Editorial Alaire

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Intenso, hermoso y muy sentido, querido poeta.

Se te echaba de menos por aquí.
Gracias por compartir.

Salud y felicidad.

Què buen lenguaje en este poema de intenso fulgor, Rafael:

Nos deslumbras con tu forma de decir.

Un abrazo

Felicitaciones
Ana

Muy buen poema, Rafael. Se nota maestría en el decir. Un abrazo y salud.

Hallie gracias por pasarte por el poema y dejar tus palabras

saludos

rafael

Pletórica de imágenes decanta la emoción querido amigo...
Un gusto leerte...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

Un gusto pasar por tu poesía, Rafael. Aun aquellos versos cargados de melancolía se nota tu talento para escribir con el corazón en la mano.

Saludos afectuosos

Javier

Rafael Valdemar escribió: ↑Lun, 16 May 2022 23:49
Ahora que puedo vencer al desaliento
y regresan las mareas que describen el pasado
sobre renglones de mi vieja arquitectura,
me sumerjo en este oceánico acontecer
que desagua sombra y luz y adornan mi diario.
Y recibo al sol alzando su fulgor en mis pupilas,
pero aturdido el deseo reclama su fracción
de carne libertina, tan solo podré entregarle
este cuerpo lacio y ungido de abstinencia
y con la fiebre apagada como único testigo.

Igual que un eclipse de luna que diseña
el filo de su guadaña de barro, el amanecer
castrado se despierta, las horas se vacían,
y nunca llegan los prodigios al centro del milagro.
Aún así, abrazo la anatomía de la tierra
donde crecen promesas incumplidas
y el tiempo parece detenerse porque nosotros
únicamente somos un instante indefinible
que muestra la certidumbre de una duda.

Derrotado por un pulso de espejismo
he venido hasta aquí a velar mi decepción
y el universo gira como si fuera viento huracanado.
A la hora del poniente las máscaras se agitan,
el alma se desnuda y de mentiras se cubre.
Presiento que la noche dibuja filigranas
en el aire y bautizo una a una las estrellas,
las llamaré utopía, y brindaré inmensurable
por aquellos que dejaron los sueños inconclusos
custodiados al amparo de un suicida.

Un poema profundo y luminoso. e felicito por estas reflexiones hechas Arte. Abrazos, Rafael.

Ana gracias por pasarte por el poema y dejar tus palabras

saludos

rafael

Ramón gracias por pasarte por el poema y dejar tus palabras

saludos

rafael

Un placer venir y disfrutar de tu poesía, Rafael.

Felicidades y un abrazo.

Rafael Valdemar escribió: ↑Lun, 16 May 2022 23:49
Ahora que puedo vencer al desaliento
y regresan las mareas que describen el pasado
sobre renglones de mi vieja arquitectura,
me sumerjo en este oceánico acontecer
que desagua sombra y luz y adornan mi diario.
Y recibo al sol alzando su fulgor en mis pupilas,
pero aturdido el deseo reclama su fracción
de carne libertina, tan solo podré entregarle
este cuerpo lacio y ungido de abstinencia
y con la fiebre apagada como único testigo.

Igual que un eclipse de luna que diseña
el filo de su guadaña de barro, el amanecer
castrado se despierta, las horas se vacían,
y nunca llegan los prodigios al centro del milagro.
Aún así, abrazo la anatomía de la tierra
donde crecen promesas incumplidas
y el tiempo parece detenerse porque nosotros
únicamente somos un instante indefinible
que muestra la certidumbre de una duda.

Derrotado por un pulso de espejismo
he venido hasta aquí a velar mi decepción
y el universo gira como si fuera viento huracanado.
A la hora del poniente las máscaras se agitan,
el alma se desnuda y de mentiras se cubre.
Presiento que la noche dibuja filigranas
en el aire y bautizo una a una las estrellas,
las llamaré utopía, y brindaré inmensurable
por aquellos que dejaron los sueños inconclusos
custodiados al amparo de un suicida.

Me impresiona ese salto casi cuántico en tu obra.
Felizmente puedo leerte .
Se nota la nostalgia que imprimiste en el poema.

Es verdad que a la hora del poniente, será el atardecer
el alma se desnjuda, nos quedamos indefensos.
Te felicito Rafael ha crecido tu pluma, y el poeta que eres
sale a la luz.
Un fuerte abrazo.

Buen escrito, Rafael.

Me ha gustado.

Un abrazo.

Rafael Valdemar escribió: ↑Lun, 16 May 2022 23:49
Ahora que puedo vencer al desaliento
y regresan las mareas que describen el pasado
sobre renglones de mi vieja arquitectura,
me sumerjo en este oceánico acontecer
que desagua sombra y luz y adornan mi diario.
Y recibo al sol alzando su fulgor en mis pupilas,
pero aturdido el deseo reclama su fracción
de carne libertina, tan solo podré entregarle
este cuerpo lacio y ungido de abstinencia
y con la fiebre apagada como único testigo.

Igual que un eclipse de luna que diseña
el filo de su guadaña de barro, el amanecer
castrado se despierta, las horas se vacían,
y nunca llegan los prodigios al centro del milagro.
Aún así, abrazo la anatomía de la tierra
donde crecen promesas incumplidas
y el tiempo parece detenerse porque nosotros
únicamente somos un instante indefinible
que muestra la certidumbre de una duda.

Derrotado por un pulso de espejismo
he venido hasta aquí a velar mi decepción
y el universo gira como si fuera viento huracanado.
A la hora del poniente las máscaras se agitan,
el alma se desnuda y de mentiras se cubre.
Presiento que la noche dibuja filigranas
en el aire y bautizo una a una las estrellas,
las llamaré utopía, y brindaré inmensurable
por aquellos que dejaron los sueños inconclusos
custodiados al amparo de un suicida.

Es un poema para leerlo detenidamente. Observo en él cierto aire de amargura y senectud, como si la vida hubiese ya pasado. El alma se desnuda..., nosotros los poetas nos desnudamos en cada poema que escribimos. Un abrazo, amigo malagueño. Paco

lunamar gracias por pasarte por el poema y dejar tus palabras

saludos

rafael