Tres formulaciones del amor (Serie Mirlos)

[Pablo Sales]

I

Dejad que duerman.
Incluso el dios calla
y respeta ese sueño que da vida.
Se han amado. Se aman
y ahora duermen.
Los amantes,
solos en su exactitud, gravitan
en la nube infinita de universo
que los acoge, junto con todos
sus imaginados mundos.
Por ese único instante,
hasta la muerte puede esperar
toda una eternidad.


II

Tu en mí.
Yo, en cualquier verso,
y los dos hechos luz en el principio.

Claridad de hielo y bosque quieto,
de arena y seda antigua
y aún de sueño limpio e infantil.

Todo he de ser por ti
pues que me naces
y así para siempre.
Este universo primero
y propio, no contiene ni olvido
en el tiempo ni soledad
en la muerte.


III

Si el alma me abandona
cualquier noche, que vuele
hasta tus sueños.
Y si la muerte prefiere
la luz de la mañana,
que sea hacia tu sonrisa
donde entonces vaya.

[Ramón Carballal]

Interesantes mirlos, me gustó especialmente el II. Un abrazo.

[Pablo Sales]

Gracias Ramón. Celebro que hayan sido de tu agrado.

[Pilar Morte]

Preciosos los tres, me gustaron y los disfruté.
Abrazos

[Ramón Castro Méndez]

Precioso tríptico que recoge unos muy logrados, amén de hermosos, versos.
Todo un placer de lectura, Pablo.
Mi felicitación.

Un fuerte abrazo.

[Pablo Sales]

Muy agradecido por vuestra atención, Pilar, Ramón. Celebro que os hayan gustado estas "formulaciones".

[Ana Muela Sopeña]

Excepcionales, versos, Pablo:

La delicadeza de todos ellos llena el alma de sentimientos nobles.

Aplausos... muchos
Un abrazo
Ana

[Pablo Sales]

Muchas gracias Ana. pienso que debe ser un fin de la poesía llenar el alma de imágenes que nos hagan mejores.

[E. R. Aristy]

I

Dejad que duerman.
Incluso el dios calla
y respeta ese sueño que da vida.
Se han amado. Se aman
y ahora duermen.
Los amantes,
solos en su exactitud, gravitan
en la nube infinita de universo
que los acoge, junto con todos
sus imaginados mundos.
Por ese único instante,
hasta la muerte puede esperar
toda una eternidad.


II

Tu en mí.
Yo, en cualquier verso,
y los dos hechos luz en el principio.

Claridad de hielo y bosque quieto,
de arena y seda antigua
y aún de sueño limpio e infantil.

Todo he de ser por ti
pues que me naces
y así para siempre.
Este universo primero
y propio, no contiene ni olvido
en el tiempo ni soledad
en la muerte.


III

Si el alma me abandona
cualquier noche, que vuele
hasta tus sueños.
Y si la muerte prefiere
la luz de la mañana,
que sea hacia tu sonrisa
donde entonces vaya.

Bellos mirlos al amor, Pablo, todo un placer de lectura. Abrazos.

[Rafel Calle]

Bello e interesantes mirlos, amigo Pablo.
Felicidades.
Abrazos.

[Julio Gonzalez Alonso]

Tres hermosas composiciones para la colección de mirlos, de vocabulario escogido y suave eufonía; tal vez, la segunda propuesta se me antoja más bella en este conjunto. Abrazo y salud, Pablo.

[Pablo Sales]

Gracias Rafael. Tanto a ti como a Julio os agradezco vuestra opinión sobre este Mirlo en el que intenté que primara sobre todo la delicadeza, hablado de lo que habla.