que acecha con su perfil descarnado y la más patética pantomima que nos arrebata el sueño eterno del amor.
Soy yo quien no habla, no ríe, quien se enamora,
soy yo quien va vestido de payaso profundo,
quien araña en la noche de las paredes del puerto
las palabras perdidas.
Ahora mi corazón está roto pero debo seguir porque el show debe continuar, el mismo actor hará de rey y bufón, la misma muerte le asistirá aunque se cambie de traje.
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Gloria ( In excelsis Deo ) Van Morrison y Patti Smith.


Roberto decía que Patti Smith se aprovechaba, para buscar a un Cristo enrollao y comprensivo, de la estela de los Them y su líder. Yo , por no perder la costumbre, disentí, el Gloria in excelsis Deo lo veía muy superior, más incisivo, más profundo, más arrostrado a la hora de negar a Dios en las alturas de la Tierra.

Él no podía olvidar que Morrison se acordara ladinamente de Bach en su Caravana y sus Semanas astrales, yo no podía sostener en mi capacidad de entendimiento a una musa creadora con estética pre-punk y jugándose la vida en cada matiz de una canción profunda, iconoclasta y dislocada.

Estábamos hablando de momentos excelsos en la perfidia de la música popular, con la gente más implicada en alcohol y en amores de un día que pueden preñar cuando no es posible cuidar a la criatura, ¿a ver qué hacemos?.
Cristo ha muerto por los pecados de cualquier otro,
no por los míos.
Poetisa perversa que pregunta a los ángeles dónde queda la aurora para poder desmoronarse en un viejo escenario con pinta prostibularia, dónde dejar el grito que tuvo en 1975, dónde está el río turbio y purulento que la libere de las nuevas amarguras. En Viet-Nam no hay rock y los cantantes mueren sin saber por qué, emitidos sus últimos lamentos por Radio Ethiopia.

Dejemos tranquilo hoy al León de Belfast, ya habrá tiempo para invocarlo y dejar que nos hable de una chica distinta.



Me quedo, en este caso, mil veces con esta poetisa que le hace un guiño a todo, aquella que hiere a Cristo mientras lo bajan de la cruz, y no cree en las Cofradías del Descendimiento. No te enfades Van, tengo una botella de cognac para brindar por Lady George, un momento para emborracharnos de la herida aprisionada en tus mejores canciones, lo haremos de la forma que lo hacen los jóvenes amantes, ahora que somos viejos para siempre. Gracias.

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El hombre que vendió el mundo - David Bowie - interpretado por Nirvana




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Qué está pasando - Amy Winehouse







I tell you what you want to ear
it depends on that I've been drinkin'
(Amy Winehouse – What it is)

Te diré lo que quieras escuchar,
dependerá de lo que haya bebido.

Es solo un sentimiento que penetra en la noche
donde encuentras un hueco
para tu corazón
inseguro y ardiente, perdido y desolado,
es tan solo un espejo que no quiere mirarte,
una luz que se extingue,
es tan solo el destino que espera en las cortinas
y atraviesa la calle de una ninfa innortada2,
y mientras en el aire
se expande el humo espeso de una larga tristeza,
de unos versos amados que llegan y se pierden
en la voz del poeta que sufre los delirios
turbios de la deriva que duele y arrincona,
y en una estancia oscura escribe para nadie.

Amy Winehouse iba muriéndose en una isla de palabras que habían naufragado entre sus labios y el recuerdo del amor y para mí seguía siendo una mujer de una sola canción. Esta equivocación me recuerda la inconsistencia con la que nos conducimos en nuestros tiempos, podemos encontrar lo que deseemos con un solo click, y rara vez lo hacemos para intentar saber quién está detrás de la máscara que gime. Había tenido la oportunidad de compartir las horas con una leyenda y no supe ponerme en contacto con ella mientras respiraba, mientras arrastraba su dolor por los escenarios.

En un límpido embate de vodka destilado
me sumerjo en la tarde que muere en la bahía,
sufro porque no puedo anhelar unos ojos
y no tiembla mi cuerpo como una estrella errante.

Se me ha ido el amor, y ya no sé llamarlo
¿en qué calle estará
el ansia desmedida de besos de tus noches?
¿a qué puerta sin llave caminará tu olvido,
tu larga ausencia herida por no seguir tu paso,
tu ineludible imagen de muñeca asustada?
El punto de inflexión para acercarme a ella fueron unas imágenes patéticas que nos llegaron desde Belgrado, Amy, en un estado de ebriedad lamentable, intentaba cantar y no podía, tropezaba con todo, se castigaba en un esfuerzo vano por cubrir el expediente y se sentía como un pez temblando bajo el sol sobre la arena de mi playa. No recuerdo si fui bueno para llorar por su caída o por la presencia en sus ojos de la muerte. Tenía miedo y perdida la mirada, cuando quise buscarla ya no estaba para decirme que viviera intensamente la independencia dorada del anonimato.

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La chispa adecuada - Bunbury




**Héroes del silencio no fueron, siguen sin serlo, uno de esos grupos que me gusten demasiado. Hablaba sin parar, fascinado por la creatividad de Calamaro, de todas las virtudes de Los Rodríguez como ese algo que para mí les faltaba, o del misticismo un tanto inocuo y efectista en demasía, o el lenguaje excesivamente metafórico en la línea confusa del Jim Morrison menos inspirado, que, desde mi punto de vista, les sobraba como banda de rock que eran, ahora que ya no están he empezado a dudar de esto último y a lamentar su ausencia. Pero quedé prendado con uno de sus cantos del cisne; La, mítica, Chispa adecuada.




Después, en solitario, vendría lo realmente bueno. He tenido que rendirme ante un hombre que sería artista aunque no tuviera talento, y lo tiene a espuertas. No comprendo, de ninguna manera, que tomará versos prestados sin permiso, en este caso fue Fernando Arrabal el perjudicado, aunque conociendo la extravagancia incorregible del melillense no me extrañaría que le estuviera agradecido por haberlo hecho partícipe de una obra maestra.





No he podido verlo en directo, pero juro que lo haré a la mínima oportunidad que tenga, me han hablado maravillas de sus conciertos y me las creo, no tengo más que ver sus vídeos; iconoclasta, tierno, irresistible, entregado a su público y a quien haga falta, incluso sus salidas de tono me resultan geniales, como las del gran Raphael, con quien le une el ser animales irrepetibles de la escena; ecléctico, tanto que ni él mismo sabe adónde va, ni a qué quiere meterle mano al día siguiente, y tantas otras cosas que podrían llenar varias manuales sin solución de continuidad. Pero lo que más me asusta de él es su sinceridad, brutal y que nadie en el mundo le puede exigir, habría tenido demasiados problemas por ella, pero le indulta un asunto insignificante, la palabra Bunbury.

Bendecida 3, como a él le gusta llamarla, es un canto de amor desesperado. Después de años de noviazgo, rompió con Benedetta Croce, hija de la inmensa Mina. La chispa adecuada puede ser, sin titubeos, la mejor canción del rock español.

Publicado el 10 de Diciembre de 2014.

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Grândola,Vila Morena - Zeca Afonso







Porque seguimos caminando por las calles mojadas
de nuestros brotes verdes con el paso cambiado,
con las mismas ideas que nos llevan al ostracismo,
a la amenaza del destierro
de esta ciudad que adora el metal y las medallas
y altera con subtítulos la voz de los profetas,
con los besos y las caricias arrinconados en los portales,
con los claveles gritando su melancolía.

Zeca Afonso era deliciosamente raro, nació el mismo año que Brel o mi padre, empezó en el mundo de la música, ya con 31 años, y no escuchó los cantos de sirena del pop y la canción melódica que emergían con el milagro de la televisión. Lo tuvo claro; canción tradicional portuguesa, angoleña y mozambiqueña, escenarios de sus andanzas, por un lado , y por otro, la canción protesta. La gloria la consiguió con Grândola, Vila Morena, banda sorona y símbolo de la llegada de la Democracia a Portugal. A nivel popular sólo la intocable y temperamental Amàlia Rodrigues cuenta con más predicamento. A pesar de ser profesor de francés en algún momento, no aprovechó la influencia de la época dorada de la Chanson. Lo tenía claro; no deseaba ser una estrella internacional.
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Mi muerte - Mort Shuman



Mi muerte espera como un Viejo druida
tan segura de que voy hacia ella
silbándole
al tiempo que pasa.

Mi muerte espera como una verdad bíblica
en el funeral de mi juventud
brindemos orgullosos por ella
y por el tiempo que pasa…

Mi muerte espera como una bruja en la noche
tan cierto como nuestro amor brilla
como el tiempo que pasa.

Pero haya lo que haya detrás de la puerta
no podemos hacer nada
ángel o demonio, ¡Qué más da!
si detrás de la puerta
estás tú.
(Mort Shuman - Versión libre de "La muerte de Brel")

La mejor canción de David Bowie. Puede parecer una provocación iconoclasta lo que acabo de decir, pero no lo es, Ziggy Stardust estaría incompleto sin esta joya bizarra en el mundo del rock que sólo fue, siguiendo El Puerto de Amsterdam, grabada en directo. No pondré ninguna objeción a los amantes del cantante inglés que me nombren títulos como Desecho espacial, Cambios, Mi alma, Cinco años, Ceniza sobre cenizas (ya sabemos que cada vez que aparece el Mayor Tom tenemos un problema) podrían ser consideradas su obra cumbre. Pero David aquí sacó un gran provecho a la versión libre que hizo de La muerte de un Brel predramático, un devoto del genio franco-belga, Mort Shuman, era un desconocido y siguió siéndolo, aunque hizo otras versiones de Brel para Scott Walter, el mejor exégeta que ha habido de la obra del bruselense.
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Dos imanes - David Summer. David sólo tenía 21 años cuando los hombres G rompieron las cifras de ventas con sus dos primeros discos. Algunas de las canciones de ellos fueron compuestas 4 ó 5 años atrás. Era un niño pijo que arremetía por celos contra los de su especie, con un estilo naīf cargado de mala uva, hablaba de marcas, de películas de la época, de política sería con humor y desparpajo, también de héroes inaccesible como Indiana Jones y de desamor como en Hace un año. Dos imanes es una de las canciones de su segundo disco, nada nuevo, la tierna guerra, chico amargado por la incomprensión y el desdén de la chica, pero es terriblemente buena, añadiría que una obra maestra.
Última edición por F. Enrique el Jue, 29 Sep 2022 18:36, editado 2 veces en total.
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Unos versos caídos en el cielo de la noche
me recuerdan la soledad del mundo cuando no estás,
la tristeza de una sonrisa que no puede desplegarse
cuando no encuentra el camino de tus labios./align]
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