Editorial Alaire

Felina, con amuletos de ágata y hebras de sol -aurora salvaje-
obedeces a tu casta y exhibes el numen de los fieros arroyos.
Habitas en la primigenia hondura de los astros,
la noche es tu acervo de caricias, sifón de heridas anunciadas.


Espectros y zarpas, melodía de ánfora y decenio
muevo mi humana vestidura y usufructo anhelos sobre la yerba suave
raudales de Otelo, plegarias de almizcle;
No puedes salvarte, te envuelve la etología de mis dedos.


Felina y desgarrada -liviana pieza de Dios-
subsistes en el rojo cónclave de los apasionados,
tus ojos desarman el pórtico de las tentaciones
y hechizan el seminal colofón del guerrero.


Hallie

Ingenua cara de la pasión el instinto brilla me sus letras. Con admiración a ellas dejo mi saludo

Bendiciones

Maricruz

Felicidades por este precioso poema que rezuma erotismo en cada verso.
Aplausos muchos
Un abrazo
Pilar

Hermoso poema, querida amiga Hallie.
Observo un giro en tu poesía, tal vez buscando la plenitud del verso, que me parece plausible. En esta ocasión, además, la ausencia de terminología de esa que yo llamo ''dura'', resume una bella y armónica condición de los amores en la sala de espera del hospital del cariño accidentado.
Por la vigilia de los tactos a la hermosura de las letras.
Ha sido un placer leerte. Felicidades.
Te mando un fuerte abrazo.

Magnífico, Hallie.


Cuando te leí esta mañana, pensé: creo que me pilla de camino una tiendita en la que se puede comprar de todo; a ver si les quedan amuletos de ágata y hebras de sol, y ¡qué se prepare el mundo!

No estaba abierta y yo tenía cosas más terrenales que hacer. Cachis. Pero iba pensando en ese "No puedes salvarte, te envuelve la etología de mis dedos."; monDie, y se me ocurrió una maldad (por culpa tuya : )), buenoooo, una maldad chiquita. Total, tal como recogí a mi herna se lo conté, y dijo: no te atreverás, ¿verdad? , yo negué con la cabeza, y fue peor : ) ¿Seguro?, ¿me lo juras?; sí, te lo juro por Snoopy... y claro, amenazó con no acompañarme, asi que...


Aplausos, guajina.

Blanca

María de la Cruz Díaz escribió:Ingenua cara de la pasión el instinto brilla me sus letras. Con admiración a ellas dejo mi saludo

Bendiciones

Maricruz

Muchas gracias Maricruz, por tus conceptos y bendiciones, me quedo con ellas.

Cariños y saludos,

Hallie

Hola Hallie.
El instinto es en más de una ocasión lo que nos salva en esta vida.
Me gustó tu profundo poema. Un abrazo.
Mario.

Pilar Morte escribió:Felicidades por este precioso poema que rezuma erotismo en cada verso.
Aplausos muchos
Un abrazo
Pilar

Gracias Pilar, por tu generosidad y atención!

Un abrazo fuerte,

Hallie

Profundos versos que atrapan,
un gusto estar presente.
Abrazos

Rafel Calle escribió:Hermoso poema, querida amiga Hallie.
Observo un giro en tu poesía, tal vez buscando la plenitud del verso, que me parece plausible. En esta ocasión, además, la ausencia de terminología de esa que yo llamo ''dura'', resume una bella y armónica condición de los amores en la sala de espera del hospital del cariño accidentado.
Por la vigilia de los tactos a la hermosura de las letras.
Ha sido un placer leerte. Felicidades.
Te mando un fuerte abrazo.

Rafel, me alegra mucho tu observación y reflejo. Vamos girando y aprendiendo en el hermoso camino de las posibilidades líricas.

Gracias muchas, por dejar un texto poético tan hermoso al pie de mis letras.

Un abrazo fuerte.

Hallie

Habitas en la primigenia hondura de los astros,

Es precioso Hallie, pleno de sensualidad que tiende a más a medida que avanza el poema, en tu estilo que siempre hace remover algún cimiento y caer en la cuenta de que la palabra es un arma que no siempre hiere, si no que también a veces sana.

Un abrazo

Sara

desde la sensualidad manifiesta
a ese desgarrado comportamiento
que sublima precisamente por su instinto feroz


No puedes salvarte, te envuelve la etología de mis dedos



con aplausos

.

Qué bien describes esa fuerza telúrica(y salvaje)del instinto. Magnífico, Hallie. Besos.

Sopla el torbellino. Agitas palabras, despeinas.

Veo palabras como bustos de mármol que resisten el viento. Es un poema mítico, numinoso.( como diría Rudolf Otto ).



Se tiene la sensación de asitir a una cierta ceremonia, a una gesta pre-física.



Me ha gustado especialmente esta figura: "
la etología de mis dedos." Terrible y bello corolario se me ocurre: los dedos son fieras, son feroces, o son plantas, o tropismos propiamente dichos, y entonces son semillas y son corazones de estrella.





Un saludo cálido para ti desde el Río de la PLata y hasta otro texto



Rafael

Sensualidad plena contada con una extraordinaria elegancia. ¡Qué dominio del lenguaje!
Soberbio. Sin más.
Un abrazo un tanto envidioso.
J. manuel