Editorial Alaire

Vida y muerte con esperanza.

El cielo ruboriza nuestras tierras
y son tantos los caminos
subiendo poco a poco y sin las prisas
a un cielo azul oculto a nuestros ojos.

Son tantas diversidades
que el cielo baja de golpe
quedando perplejo amor encendido
sin agua de lluvia que es disidente.

Van silbando los vientos por caminos
y se pliegan los árboles callados
ante mirada estática y taciturna
entre la vida y la muerte agrupada.

Racimos de personas tan aisladas
que declinan sus mentes en hogueras
calculando la vida con miserias
sin hacer profilaxis hacia metas.

¿Dónde vas celestina entre dos vidas
que crecen alparceros entre mieses
vehementes ababoles
entre la intensidad de espiga y siega?

Se cuecen los panes entre el viento y los molinos,
que surgen de la harina toda masa
con mezcla de aire y agua en remolino
con trilla de amor entre tantos soles.

Cielo y tierra revueltos en los arribos,
repletos los graneros de amor y grano
resuenan cabizbajas las miradas lejanas
que ignorantes nos entran las desgracias

Son sensaciones vivas, diferentes,
que pensando quizás en los ineptos
voy mirando hacia cielos más lejanos
y observo mi interior sin nada dentro.

Mientras tanto pandemias que resisten
olas y olas de muertos con recuentos
que desgranan familias por momentos
separando el amor con suspicacias.

Vivir con la verdad y los engaños
se nos hace difícil el desvío
que tan solo el amor nos lo mitiga,
igual a noche que ama tanto el día.

Es un poema reflexivo, para tomar con calma hondamente, su belleza esta en las preguntas y en las respuestas que nos deja, además, posiblemente me equivoque y pido disculpas por ello, la disposición en un versar tipo alejandrino habla de tu maestría en la poesía. Un saludo cordial.

Buen poema, Simon, la primera y la última estrofa son especialmente bellas, sin desmerecer todas las demás. Me gusta el poso que se queda con su lectura, lo disfruté.

Un abrazo.

Carmen

Gustavo Cavicchia escribió:Es un poema reflexivo, para tomar con calma hondamente, su belleza esta en las preguntas y en las respuestas que nos deja, además, posiblemente me equivoque y pido disculpas por ello, la disposición en un versar tipo alejandrino habla de tu maestría en la poesía. Un saludo cordial.

Gracias amigo por tu visita y tus consideraciones que elevan mi poema.
Abrazos

[quote="Simon Abadia"]Vida y muerte con esperanza.

El cielo ruboriza nuestras tierras
y son tantos los caminos
subiendo poco a poco y sin las prisas
a un cielo azul oculto a nuestros ojos.

Racimos de personas tan aisladas
que declinan sus mentes en hogueras
calculando la vida con miserias
sin hacer profilaxis hacia metas.

Son sensaciones vivas, diferentes,
que pensando quizás en los ineptos
voy mirando hacia cielos más lejanos
y observo mi interior sin nada dentro.

Mientras tanto pandemias que resisten
olas y olas de muertos con recuentos
que desgranan familias por momentos
separando el amor con suspicacias.


Un poema reflexivo que he disfrutado, Simón, yo dejo estas estrofas que me han gustado.
Gracias por compartir y un abrazo.

Me gustó el poema y me quedo con la última estrofa que resuelve con amor la vida.
Abrazos

Carmen López escribió:Buen poema, Simon, la primera y la última estrofa son especialmente bellas, sin desmerecer todas las demás. Me gusta el poso que se queda con su lectura, lo disfruté.

Un abrazo.

Carmen

Gracias Carmen por tu visita amable y por tu reseña con atenciones.
Abrazos

Marisa Peral escribió:

Simon Abadia escribió:Vida y muerte con esperanza.

El cielo ruboriza nuestras tierras
y son tantos los caminos
subiendo poco a poco y sin las prisas
a un cielo azul oculto a nuestros ojos.

Racimos de personas tan aisladas
que declinan sus mentes en hogueras
calculando la vida con miserias
sin hacer profilaxis hacia metas.

Son sensaciones vivas, diferentes,
que pensando quizás en los ineptos
voy mirando hacia cielos más lejanos
y observo mi interior sin nada dentro.

Mientras tanto pandemias que resisten
olas y olas de muertos con recuentos
que desgranan familias por momentos
separando el amor con suspicacias.


Un poema reflexivo que he disfrutado, Simón, yo dejo estas estrofas que me han gustado.
Gracias por compartir y un abrazo.

Gracias Marisa por tu visita, es un gusto leer tus palabras sobre el poema.
Siempre es bueno verte, abrazos

Hermosos trabajo, amigo Simón.
Abrazos.

Pilar Morte escribió:Me gustó el poema y me quedo con la última estrofa que resuelve con amor la vida.
Abrazos

Gracias Pilar por tu visita y tu reseña grata.
Abrazos y cuídate.

Un poema excepcional, lo tiene todo, ritmo y palabra poética que llega adentro, a las cuerdas más potentes de la sensibilidad. Sin duda alguna un trabajo a tener muy en cuenta... y eso, todo un placer de lectura.

Mis sinceras felicidades por esta magna obra.

Abrazos y salud.

Rafel Calle escribió:Hermosos trabajo, amigo Simón.
Abrazos.

Gracias Rafel por tu visita y dejar constancia de ella.
Abrazos

Simon Abadia escribió:Vida y muerte con esperanza.

El cielo ruboriza nuestras tierras
y son tantos los caminos
subiendo poco a poco y sin las prisas
a un cielo azul oculto a nuestros ojos.

Son tantas diversidades
que el cielo baja de golpe
quedando perplejo amor encendido
sin agua de lluvia que es disidente.

Van silbando los vientos por caminos
y se pliegan los árboles callados
ante mirada estática y taciturna
entre la vida y la muerte agrupada.

Racimos de personas tan aisladas
que declinan sus mentes en hogueras
calculando la vida con miserias
sin hacer profilaxis hacia metas.

¿Dónde vas celestina entre dos vidas
que crecen alparceros entre mieses
vehementes ababoles
entre la intensidad de espiga y siega?

Se cuecen los panes entre el viento y los molinos,
que surgen de la harina toda masa
con mezcla de aire y agua en remolino
con trilla de amor entre tantos soles.

Cielo y tierra revueltos en los arribos,
repletos los graneros de amor y grano
resuenan cabizbajas las miradas lejanas
que ignorantes nos entran las desgracias

Son sensaciones vivas, diferentes,
que pensando quizás en los ineptos
voy mirando hacia cielos más lejanos
y observo mi interior sin nada dentro.

Mientras tanto pandemias que resisten
olas y olas de muertos con recuentos
que desgranan familias por momentos
separando el amor con suspicacias.

Vivir con la verdad y los engaños
se nos hace difícil el desvío
que tan solo el amor nos lo mitiga,
igual a noche que ama tanto el día.

Buenísimo Simón, un poema reflexivo de esta realidad que hoy vivimos, y es incierto porque no sabemos
cuando va a terminar.
Lo dije en otro poema, el amor salvará nuestro mundo, por eso yo le canto al amor.
Te dejo mi abrazo, esperanzado a pesar de todo.-Mirta.

J. J. Martínez Ferreiro escribió:Un poema excepcional, lo tiene todo, ritmo y palabra poética que llega adentro, a las cuerdas más potentes de la sensibilidad. Sin duda alguna un trabajo a tener muy en cuenta... y eso, todo un placer de lectura.

Mis sinceras felicidades por esta magna obra.

Abrazos y salud.

Gracias por tu visita y tus palabras que enaltecen mi poema.
Abrazos agradecidos

Mirta Elena Tessio escribió:

Simon Abadia escribió:Vida y muerte con esperanza.

El cielo ruboriza nuestras tierras
y son tantos los caminos
subiendo poco a poco y sin las prisas
a un cielo azul oculto a nuestros ojos.

Son tantas diversidades
que el cielo baja de golpe
quedando perplejo amor encendido
sin agua de lluvia que es disidente.

Van silbando los vientos por caminos
y se pliegan los árboles callados
ante mirada estática y taciturna
entre la vida y la muerte agrupada.

Racimos de personas tan aisladas
que declinan sus mentes en hogueras
calculando la vida con miserias
sin hacer profilaxis hacia metas.

¿Dónde vas celestina entre dos vidas
que crecen alparceros entre mieses
vehementes ababoles
entre la intensidad de espiga y siega?

Se cuecen los panes entre el viento y los molinos,
que surgen de la harina toda masa
con mezcla de aire y agua en remolino
con trilla de amor entre tantos soles.

Cielo y tierra revueltos en los arribos,
repletos los graneros de amor y grano
resuenan cabizbajas las miradas lejanas
que ignorantes nos entran las desgracias

Son sensaciones vivas, diferentes,
que pensando quizás en los ineptos
voy mirando hacia cielos más lejanos
y observo mi interior sin nada dentro.

Mientras tanto pandemias que resisten
olas y olas de muertos con recuentos
que desgranan familias por momentos
separando el amor con suspicacias.

Vivir con la verdad y los engaños
se nos hace difícil el desvío
que tan solo el amor nos lo mitiga,
igual a noche que ama tanto el día.

Buenísimo Simón, un poema reflexivo de esta realidad que hoy vivimos, y es incierto porque no sabemos
cuando va a terminar.
Lo dije en otro poema, el amor salvará nuestro mundo, por eso yo le canto al amor.
Te dejo mi abrazo, esperanzado a pesar de todo.-Mirta.

Gracias por tu visita. Si el amor tiene mucho que ver, pero el humano se deja llevar por otros menesteres.
Abrazos y gracias