Editorial Alaire

Ricardo López Castro escribió: ↑Vie, 15 Oct 2021 14:01

En tu pelo rizado, un vaivén de cristal
-Suma de realidades.-,
en la noche más alta, nuestra luna,
cortante como chispas de una hoguera,
como un bloque de fuego.

No se puede paralizar el mundo,
me divido en creencias,
sin confiar en ellas,
me reparto en palabras que no buscan debate,
como el aire,
no me caso con bocas,
lo que escondo es vacío,
Me guardo una pregunta tan solo para mí.

No reflejo emociones, me guió por impulsos
tu pensamiento ripio.
Elucubro, no rumio, me juzgo y no sentencio.
Lo que me dicen genera indiferencia.

No necesito gestos que otros sí.
También llevo un peluche bajo el brazo.
Ese niño que puebla mi cabeza,
supone, no concluye.
Quiere modificar siempre la lógica.

No salgo de mis tesis.
Tampoco de mi asombro, parecido a mi aspecto.
Mi expresión es la misma desde que tengo uso de memoria.
Pero eso ya forma parte de mi pasado.
Volver sobre mis pasos es como enamorarse
para luego mudar de piel, y de apariencia,
de fantasmas, y luego de futuro.

Has logrado un poema enorme, capital, de esos que lleva una vida entera soñarlo.

Ovación cerrada, sin admitir el más mínimo descanso de las palmas.

Abrazo, querido compañero.

Ricardo López Castro escribió: ↑Vie, 15 Oct 2021 14:01

En tu pelo rizado, un vaivén de cristal
-Suma de realidades.-,
en la noche más alta, nuestra luna,
cortante como chispas de una hoguera,
como un bloque de fuego.

No se puede paralizar el mundo,
me divido en creencias,
sin confiar en ellas,
me reparto en palabras que no buscan debate,
como el aire,
no me caso con bocas,
lo que escondo es vacío,
Me guardo una pregunta tan solo para mí.

No reflejo emociones, me guió por impulsos
tu pensamiento, así como tus ripios.
Elucubro, no rumio, me juzgo y no sentencio.
Lo que me dicen genera indiferencia.

No necesito gestos que otros sí.
También llevo un peluche bajo el brazo.
Ese niño que puebla mi cabeza,
supone, no concluye.
Quiere modificar siempre la lógica.

No salgo de mis tesis.
Tampoco de mi asombro, parecido a mi aspecto.
Mi expresión es la misma desde que tengo uso de memoria.
Pero eso ya forma parte de mi pasado.
Volver sobre mis pasos es como enamorarse
para luego mudar de piel, y de apariencia,
de fantasmas, y luego de futuro.

Íntima sinceridad que cala hondo y promete nuevos vuelos con las alas de la serpiente emplumada y las anclas a la garra por la arena de la playa que hay debajo del mar. Ahí me has llevado, compañero. Gracias.
Un abrazo.

Hallie, de verdad que agradezco mucho tu comentario.
Muy halagador, como las veces que muestras el camino, con tu extremada sensibilidad poética.
Gracias por ser como eres.
Abrazos y felicidad, amiga mía.

Hola xaime, y yo encantado de colaborar en tus viajes.
Me alegra mucho que te inspirara.
Se agradece y mucho tu visita, estimado.
Abrazos y felicidad.

Arriba con este trabajo tan bello como interesante, amigo Ricardo.
Felicidades.
Abrazos.

Gracias amigo Rafel!
Abrazos y felicidad.

Tienes versos muy logrados. Tu creatividad no tiene fin.
Abrazos

Gracias amiga Pilar, por tus palabras.
Abrazos y felicidad.