Editorial Alaire

No le temo a Dios
sino a la excesiva libertad
que me ha dado
para equivocarme.

Es lo que tiene la libertad. Buen, muy buen, aforismo, Arturo. Mis felicitaciones, compañero. Un abrazo.

Bueno, bueno, bueno, este breve es todo un mundo!!!
Tu ingenio se dispara en estos espacios reducidos, amigo Arturo, me parece realmente muy brillante, un hermoso logro.
Sobre el arbitrium también hay todo un mundo filosófico, religioso, ético, psicológico, científico que todavía se está tirando los trastos a la cabeza por saber si hay determinismo, indeterminismo, fatalismo, libertarismo, etc...
Pero, lo que es indudable es que yo he disfrutado con placer de tu breve...

Un abrazo grande.

Carmen

Muy ocurrente y acertado este breve.
Abrazos
Pilar

Arturo Rodríguez Milliet escribió:No le temo a Dios
sino a la excesiva libertad
que me ha dado
para equivocarme.

Genial! Te felicito Arturo. Nos dejas el sumo de la responsabilidad y de la integridad, en optimas circunstancias, y doblemente, la connotacion implica que es amplio el espacio del libre alberdrio para cometer un sin numero de errores ( pecados). Inteligente y bello poema.
Resulta imposible no errar. Felices Pascuas!

La idea es precisa y bellamente expresada. Pero, no sé yo, Arturo, si la libertad admite superlativos.
Soy libre o no lo soy. Libre en el contexto que siempre es variable.
Entonces, ¿por qué temer ser excesivamente libre?, ¿acaso preferimos que nos restrinjan, que nos conduzcan?
El acierto permanente es inviable, como el error. ¿Acaso la conciencia no nos restringe? Y la conciencia es propia, o ¿es una donación?

No lo sé, solo me pregunto.

Un abrazo.
Ignacio

Digamos que las equivocaciones son fuente de enseñanzas. Así que por mi parte lo tengo bastante claro. Muy bueno este ingenioso poema breve. Un abrazo.

Arturo Rodríguez Milliet escribió:No le temo a Dios
sino a la excesiva libertad
que me ha dado
para equivocarme.

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Brillante trabajo, amigo Arturo. Esencia de complejidad. De todas maneras, no sé si la excusa, por muy divina que sea, te servirá de mucho a la hora de pasar cuentas...
Felicidades por este logro.
Abrazos.

Ignacio Mincholed escribió:Pero, no sé yo, Arturo, si la libertad admite superlativos.
Soy libre o no lo soy. Libre en el contexto que siempre es variable.
Entonces, ¿por qué temer ser excesivamente libre?, ¿acaso preferimos que nos restrinjan, que nos conduzcan?
El acierto permanente es inviable, como el error. ¿Acaso la conciencia no nos restringe? Y la conciencia es propia, o ¿es una donación?

Muy interesante cuestión la que planteas, Ignacio. Yo creo que sí, que la libertad tiene diferentes niveles.
El ser humano no tiene la facultad de ser totalmente libre (pues está sujeto a sus condicionantes naturales y sociales, en menor medida pero parecidos a los de cualquier otro ser vivo del planeta). La cuestión que plantea el magnífico breve de Arturo, a mi entender, es el miedo a equivocarse debido a la especial libertad de pensamiento y actuación que poseemos los humanos, y yo estoy totalmente de acuerdo con dicha reflexión. Tener ese nivel de libertad no nos hace más sabios ni nos garantiza que acertemos en nuestras decisiones,
en realidad es justo al revés. Ante el enorme abanico de posibilidades que nos permite nuestra libertad, errar también es más probable y fácil. La conciencia también se equivoca y no garantiza el acierto, y es que a mayor libertad más probabilidades hay de cagarla por nuestra culpa.

Un abrazo.

Luis M. escribió:Es lo que tiene la libertad. Buen, muy buen, aforismo, Arturo. Mis felicitaciones, compañero. Un abrazo.

Gracias por tu presencia, Luis y por tu receptividad
que valoro mucho. Un abrazo y felices fiestas.

Carmen López escribió:Bueno, bueno, bueno, este breve es todo un mundo!!!
Tu ingenio se dispara en estos espacios reducidos, amigo Arturo, me parece realmente muy brillante, un hermoso logro.
Sobre el arbitrium también hay todo un mundo filosófico, religioso, ético, psicológico, científico que todavía se está tirando los trastos a la cabeza por saber si hay determinismo, indeterminismo, fatalismo, libertarismo, etc...
Pero, lo que es indudable es que yo he disfrutado con placer de tu breve...

Un abrazo grande.

Carmen

Gracias Carmen querida.
Me alegra que con tu agudeza captes mi modesta intención,
lograr que pocas palabras abran la puerta a una basta reflexión.
Mi afectuoso abrazo con el deseo que tengas unas muy felices fiestas.

Un buen breve es un universo completo.