Editorial Alaire

Pilar Morte escribió: ↑Sab, 14 Ago 2021 19:17 Las esferas no nos miran,
siguen su movimiento,
ingrávidas,
desde el punto en que todo se expande.
No necesitan nuestras manos
para manifestar sus formas;
ni la palabra
pues ellas tienen su diccionario
inalcanzable.

La evolución
es cementerio de pruebas.
Tarde comprendí el azar
del movimiento hecho destino.
No me detengo, pero paro,
y ahí es donde quemo
enseres que no necesita el infinito.
Me parece jugar a existir.
Todavía me pinto los ojos,
no he asimilado
la inutilidad de querer ser otra.

Reconozco mi mente,
solo tengo memoria, naturaleza y amor.
Sí, puedo hablar así,
he resistido a las muertes,
y es suficiente.

Dejó de llover.
Salgo,
mis pensamientos precisan oler
la tierra húmeda, compartir vibraciones de la tarde.
Me siento naturaleza, Nara es naturaleza.
y yo soy un rezo
de la maravillosa y sutil
resurrección.


No destaco ningún verso, es un rocío maravilloso de palabras destacando la maestría de una poeta inmensa. Sí, belleza, talento y dulzura, es cierto que brotan a todo placer. Te felicito, querida poeta, Pilar Morte.

Desde la soledad de mi isla, un inmenso abrazo.

José Manuel F. Febles

Lunamar Solano escribió: ↑Dom, 15 Ago 2021 2:28 Qué bello querida amiga!... tus letras comparten sensible profundidad...
Un gusto leerte...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

Pilar Morte escribió: ↑Sab, 14 Ago 2021 19:17 Las esferas no nos miran,
siguen su movimiento,
ingrávidas,
desde el punto en que todo se expande.
No necesitan nuestras manos
para manifestar sus formas,
ni la palabra
pues ellas tienen su diccionario
inalcanzable.

La evolución
es cementerio de pruebas.
Tarde comprendí el azar
del movimiento hecho destino.
No me detengo, pero me paro,
y ahí es donde quemo
enseres que no necesita el infinito.
Me parece jugar a existir.
Todavía me pinto los ojos,
no he asimilado
la inutilidad de querer ser otra.

Reconozco mi mente,
solo tengo memoria, naturaleza y amor.
Sí, puedo hablar así,
he resistido a las muertes,
y es suficiente.

Dejó de llover.
Salgo,
mis pensamientos precisan oler
la tierra húmeda, compartir vibraciones de la tarde.
Me siento naturaleza,
Nara me roza con su hocico húmedo, ella es naturaleza,
y yo soy un rezo
de la maravillosa y sutil
resurrección.

Pilar Morte escribió: ↑Sab, 14 Ago 2021 19:17 Las esferas no nos miran,
siguen su movimiento,
ingrávidas,
desde el punto en que todo se expande.
No necesitan nuestras manos
para manifestar sus formas,
ni la palabra
pues ellas tienen su diccionario
inalcanzable.

La evolución
es cementerio de pruebas.
Tarde comprendí el azar
del movimiento hecho destino.
No me detengo, pero me paro,
y ahí es donde quemo
enseres que no necesita el infinito.
Me parece jugar a existir.
Todavía me pinto los ojos,
no he asimilado
la inutilidad de querer ser otra.

Reconozco mi mente,
solo tengo memoria, naturaleza y amor.
Sí, puedo hablar así,
he resistido a las muertes,
y es suficiente.

Dejó de llover.
Salgo,
mis pensamientos precisan oler
la tierra húmeda, compartir vibraciones de la tarde.
Me siento naturaleza,
Nara me roza con su hocico húmedo, ella es naturaleza,
y yo soy un rezo
de la maravillosa y sutil
resurrección.

Jerónimo Muñoz escribió: ↑Dom, 15 Ago 2021 12:48 Me encanta tu poesía, Pilar.

Tarde comprendí el azar
del movimiento hecho destino.

Todavía me pinto los ojos,
no he asimilado
la inutilidad de querer ser otra.

mis pensamientos precisan oler
la tierra húmeda, compartir vibraciones de la tarde.

¡Cuánto talento y cuánta ternura!

Me encanta leer tus poemas.

Abrazos.

Jerónimo

Pilar Morte escribió: ↑Sab, 14 Ago 2021 19:17 Las esferas no nos miran,
siguen su movimiento,
ingrávidas,
desde el punto en que todo se expande.
No necesitan nuestras manos
para manifestar sus formas,
ni la palabra
pues ellas tienen su diccionario
inalcanzable.

La evolución
es cementerio de pruebas.
Tarde comprendí el azar
del movimiento hecho destino.
No me detengo, pero me paro,
y ahí es donde quemo
enseres que no necesita el infinito.
Me parece jugar a existir.
Todavía me pinto los ojos,
no he asimilado
la inutilidad de querer ser otra.

Reconozco mi mente,
solo tengo memoria, naturaleza y amor.
Sí, puedo hablar así,
he resistido a las muertes,
y es suficiente.

Dejó de llover.
Salgo,
mis pensamientos precisan oler
la tierra húmeda, compartir vibraciones de la tarde.
Me siento naturaleza,
Nara me roza con su hocico húmedo, ella es naturaleza,
y yo soy un rezo
de la maravillosa y sutil
resurrección.

José Manuel F. Febles escribió: ↑Dom, 15 Ago 2021 13:40

Pilar Morte escribió: ↑Sab, 14 Ago 2021 19:17 Las esferas no nos miran,
siguen su movimiento,
ingrávidas,
desde el punto en que todo se expande.
No necesitan nuestras manos
para manifestar sus formas;
ni la palabra
pues ellas tienen su diccionario
inalcanzable.

La evolución
es cementerio de pruebas.
Tarde comprendí el azar
del movimiento hecho destino.
No me detengo, pero paro,
y ahí es donde quemo
enseres que no necesita el infinito.
Me parece jugar a existir.
Todavía me pinto los ojos,
no he asimilado
la inutilidad de querer ser otra.

Reconozco mi mente,
solo tengo memoria, naturaleza y amor.
Sí, puedo hablar así,
he resistido a las muertes,
y es suficiente.

Dejó de llover.
Salgo,
mis pensamientos precisan oler
la tierra húmeda, compartir vibraciones de la tarde.
Me siento naturaleza, Nara es naturaleza.
y yo soy un rezo
de la maravillosa y sutil
resurrección.


No destaco ningún verso, es un rocío maravilloso de palabras destacando la maestría de una poeta inmensa. Sí, belleza, talento y dulzura, es cierto que brotan a todo placer. Te felicito, querida poeta, Pilar Morte.

Desde la soledad de mi isla, un inmenso abrazo.

José Manuel F. Febles

Gracias, querido amigo, por la bondad de tus palabras. Me alegra que te gustara el poema.
Abrazos

Ulises C.J. escribió: ↑Dom, 15 Ago 2021 21:17 Que hermoso Pilar. En verdad llega aroma a tierra húmeda de lluvia.
Pero hoy has llovido tú.
Precioso himno del resurgir.
Un abrazo.