Editorial Alaire

Tu poema sobre el absurdo existencial me hace recordar la lectura del mito de Sísifo que tan bien analizó Camús. Solo tenemos una vida y al final pesan y mucho los errores. Me gustó el poema por su ritmo y por la visión tan humana que encierra. Un abrazo.

Ramón Carballal escribió: ↑Lun, 04 Jul 2022 21:03 Tu poema sobre el absurdo existencial me hace recordar la lectura del mito de Sísifo que tan bien analizó Camús. Solo tenemos una vida y al final pesan y mucho los errores. Me gustó el poema por su ritmo y por la visión tan humana que encierra. Un abrazo.

Creo que existen tres formas de afrontar la vida.

1. Dejarte llevar por la corriente mayorítaria, sin cuestionarte absolutamente nada. Luego de forma imbécil.

2. Ser consciente de lo que hacemos y sus consecuencias. Luego de forma consciente. Eso supone la amargura, porque lo que hacemos y dónde terminaremos sin excepción, no es nada alentador.

3. Con humor y desde lo absurdo.

Personalmente, elijo la tercera opción, quizás por supervivencia y no terminar demente.

Gracias por tu lectura.
Abrazos.

La naturaleza rebrota en la existencia y no se queja. El humano diferenciado tan solo en los talentos nos hacemos
en lo absurdo y en lo corto delante de un finiquito que no nos da tregua.
Tu hermoso poema me hace revivir la Filosofía que en su día estudié. Así que gracias.
Abrazos.

En nuestra mano está cargar con nuestro premio o hacer con el una pira para amenizar el baile. Interesante y bien escrita esta reflexión existencial.
Un abrazo.
Pepa

Simon Abadia escribió: ↑Vie, 08 Jul 2022 9:19 La naturaleza rebrota en la existencia y no se queja. El humano diferenciado tan solo en los talentos nos hacemos
en lo absurdo y en lo corto delante de un finiquito que no nos da tregua.
Tu hermoso poema me hace revivir la Filosofía que en su día estudié. Así que gracias.
Abrazos.

Gracias a ti por tu lectura y tu reflexión.
Abrazo.

Josefa A. Sánchez escribió: ↑Lun, 11 Jul 2022 2:17 En nuestra mano está cargar con nuestro premio o hacer con el una pira para amenizar el baile. Interesante y bien escrita esta reflexión existencial.
Un abrazo.
Pepa

Cierto, hay cosas que no está en nuestra mano, luego no tiene sentido ni pensar en ello. Es en donde sí podemos hacer en donde debemos poner el foco de atención.
Gracias por tu lectura, Pepa.
Abrazo.

Ana Estepa escribió: ↑Lun, 04 Jul 2022 7:53

A veces los odio,
otras en cambio
me produce ternura observar
como cargan con lo que les tocó por sorteo,
y que llevan con orgullo bajo el brazo
como un tesoro sorpresa,
aparentemente cuerdos
con la mirada cargada
de un futuro improbable.
Sin saber dónde está la meta,
y con la convicción ilusa de hacer lo correcto.

Luego, a mitad de camino
la piel se agrieta y el cuerpo se encorva
en una reverencia hacia la tierra,
con zapatos encharcados
de lágrimas perennes.

Y al final, en un sin sentido,
al borde de la vida
cuando ya no hay tiempo
para enmendar errores,
dicen adiós
de forma absurda.

Siempre me ha gustado lo directa que eres Ana, eres clara y precisa. Y a veces duele la franqueza.
Te lo digo así porque te pareces a mi hija en la personalidad.
Aunque todos somos diferente convergemos en algún punto. Abrazos.

Me ha gustado este absurdo existencial. Comparto tu decir.
Abrazos

Mirta Elena Tessio escribió: ↑Lun, 11 Jul 2022 6:57

Ana Estepa escribió: ↑Lun, 04 Jul 2022 7:53

A veces los odio,
otras en cambio
me produce ternura observar
como cargan con lo que les tocó por sorteo,
y que llevan con orgullo bajo el brazo
como un tesoro sorpresa,
aparentemente cuerdos
con la mirada cargada
de un futuro improbable.
Sin saber dónde está la meta,
y con la convicción ilusa de hacer lo correcto.

Luego, a mitad de camino
la piel se agrieta y el cuerpo se encorva
en una reverencia hacia la tierra,
con zapatos encharcados
de lágrimas perennes.

Y al final, en un sin sentido,
al borde de la vida
cuando ya no hay tiempo
para enmendar errores,
dicen adiós
de forma absurda.

Siempre me ha gustado lo directa que eres Ana, eres clara y precisa. Y a veces duele la franqueza.
Te lo digo así porque te pareces a mi hija en la personalidad.
Aunque todos somos diferente convergemos en algún punto. Abrazos.

Muchas gracias por tu lectura y tus palabras, Mirta.
Un abrazo.