Editorial Alaire

1

A veces me pregunto
si en la oscuridad de lo que existe
la belleza puede emerger
y exorcizar la vida con su luz.

2

Paso a paso me vuelvo una crisálida
y contemplo en el cielo
la pareidolia de las nubes.

3

No deseo bajar
a las profundidades de lo denso,
porque en la barbarie me falta el aire limpio
para respirar sin artilugios.

4

Una palabra negra
puede matar el alma de los ciervos.

5

Una sílaba suave, oceánica,
puede sanar en el silencio
el árbol genealógico del mundo.

6

Las letras extraviadas
yacen en submarinos de los sueños,
esperando que todo resurja
más allá de los límites del vértigo.

7
Hay vocablos que duermen en quietud,
porque allí resucitan y salen de las tumbas
sin doblar los espejos del delirio.


Ana Muela Sopeña

"Hay vocabloes que duermen en quietud,
porque allí resucitan y salen de las tumbas
sin doblar los espejos del delirio."

Todos los mirlos son hermosos y dicentes, pero el séptimo me ha parecido espectacular. Me gusta mucho como escribes.

Mi aplauso.

Un abrazo enorme.

Muchas gracias, Ramón:

Es un lujo tenerte como lector

Un beso enorme
Ana

Me gustan todos, Ana.

Estas en un momento de creatividad excelente y me alegro de que lo compartas con todos.
Felicidades y un abrazo

Coincido con Marisa. Aprovecha este momento que las musas están contigo.
El cuarto mirlo me ha llegado y tocado la fibra. León Felipe, decía que las palabras eran ladrillos y Cortázar no se quedaba corto. Las bautizó como Perras Negras. El alma de un ciervo tiene que ser blanca, así que no me extraña tu mirlo.
Una buena sucesión de palabras.
Te felicito.
Un fuerte, fuerte abrazo.

Muchas gracias, Marisa, por tus palabras tan efusivas.

Un fuerte abrazo, amiga
Ana

Es una maravilla, me ha encantado de principio a fin. Qué bien describes el inmenso poder que tienen las palabras. Te felicito, Ana, en verdad tienen razón los compañeros, las musas están contigo. Ahí tienes mi voto

Qué agradable tomar el primer café del día, leyendo estos poemas, que son como chispitas de luz.
Gracias por traerlos.

No sabría cuál elegir, todos son muy bellos, profundos e impactantes. Abrazos.

Me encanta, Ana, que estos mirlos te hayan gustado:

Las palabras tienen mucho poder, sí. Pueden dañar o pueden sanar. Pueden matar o pueden dar vida.

Un beso enorme
Ana