Editorial Alaire

Ramón Castro Méndez escribió: ↑Mar, 04 Ene 2022 0:29 De todo lo visible y lo invisible,
de aquella otra mitad del cielo y sus confines,
de la enferma palidez de los cometas,
de la edad de la inocencia de los astros,
de todo lo que es humo y espejos
vestí mi desnudez y tracé el paisaje cercano.
Aún resta que el silencio se pronuncie,
que las opacas voces tañan a bronce en los cielos.
Más allá del crepúsculo no vuelan los pájaros,
se deshacen sus alas en trigales breves.
En mi memoria el aroma de la lluvia,
el volatín de sus balcones y tejados.

De todo lo soñado que ahora es nada,
de las vidas que vivimos como extraños,
del olvido y las ausencias que aún nos hieren,
latía mi corazón aquellos días
como isócrono reloj de angostas latitudes,
y aventaba de mi boca la ceniza.
Moría como un pájaro en tu mano,
palpándome la herida y hurgando en tu regreso.
Sentíame océano distante apenas respirando junto a ti.
Corría la sangre y pasaban lentas las aguas,
y el tiempo parecía descuidadamente dormido.
Insomne cuando la noche me ahoga.

xaime oroza carballo escribió: ↑Mar, 04 Ene 2022 1:12

Ramón Castro Méndez escribió: ↑Mar, 04 Ene 2022 0:29 De todo lo visible y lo invisible,
de aquella otra mitad del cielo y sus confines,
de la enferma palidez de los cometas,
de la edad de la inocencia de los astros,
de todo lo que es humo y espejos
vestí mi desnudez y tracé el paisaje cercano.
Aún resta que el silencio se pronuncie,
que las opacas voces tañan a bronce en los cielos.
Más allá del crepúsculo no vuelan los pájaros,
se deshacen sus alas en trigales breves.
En mi memoria el aroma de la lluvia,
el volatín de sus balcones y tejados.

De todo lo soñado que ahora es nada,
de las vidas que vivimos como extraños,
del olvido y las ausencias que aún nos hieren,
latía mi corazón aquellos días
como isócrono reloj de angostas latitudes,
y aventaba de mi boca la ceniza.
Moría como un pájaro en tu mano,
palpándome la herida y hurgando en tu regreso.
Sentíame océano distante apenas respirando junto a ti.
Corría la sangre y pasaban lentas las aguas,
y el tiempo parecía descuidadamente dormido.
Insomne cuando la noche me ahoga.

De todo lo visible y lo soñado van saliendo sin llamar los recuerdos a la mar, al océano, y escribimos insomnes cuando la noche ahoga.
Gracias Ramón un placer de lectura, compañero.

Fonda aperta, amigo mío.

Javier Dicenzo escribió: ↑Mar, 04 Ene 2022 1:38 Interesante y concreto trabajo, un placer, donde los valores importan.

Pilar Morte escribió: ↑Mar, 04 Ene 2022 9:14 Lo vivido, las ausencias, los recuerdos; todo construye un precioso poema donde se palpa el sentimiento. Me gustó leerte y lo disfruté.
Abrazos

Marisa Peral escribió: ↑Mar, 04 Ene 2022 10:02 No hay un verso que sobre ni otro que falte en esta obra visible y soñada.
Me gusta este poema lleno de aciertos líricos y de sensibilidad.
Te felicito, amigo Ramón.
Un fuerte abrazo.

J. J. Martínez Ferreiro escribió: ↑Mar, 04 Ene 2022 10:51 Poemazo, Ramón. Intensidad a raudales y poderoso y evocador lenguaje poético.

Se ve que la interacción con el gran Armilo ha sido fructífera en ambos sentidos. Esperemos al de Orihuela a ver que nos cuenta.

Todo un placer de lectura, querido amigo.

Abrazos y feliciano.

Ricardo López Castro escribió: ↑Mar, 04 Ene 2022 15:44 Me han gustado mucho estos versos, son todo un hallazgo:
De todo lo soñado que ahora es nada,
de las vidas que vivimos como extraños...

Está subiendo como la espuma tu estilo, cada vez más limpio y depurado.
Me encantan tus creaciones.
Abrazos y feliz 2022, amigo mío.

Ramón Carballal escribió: ↑Mié, 05 Ene 2022 12:18 Muy bello y evocador poema. Me ha encantado leerlo. Un abrazo.