Editorial Alaire

Ana García escribió: ↑Vie, 18 Feb 2022 21:55

Demasiada tragedia e ignominia;
de que los arrabales de la noche
confundan el orificio animal
con el sudor que emanan los lupanares.
Animal Planet: Margot
De Xta Corpus Xti

Mirarle fijamente era como asomarse
a una copa de ginebra Bombay.
Sus ojos eran líquidos,
—de un azul transparente—
aderezados con unas gotas de astigmatismo
que emborronaban la realidad.
Ella tenía el pelo rubio
Y unos ojos oscuros,
—casi negros—.
Aromática e intensa
como una buena cerveza irlandesa.
Cuando se encontraron
en la barra de aquel bar,
se miraron sedientos.
Al caer la madrugada
se bebieron con ansia
en unos pocos tragos,
reinventándose,
un explosivo combinado.

Cuando el mundo se estremecía,
Rusia penetrando en Ucrania,
ellos estaban entrelazados,
acabando con el grueso de
su sexo tántrico,
en un clásico combate
cuerpo a cuerpo.
Para cuando Ucrania
inició su operación libertaria,
El territorio de ellos
estaba desolado.
Olía a pólvora quemada.
fue una relación breve;
recordada,
en fechas conmemorativas,
cuando el cuerpo pide guerra.

Cada cierto tiempo las casualidades venían enmarcadas por unas llamas inquietantes que anuncian su presencia. Había que estar lista si querías identificarlas en todo su esplendor. Alguna vez ocurrió que comencé a sentirlas cuando no eran más que cisco humeante, negro, con gloriosos pedazos de un naranja incandescente. Entonces se te queda dentro una especie de vacío lleno de lo que nunca será.
Pero ahora, hoy, de pronto, mis tripas están sintiendo de nuevo ese remusguillo del fuego que quiere crecer, que desearía convertirse en algo grande.
El fuego sueña con inundarlo todo, todo. Me refiero a mí y a la diagonal que trazan mis ojos cuando le miro. Ahora solo tengo que lanzar mis cerillas y cruzar los dedos para que no acaben en el fondo del mar.

Armilo Brotón escribió: ↑Vie, 18 Feb 2022 23:30 Tú para Rusia y yo para el sur, el firmamento cubre todas las tierras, incluso la Media.
La lucha de cuerpos en al amor es tierra quemada que el caballo de Atila pasea embravecido.
Queda en la boca un sabor de tierra quemada y sangre.

Fantástico y vigoroso poema gitana,
el cielo te siga dando ganas.

Un besazo

Ramón Castro Méndez escribió: ↑Sab, 19 Feb 2022 14:49 Muy bueno, Ana, este vis a vis, este tour de force... parece que la cosa quedó en empate. Bueno, pierde el que más recuerde el fugaz encuentro.

Abrazos.

Pilar Morte escribió: ↑Sab, 19 Feb 2022 19:27 Un poema erótico hermoso y bien llevado. Este dueto da mucho de sí. Un placer leerte.
Abrazos

xaime oroza carballo escribió: ↑Dom, 20 Feb 2022 1:54

Ana García escribió: ↑Vie, 18 Feb 2022 21:55

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Encomiable encuentro del que todos, paladeándolo, estamos disfrutando.
Parafraseando a Ramón Castro: "Sodes a ostia!!"

Un "bico" para os dous, repartid!, como bien podáis o los dioses os den a entender.

Muchas gracias por tu atenta lectura, Xaime. Un placer tenerte en mi rincón.
Quien reparte se queda con la mejor parte, así que el bico (me gusta ese palabro) me lo quedo yo.
Y yo te doy un montón de ellos.

Hallie Hernández Alfaro escribió: ↑Dom, 20 Feb 2022 11:42 .






Me ha gustado muchísimo el temblor inteligente, apasionado y llegador de estos versos.

El final se lleva la vida entre los dientes...

Abrazo grande y felicitaciones, querida Ana.

Rafel Calle escribió: ↑Mié, 23 Feb 2022 8:36 Arriba con este bello e interesante trabajo, amiga Ana.
Felicidades.
Abrazos.

Ana García escribió: ↑Vie, 18 Feb 2022 21:55

Demasiada tragedia e ignominia;
de que los arrabales de la noche
confundan el orificio animal
con el sudor que emanan los lupanares.
Animal Planet: Margot
De Xta Corpus Xti

Mirarle fijamente era como asomarse
a una copa de ginebra Bombay.
Sus ojos eran líquidos,
—de un azul transparente—
aderezados con unas gotas de astigmatismo
que emborronaban la realidad.
Ella tenía el pelo rubio
Y unos ojos oscuros,
—casi negros—.
Aromática e intensa
como una buena cerveza irlandesa.
Cuando se encontraron
en la barra de aquel bar,
se miraron sedientos.
Al caer la madrugada
se bebieron con ansia
en unos pocos tragos,
reinventándose,
un explosivo combinado.

Cuando el mundo se estremecía,
Rusia penetrando en Ucrania,
ellos estaban entrelazados,
acabando con el grueso de
su sexo tántrico,
en un clásico combate
cuerpo a cuerpo.
Para cuando Ucrania
inició su operación libertaria,
El territorio de ellos
estaba desolado.
Olía a pólvora quemada.
fue una relación breve;
recordada,
en fechas conmemorativas,
cuando el cuerpo pide guerra.

Cada cierto tiempo las casualidades venían enmarcadas por unas llamas inquietantes que anuncian su presencia. Había que estar lista si querías identificarlas en todo su esplendor. Alguna vez ocurrió que comencé a sentirlas cuando no eran más que cisco humeante, negro, con gloriosos pedazos de un naranja incandescente. Entonces se te queda dentro una especie de vacío lleno de lo que nunca será.
Pero ahora, hoy, de pronto, mis tripas están sintiendo de nuevo ese remusguillo del fuego que quiere crecer, que desearía convertirse en algo grande.
El fuego sueña con inundarlo todo, todo. Me refiero a mí y a la diagonal que trazan mis ojos cuando le miro. Ahora solo tengo que lanzar mis cerillas y cruzar los dedos para que no acaben en el fondo del mar.