Editorial Alaire

Nunca creí que cada persona fuera un mundo,
por más ansia que pongan en cambiarme,
quizás la diferencia sea esa.
(todas quieren lo mismo.)

Un yo.
¿Entonces qué encerrona me atenaza?
¿Me conocen tan mal como parece?

¿Me hacen sentir culpable?
¿O simplemente solo?
¿Permanezco en un cosmos paralelo,
o se trata en verdad de un correctivo?

¿Qué preguntas me hago después de buscar letras?
¿Esas mismas mujeres en un segundo plano?

¿Qué ocurre? ¿Qué recuerdos han sido los mejores?
¿Cuando nos conocimos, era todo ilusión?
¿Qué amor nos cegaba?

¡Si tan solo esperabais para darme boleto!
¿Fui tan inaguantable?
¡Si estaba todo calculado!

¡¡Luego dime que soy imprevisible!!

¿Ninguna se aventura en acercarse?
Ni siquiera a través de la red,
¡Tamaña humillación!

Nunca he presumido de captura…
Desconfío…
Aquí tiene que haber una conspiración.
Aún sigo pensando y no sé en qué…
Os lo juro, es ininteligible.

Solo con la sospecha,
he creado un idioma diferente.

Y lo peor de todo es que lo he traducido,
y encima me lo creo.
Pero eso lo sabíais.
Lógico que sepáis todo acerca de mí.

Aun así no me quedo en blanco.
Me fío demasiado de todo lo que he escrito.
Me dio fama de Dios.

Pero todo esto no es lo importante.
Lo que yo crea es intrascendente.

¿Piensan que soy capaz de soportarlo?
¿O quizá debería suicidarme?

¿Es relevante acaso
que mi vida no suscite interés?

¡Al contrario!

¡¡Culpo a la humanidad de mis delirios!!

Y de su puto dios.

(Me cuesta dos riñones volverme al ateísmo.)

Voy en contra de mi medicación.

Todos son planos convergentes aunque no cueste verlo. Al fin, somos poca cosa
cuando nuestra meta es morir y más si nos cuesta creer.
Buen poema, Ricardo, que he disfrutado. Volveré.
Abrazos

Un poema conceptual, filosófico, que plantea la inexorable derrota del hombre ante el misterio de su propia vida. Entiendo que el poeta debe tomar riesgos para expresar sus sentimientos; pero pienso que el remate es un poco fuerte, sin necesidad, ya que existe lo que se llama la «veneración» y la «fe», convicciones que determinan los sentimientos de millones de personas en el mundo, quienes no aprobarán tal calificativo (solo por el hecho de que has optado por escribir con mayúscula). De cualquier manera, la catarsis a mí me ha servido como forma de aceptar la tregua. Hay mucha pasión en tu poema. Me ha gustado.

Un abrazo grande.
Óscar

Óscar Distéfano escribió: ↑Vie, 12 Ago 2022 12:50 Un poema conceptual, filosófico, que plantea la inexorable derrota del hombre ante el misterio de su propia vida. Entiendo que el poeta debe tomar riesgos para expresar sus sentimientos; pero pienso que el remate es un poco fuerte, sin necesidad, ya que existe lo que se llama la «veneración» y la «fe», convicciones que determinan los sentimientos de millones de personas en el mundo, quienes no aprobarán tal calificativo (solo por el hecho de que has optado por escribir con mayúscula). De cualquier manera, la catarsis a mí me ha servido como forma de aceptar la tregua. Hay mucha pasión en tu poema. Me ha gustado.

Un abrazo grande.
Óscar

Derrota ninguna, Óscar.
Es un poema ambiguo y existencial, que lleva el pensamiento al límite, pero no la vida.
No hay tregua en el poema, porque no hay guerra, sino sentimiento.
Está bien que te haya gustado, aunque creo que no has captado el sarcasmo.

Abrazos y felicidad.

Simon Abadia escribió: ↑Vie, 12 Ago 2022 9:46 Todos son planos convergentes aunque no cueste verlo. Al fin, somos poca cosa
cuando nuestra meta es morir y más si nos cuesta creer.
Buen poema, Ricardo, que he disfrutado. Volveré.
Abrazos

Gracias Simón.
Nos veremos si eso.