Editorial Alaire

Una hermosa e interesante introspección, amigo Ricardo, que se debate en la búsqueda del yo y su reflejo tremendamente dicotómico.
Feliz Año Nuevo y mucha salud.
Abrazos.

Amigo Rafel, gracias por compartir tus impresiones sobre este trabajo.
Me alegra mucho que te haya parecido interesante y hermoso.
Feliz año para ti y los tuyos.
Abrazos y felicidad.

Ahondas y ahondas en el yo y la vida, tan complejo todo, y lo haces con versos dicentes y hermosos. Me haces pensar. Un placer leerte.
Abrazos

Me ha gustado mucho este poema de dudas, de ubicaciones, de buscar el lugar al que uno pertenece. Profundo e introspectivo.
Un fuerte abrazo y feliz 2022.

Ricardo López Castro escribió: ↑Mar, 28 Dic 2021 14:57

Calcetines roidos por la abulia,
resoles que se estancan en el cielo,
una atmósfera insomne a la vez que noctámbula,
lo tácito del verbo unido con la carne.

La espina que me cala, el orden y la lógica,
que por cada pregunta se lucran de la mente,
como hacen los desiertos, o las cuevas,
con reverberaciones.

Cada vez que desisto de mis aspiraciones,
me cuestiono si llegan hasta el hueso,
me lo cuestiono todo, y vacío, parece
que tiene más sentido lo que es descabellado.

Luego, la incertidumbre se engalana,
para dejarme a solas,
ah, que infame resulta fulminar las teorías
que me traen espejismos.
Cuánto duele la vida.
Son mis cinco sentidos.
Es la apocatástasis frente a la duermevela,
la que matiza rojos y turquesas, son cielos
los que se buscan. Ciclos de transición opaca.

El origen no pende de la historia.
Es un secreto, va de oído en oído
en silencio o con voces de ultratumba.

Y respondo por todas mis palabras,
aunque sean profundas,
pues siguen siendo propias,
y mi cuerpo resiste,
pero mi alma despista.

Mi sangre sirve al fuego,
lo doma y lo acaricia,
antes de descansarlo.

La extinción siempre va ligada a lo prohibido. Mi tozudez...
Está penada en todas partes.

No...
Hay interferencias...
Ni otro ser más recóndito...
Lo que yo soy...
Lo sabe todo el mundo menos yo.

Pero...
Me adoctrino en la ciencia más exacta...
Nada tiene que ver con la desidia...
Es dinámica, inmóvil...
Somos dos...
Más fuertes que mi opuesto.

Soy ése que se alía con su peor enemigo.
A veces la existencia no es la realidad.
Quiero replantearme ciertas cosas...
Todas tienen pareja y están a rebosar...
Se me hace imposible cambiar de parecer...
En verdad ya he optado...
Por mi propia opinión...
No recuperaré...
El buen juicio...
Y tampoco lo quiero...
Lo que escondo...
Es el resto de esta división...
Unos buscan a Dios...
Otros se le insinúan...
En qué punto estoy yo...
Por más que me analizo...
No encajo ni con Dios, ni con el hombre.

Qué fuerte Ricardo y es un buen día para sacar todo afuera,
dejar fluir, lo que te oprime.

Amiga Pilar, gracias por la atención dedicada a estos versos.
Quizá, no debería autoanalizarme tanto, como bien dice Mirta, pero supongo que va por rachas..Gracias miles por estar.
Abrazos y felicidad, amiga poetisa.
Feliz año para ti y los tuyos.

Gracias miles amigo Ramón.
Me alegra mucho verte por aquí.
La poesía nos une y condiciona más de lo que podemos pensar, a veces.
Abrazos y felicidad.
Próspero año para ti y los tuyos, éste que ya entra.

Gracias por todo, Mirta.
Intentaré tomar tu consejo.
Feliz año, amiga poetisa, para ti y los tuyos.
Abrazos y felicidad.

Ricardo López Castro escribió: ↑Mar, 28 Dic 2021 14:57

Calcetines roidos por la abulia,
resoles que se estancan en el cielo,
una atmósfera insomne a la vez que noctámbula,
lo tácito del verbo unido con la carne.

La espina que me cala, el orden y la lógica,
que por cada pregunta se lucran de la mente,
como hacen los desiertos, o las cuevas,
con reverberaciones.

Cada vez que desisto de mis aspiraciones,
me cuestiono si llegan hasta el hueso,
me lo cuestiono todo, y vacío, parece
que tiene más sentido lo que es descabellado.

Luego, la incertidumbre se engalana,
para dejarme a solas,
ah, que infame resulta fulminar las teorías
que me traen espejismos.
Cuánto duele la vida.
Son mis cinco sentidos.
Es la apocatástasis frente a la duermevela,
la que matiza rojos y turquesas, son cielos
los que se buscan. Ciclos de transición opaca.

El origen no pende de la historia.
Es un secreto, va de oído en oído
en silencio o con voces de ultratumba.

Y respondo por todas mis palabras,
aunque sean profundas,
pues siguen siendo propias,
y mi cuerpo resiste,
pero mi alma despista.

Mi sangre sirve al fuego,
lo doma y lo acaricia,
antes de descansarlo.

La extinción siempre va ligada a lo prohibido. Mi tozudez...
Está penada en todas partes.

No...
Hay interferencias...
Ni otro ser más recóndito...
Lo que yo soy...
Lo sabe todo el mundo menos yo.

Pero...
Me adoctrino en la ciencia más exacta...
Nada tiene que ver con la desidia...
Es dinámica, inmóvil...
Somos dos...
Más fuertes que mi opuesto.

Soy ése que se alía con su peor enemigo.
A veces la existencia no es la realidad.
Quiero replantearme ciertas cosas...
Todas tienen pareja y están a rebosar...
Se me hace imposible cambiar de parecer...
En verdad ya he optado...
Por mi propia opinión...
No recuperaré...
El buen juicio...
Y tampoco lo quiero...
Lo que escondo...
Es el resto de esta división...
Unos buscan a Dios...
Otros se le insinúan...
En qué punto estoy yo...
Por más que me analizo...
No encajo ni con Dios, ni con el hombre.

Conozco bien esas situaciones incómodas. Tu poesía es vital, vuelvo a decirlo. No tenemos que tener todas las respuestas, ellas van cambiando y olvidándose día a día...ahora lo que hay que cultivar es la sinceridad y la poesía, y ya son tuyas, Ricardo López Castro. Un abrazo grande y feliz 2022, bella mente.

Muchas gracias, amiga ERA.
Por tus palabras para este trabajo y para mi persona.
Es un lujo tenerte de compañera.
Abrazos y felicidad, estimada poetisa.

Muy bueno y con una profundidad que nos toca con belleza y fuerza a partes iguales.

Abrazo y felicitaciones, querido Ricardo.

Apreciado amigo.
Otro gran poema con una profunda introspección, se hace patente en los altibajos de la vida,
que lograr la lógica y la cordura, es tarea difícil, en estos tiempos de crisis.
Me quedo con esto "y mi cuerpo resiste pero mi alma despista", porque eso me ocurre a mí.
De nuevo te felicito.

Muchas gracias amiga Anita.
Me alegra saber que te haya parecido así este trabajo.
Abrazos y feliz 2022.

Gran trabajo, con varios matices, filosóficos e intelectuales.